MORSI Y EL GENERAL

Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba Las fuerzas armadas pueden estar preparando el terreno para retornar a Egipto al gobierno militar. 28/2/13 por Daniel Nisman En agosto del 2012, parecio como si los una vez omnipotentes generales militares hubiesen sido casi castrados. Despues que un devastador ataque militante mato a docenas de tropas en la Peninsula del Sinai, un recientemente electo Presidente Mohammed Morsi aprovecho la oportunidad para echar al Mariscal de Campo Hussein Tantawi y a una cantidad de otros generales. El Presidente Morsi estuvo facultado por la furia popular luego de 17 meses de incompetente gobierno militar sobre el Egipto post-revolucion. Pero ahora, seis meses mas tarde, los generales del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA) han retornado para desafiar a un Presidente Morsi cada vez mas odiado—muy posiblemente preparando el terreno para traer a Egipto de regreso al control militar. El General Abdel Fattah El Sissi, a quien el Sr. Morsi eligio para reemplazar al Mariscal de Campo Tantawi, se suponia originalmente que tenia simpatia por el liderazgo islamista electo popularmente en Egipto. Quizas fue la oposicion notable a la politica exterior americana exhibida en sus escritos pasados, o el tradicional pañuelo de cabeza usado por su esposa. Sugerir sin embargo que un simpatizante de la Hermandad podria haber llegado a general bajo Hosni Mubarak es ignorar la rivalidad implacable y de decadas de antigüedad del ex dictador con el Islam politico. La primera medida del Gen. Sissi despues de ser nombrado fue hacer una retirada tactica, retirando al ejercito de la esfera politica y restaurando el prestigio que perdio durante el tumultuoso periodo de transicion de Egipto. Desde alli, el Gen. Sissi ha tenido un comodo punto de ventaja desde el cual observar la caida de la testaruda Hermandad Musulmana. No paso mucho tiempo antes que comenzara el espectaculo. En noviembre pasado, el Presidente Morsi hundio al pais en violencia luego de emitir un decreto para ayudar a impulsar un proyecto de constitucion respaldada por los islamistas para referendo. Durante ese periodo de agitacion de un mes, la fisura entre el ejercito del Gen. Sissi y la Hermandad ya habia comenzado a reabrirse. En medio de actuales ataques militares contra complejos islamistas a traves del pais, el Presidente Morsi y sus cohortes se enfurecieron por el rechazo del ejercito a enviar tropas para proteger sus instalaciones. El liderazgo de la Hermandad segun se dice presiono al Presidente Morsi para que rechace la oferta del CSFA de mediar en el dialogo con la oposicion politica. Aun con la economia egipcia en una espiral descendente, surgieron informes en diciembre que el Gen. Sissi habia descartado la iniciativa del Presidente Morsi de permitir a Qatar adquirir tierra en la Peninsula del Sinai para construir centros de descanso turisticos. El razonamiento era que el Gen. Sissi no cederia tierra a extranjeros por las que tantos de sus compatriotas habian muerto combatiendo en guerras pasadas con Israel. Este desafio manifiesto a la autoridad de Morsi, no obstante, probaria ser el primero de muchos destinados a recalibrar el equilibrio entre el ejercito y la Hermandad. En enero llego mas agitacion civil, encendida por el aniversario del levantamiento del 2011, especialmente violenta en Cairo. Para entonces, las relacioens entre la Hermandad y el ejercito habian pasado de mal a peor. La region del Canal de Suez tambien vio choques especialmente horribles despues que un tribunal emitio condenas de muerte contra docenas de residentes de Port Said por su involucramiento en el alboroto mortal del futbol el año pasado. El fracaso del Ministerio del Interior para restablecer el orden en la region mas estrategica del pais obligo a un vacilante Presidente Morsi a hacer una solicitud al ejercito de imponer la ley marcial. Ironicamente, esto dio al Gen. Sissi una oportunidad perfecta para ponerse del lado de la gente de las ciudades del Canal de Suez contra el Presidente Morsi. El Gen. Sissi acepto desplegarse al Canal, pero ordeno a sus tropas proteger la via fluvial misma en vez de someterse al intento del Presidente Morsi por reprimir a una poblacion intranquila. Las escenas que siguieron de los residentes de Port Said marchando en las calles, lado a lado con tropas militares en desafio al toque de queda del Presidente Morsi, cargaban semblanza con las del levantamiento del 2011, cuando oficiales militares fueron recibidos en la Plaza Tahrir por revolucionarios vitoreantes. Esas imagenes emanando de Port Said enseguida dieron lugar a rumores de apoyo a un golpe militar en Cairo. En el Sinai, mientras tanto, el Gen. Sissi ha seguido adelante y fortalecio su posicion con Washington a expensas del Presidente Morsi. La represion sin precedentes del ejercito contra el contrabando a la Franja de Gaza muy recientemente culmino en una campaña para destruir cientos de tuneles en la frontera de Rafah inundandolos con agua. El ejercito se ha asegurado de dar publicidad a cada uno de sus golpes en una afrenta directa a las promesas de apoyo del Presidente Morsi al regimen de Hamas gobernante en Gaza. El Gen. Sissi ha continuado negando publicamente cualquier intencion de tomar el poder a menos que sea "llamado por el pueblo" para hacerlo—una nocion confusa que ha provocado temores de un golpe dentro del liderazgo de la Hermandad Musulmana. El 20 de febrero, la prensa egipcia informo que el CSFA habia estado sosteniendo reuniones a puertas cerradas en ausencia del presidente sobre temas relacionados con la seguridad y estabilidad. Desde entonces, los medios de comunicacion egipcios han estado inundados de rumores sobre un posible plan por parte del presidente para despedir al Gen. Sissi como el lo hizo con el Mariscal de Campo Tantawi. Aunque ambas partes negaron fuertemente esos rumores, mis fuentes en Egipto creen que fueron puestos en circulacion por altos miembros de la Hermandad para poner a prueba la reaccion del publico ante la idea de tal medida contra el Gen. Sissi. Actualmente, ni el Presidente Morsi ni el Gen. Sissi parecen estar en una posicion de dominar uno sobre el otro. Pero la disciplina maquiavelica exhibida por el general puede ser suficiente para durar mas que el politico islamista. La oposicion laica de Egipto continua en desorden, incapaz de probar su valor como una alternativa viable al liderazgo tambaleante del Presidente Morsi. Eso deja al ejercito cada vez mas confiable del Gen. Sissi como la unica entidad con la influencia y organizacion necesarias para traer a Egipto de regreso del borde del colapso. El Sr. Nisman es el director de la seccion de inteligencia para Medio Oriente y Norte de Africa de Max Security Solutions, una empresa consultora de riesgo geopolitico.