viernes, 29 de marzo de 2013

La dieta mediterránea

no sólo es la reina de los regímenes sino que logró otro galardón: mantener el peso deseado después de un régimen para perder el que sobra. Muchas personas logran seguir una dieta y bajar los kilos que tenían de más. Lo más difícil es mantenerse en el peso deseado una vez que se vuelve a la normalidad. Para evitar recuperar el peso perdido con tanto esfuerzo, hay programas de alimentación especiales, algunos de los cuales pueden incluir asistencia terapéutica y/o sesiones de grupo para compartir experiencias y mantener el entusiasmo y una motivación elevada. La dieta mediterránea demostró ser exitosa y no necesitas grandes sacrificios ni privaciones para seguirla, pues sólo es necesario saber elegir los alimentos entre una amplia variedad de opciones. Así lo demostró un estudio reciente desarrollado por unos investigadores del Centro de Investigaciones Nucleares Negev en Dimona. Los científicos evaluaron a tres grupos de personas que seguían distintos planes para perder peso durante cuatro años: uno seguía la dieta mediterránea, otro una dieta baja en carbohidratos y el tercer grupo no tenía limitaciones de calorías. Al inicio del estudio, la mayoría de los participantes eran considerados moderadamente obesos y luego de cuatro años, quienes seguían la dieta mediterránea no sólo fueron los que más peso perdieron y los que continuaban practicando ese plan alimenticio. Esos resultados, publicados en la revista New England Journal of Medicine, demostraron que los que siguieron la dieta mediterránea tuvieron mejores niveles de colesterol total (es decir, la suma de los valores de todos los tipos de colesterol en la sangre, los de alta y baja densidad más el VLDL, la lipoproteína de más baja densidad), que los participantes de los otros grupos. La dieta mediterránea se basa en comer bastantes frutas, verduras y granos integrales, alimentos que son bajos en grasa y sodio y no contienen colesterol. Del mismo modo, el pan y las pastas, se preparan a base de granos integrales (y no refinados, así no pierden su valor nutritivo), y son una excelente fuente de fibra y contienen vitaminas y minerales.CIDIPAL