AMIGOS DE ISRAEL - CORDOBA (ARGENTINA)

Horario (Bs As) Encendido Velas de Shabat 9/Dic/11 19:43 Hs. - Motzaei Shabat 10/Dic/11 20:43 Hs.

Parasha Vaishláj

BS"D

CON LOS EXTRAÑOS, NI ENEMIGO NI AMIGO

Iaacob escapó de su hermano Esav, que pretendía matarlo. Pasaron muchos años y ahora llegó el momento es que se van a encontrar. Antes de tan trascendental reunión, el pasuk nos cuenta que “temió Iaacob mucho, y se afligió…” (Bereshit XXXlll 8). Y se dirigió en una súplica al eterno:”¡sálvame, por favor, de la mano de mi hermano; de la mano de Esav!”(idem 12).
Llama la atención el hecho de que en su plegaria, Iaacob dice:”de mi hermano….de Esav”, cuando con una sola expresión hubiese sido suficiente. La redundancia se debe a que Iaacob temía de su hermano por las dos maneras en que él se podía presentar:
Por la primera posibilidad,” temió Iaacob”, como dice el pasuk. Y por la segunda, ”se afligió”. Y ahora se entiende la reiteración de los términos en la plegaria que Iaacob elevó a Hashem:” de la mano de mi hermano”, aludía al comportamiento amistoso de Esav, y “de la mano de Esav”, a su forma de conducirse como asesino.
Ante cualquiera de las alternativas, el pedido de Iaacob fue escuchado y Hashem lo salvó. Al principio, Esav quería acabar con su vida, y Hashem lo impidió. Después, Esav buscó la vía de la amistad y la convivencia, y fue allí cuando Iaacob hizo lo posible para no tener ningún contacto con el, por efímero que fuese. El mismo día del encuentro, Iaacob provocó que cada quien siguiera su camino. ¡ni un solo día aceptó compartir su vida familiar! Y de esa manera, Iaacob se vio librado de las dos alternativas que lo acechaban.
(Bet Haleví – Vaishlaj)



¿QUE PROVOCO LA ÚLTIMA CATASTROFE?


Por lo que hemos visto de las palabras de Iaacob en el primer párrafo, a nuestro patriarca le preocupaba mas el hecho de convivir con Esav que el de morir asesinado por él. Pues en primer término menciono que deseaba salvarse de “su hermano”, y después “de Esav”. Y esto es porque si caía en manos de Esav, malvado tal cual es, sólo extrañaba un riesgo físico. Pero si el otro conseguía su propósito de continuar “como hermano”, el peligro ya era espiritual. Esav, además de perverso, era pecador y ateo, y el daño que un Tzadik (justo) puede recibir si se vincula con un Rashá (pecador) es peor que el que recibe si muere en sus manos. Como lo establecieron nuestros jajamím: “es más grave provocar que peque el prójimo, que matarlo”.
Lamentablemente, existen ciertos Iehudim que piensan que, cuanto más se parezcan a los no judíos, serán mejor aceptados por éstos últimos en su seno. Esta errónea ideología, ya conocida desde la época de Iejezkel Hanabi (Hace 30 siglos), quien en una arenga al pueblo, les dijo en una oportunidad: “Esto que a ustedes se les está ocurriendo, no resultará. Cuando ustedes proclaman ser como todos los goim; como todas las demás familias de la tierra que sirven y adoran ídolos de madera y piedras…” (Iejezkel II)
Para replicar a los que pretenden igualarse a los goim, citaremos lo que está escrito en el Midrash acerca del pasuk que compara al Am Israel con al aceite (“Como la fragancia del buen aceite aromático” Shir Hashirim I3): “Así como el aceite no se mezcla con el agua, el Am Israel no se mezcla con los demás pueblos del mundo. HaShem mismo lo dijo: “Y diferenciaré a ustedes de todos los pueblos…” Para siempre, por naturaleza, tiene que quedar esa diferencia firme i vigente. Y todas las Mitzvot y la Torá que HaShem le dio a Su Pueblo no tienen otro objeto que el de marcar con énfasis dicha disimilitud. Y cuando el Am Israel quiera acercarse a los goim abandonando las Torá y Mitzvot, HaShem hará que se separen, infundiendo en estos más odio en sus corazones. Y este odio obrará en beneficio de los judíos, pues evitará que se asimilen”.
La historia nos muestra claramente que el sentimiento antijudío se manifestó de manera más profunda, en los momentos en que el Am Israel pretendió deslindarse de su identidad genuina, y buscó asemejarse a quienes nunca dejaron de ser sus enemigos.
El Zóhar sostiene que los hijos de Israel fueron exiliados por primera vez en el antiguo imperio egipcio, porque ahí, muy especialmente en medio de una nación tirana como esa, los hebreos estarían a salvo de la asimilación.
El “Bet Halevi” escribió, cuando la segunda guerra mundial estaba en su apogeo: “Lo estamos viendo con nuestros propios ojos: Después de tantos siglos de exilio, en Hungría y Rumania, cada vez se acrecienta el sentimiento antijudío. Y de acuerdo a la lógica, dicha ideología tendría que disminuir o pasar de moda, como todas las corrientes que se vuelven obsoletas después de siglos o milenios. Algún día tiene que desaparecer. No obstante, esa discriminación está peor que nunca hoy en día. ¿Por qué? El verdadero motivo es porque mucho de nuestros hermanos están dejando de lado las Mitzvot y la Torá, y esto provocó que HaShem infunda el odio de nuestros enemigos hacia nosotros, para que de algún modo se mantenga la diferencia”.
El Libro “Iemot Olam” transcribe un fragmento de un discurso del Saba Mikélem que pronunció setenta años antes del Holocausto, en ocasión de la guerra desatada entre Prusia (Alemania) y Francia. En aquel momento, el movimiento de los reformistas judíos estaba haciendo estragos en el seno de nuestro pueblo. Éstas son en síntesis, sus dramáticas expresiones:
“Los alemanes no persiguen a los judíos así porque sí. No es casualidad que todo este odio se despertó justo en el momento en que los judíos pretenden ´levantar la cabeza´. Los alemanes se están ajustando a lo que está establecido en el ´Shuljan Aruj´ de ellos (la expresión Shuljan Aruj alude a nuestro código de leyes judías). ¡Hermanos! ¡Presten mucha atención! ¡El ´Shuljan Aruj´ de Geiger (el mentor del reformismo judío, que implantó normas contrarias a nuestra Torá) trajo aparejado otro ´Shuljan Aruj´ de los alemanes, plagado de decretos en contra del Am Israel! ¡En él figura la ley: ´El mejor de los judíos debe ser exterminados´! ¡Que HaShem nos libre…!”
En un hecho similar al anterior, Rabi Israel Salanter ZTz”l dijo, después de que el congreso reformista judío “determinó” que se permitía a los judíos casarse con gentiles: “Esto solo provocará que los gentiles emitan un decreto que prohíba a los Iehudim casarse con ellos “. Noventa años después los nazis le dieron la razón, cuando publicaron las “Leyes de Nürenberg”.
También el Gaon (Eminente Sabio) Rabi Meir Simja Hacohén MiDwinsk, en su Libro “Méshej Jojmá”, pronostico que, como consecuencia de reemplazar el nombre de Ierushalaim por el de Berlín, en el Sidur, vendrán días aciagos para todo el Pueblo Judío. Desgraciadamente, acertó.
Los asesinos del Tercer Reich, no solo persiguieron a todo judío para acabar con él, sino a toda persona que haya tenido al menos un ascendiente judío, lejano en varias generaciones. Mucha gente ni siquiera recordaba que en sus venas corría sangre judía, pero los nazis se encargaron de hacérselo saber… y de derramarla. Mientras ellos pretendían obtener una raza aria pura, se estaba cumpliendo lo que ya estaba escrito por HaShem: “Y los diferenciaré de las demás naciones”…
Todo esto no viene sino a confirmar la filosofía de la Torá respecto a la relación entre El Am Israel y los demás pueblos del planeta. Cuanto mas estrecha es la relación, más peligro espiritual encierra. Por el otro lado, la persecución de los judíos por parte de los enemigos de siempre, es un favor que el Creador nos prodiga, para que se mantenga vigente la indisolubilidad.


