miércoles, 10 de octubre de 2012

ERIC HOBSBAWM Y LOS DETALLES DE LA HISTORIA

Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba Como puede uno explicar las calidas elegias ofrecidas para un disculpador de toda la vida del comunismo sovietico? 5/10/12 por Bret Stephens En 1987, Jean-Marie Le Pen llamo a las camaras de gas de los campos de concentracion nazis "solo un detalle en la historia de la Segunda Guerra Mundial." Explicandose unos años mas tarde, el jefe del Frente Nacional de Francia dijo: "Si tu tomas un libro de 1000 paginas sobre la Segunda Guerra Mundial, los campos de concentracion se llevan solo dos paginas y las camaras de gas 10 a 15 lineas. Esto es lo que uno llama un detalle." Tales comentarios cimentaron la reputacion del Sr. Le Pen como el principal fascista de Europa. Entonces que iba a pensar uno de la recepcion acordada a la publicacion en 1994 de "La Epoca de los Extremos", por parte del historiador marxista Eric Hobsbawm? El libro—subtitulado "una historia del mundo, 1914-1991"—fue aplaudido como "vigorizante y magistral" por el New York Times. "Los hechos se desarrollan en las paginas de Hobsbawm como rayos," dijo efusivamente el New Republic. Pero busquen en el indice, y las palabras "Holocausto" y "Auschwitz" nunca aparecen. Los campos de concentracion nazis tienen unas 10 o 15 lineas. En cuanto a los gulags sovieticos, Hobsbawm les dedico exactamente dos parrafos. Hobsbawm, quien murio en Londres el lunes a los 95 años, no era un negador del Holocausto. Tampoco era ignorante de la cuenta de muerte humana impuesta por el comunismo, la ideologia a la cual el permanecio fiel casi toda su vida. El reconocio que las victimas de la tirania de Stalin "deben ser medidas en ocho en vez de siete digitos", agregando que las cantidades son "vergonzosas y mas alla de la paliacion, por no hablar de justificacion." Pero Hobsbawm las justifico. "Como las empresas militares que tienen genuina legitimidad popular, la vertiginosa industrializacion del plan (de Stalin) de los primeros Cinco Años (1929-41) genero apoyo para la misma 'sangre, esfuerzo, lagrimas y sudor' que impuso sobre el pueblo," escribio el. "Dificil como puede ser de creer, el sistema stalinista..... casi seguramente gozo de apoyo sustancial." El resto del libro esta plagado de racionalizaciones similares. Eso incluyo la observacion que "para la mayoria de los ciudadanos sovieticos la era de Brezhnev significo no 'estancamiento' sino los mejores tiempos que ellos y sus padres, o incluso abuelos, habian conocido jamas." En cuanto a los disidentes sovieticos, ellos eran elitistas "anti-plebeyos" que se "encontraron levantados contra la humanidad sovietica tanto como la burocracia sovietica." Nada de esto debio haber sido sorprendente viniendo de un hombre que, con los años, dio su asentimiento politico a todo desde el Pacto Nazi-Sovietico a la invasion sovietica de Hungria. Cuando se le pregunto en la BBC si el logro de una utopia comunista hubiera justificado "la perdida de quince, veinte millones de personas", el respondio "SI." Entonces que vamos a pensar de la calidez con la cual esta siendo ahora elogiado Hobsbawm? Solo esto: Que el mundo esta lejos de reconocer que los crimenes del comunismo no fueron menos monstruosos que los del Nazismo. Al tratar al gulag como un detalle de su historia, Hobsbawm probo ser el mismo el equivalente moral del Sr. Le Pen. Y al tratar a Hobsbawm como un dechado entre los historiadores, sus admiradores prueban que ellos no han aprendido nada de la historia misma.