(Ialkut Lékaj Tob – Vaishlaj)



NI UNA COSA NI LA OTRA,
SINO TODO LO CONTRARIO

El viento y el sol hicieron una apuesta. Uno desafiaba al otro quien era capaz de hacerle quitar el abrigo al hombre que allí abajo transitaba por la calle. Primero, el viento utilizó toda su fuerza, pero sin éxito. Cuando más arreciaba, más luchaba el hombre en sostener su abrigo y quedar envuelto en él. Le tocó el turno al sol. Éste solo tuvo que dirigir sus rayos, sin ninguna nube que se le interponga, para que después de un rato, cuando el hombre no pudo aguantar el calor, se quite el abrigo y declare ganador al astro rey.
Dos peligros acechan al judío: La persecución física sólo puede debilitar su fidelidad hacia la Torá. Por el otro lado, la amistad y convivencia con los demás pueblos, aparece como más agradable, pero sin duda es la más perjudicial de las dos, porque tarde o temprano, obligará al judío a despojarse de su identidad, sin que éste siquiera se dé cuenta de ello…

(Jatan Sofer Al HaTorá)



LA LECCIÓN DEL EXILIO EGIPCIO

“Y los Hijos de Israel se reprodujeron y se multiplicaron, y se aumentaron y se fortificaron mucho. Y se llenó la tierra de ellos” (Shemot I 7). Inmediatamente después de éste pasuk, que describe la situación de los hebreos en el imperio egipcio, continúa el relato de la dura esclavitud.
La Torá nos quiere mostrar es porque de la esclavitud. Los hijos de Iaakov se establecieron originalmente en la tierra de Goshen, porque así lo había determinado el Patriarca. Allí alejados de la vida imperial, los hebreos vivían como tales, sin entremezclarse con los dueños de casa. Después de varios años, se olvidaron de las palabras de Iaakov; abandonaron (la mayoría) la ciudad de Goshen, y “se llenó la tierra (de Egipto) de ellos”. Los nativos, al ver que los extranjeros invadieron sus territorios sociales y culturales, tomaron la precautoria medida de esclavizarlos. Los que quedaron en Goshen, vivieron todo el tiempo libremente…

(Ha-émek Dabar – Shemot)



(“HAMAOR”; Tomo 2; Kolel MAOR ABRAHAM-KÉTER TORÁ; Ediciones HAMAOR-MÉXICO;





!!