La estrecha relación Hamás-Sudáfrica
Por Jonathan Schanzer
Hamás envió recientemente una delegación a Sudáfrica. La comitiva, encabezada por el jefe del politburó del grupo terrorista palestino, Jaled Meshal, y su adjunto, Musa Abu Marzuk, se reunió con destacados dirigentes del Congreso Nacional Africano (CNA), incluido el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma. Al parecer, el CNA suscribió un “acuerdo de intenciones” con Hamás al objeto de establecer una relación de largo aliento. El Gobierno israelí manifestó su “sorpresa e indignación” por la referida visita.
Aunque la indignación israelí puede ser entendible, la sorpresa está fuera de lugar. Pretoria lleva años estrechando lazos con Hamás.
El año pasado, cinco representantes de la libanesa Fundación Internacional Al Quds, sancionada por el Tesoro norteamericano por “estar controlada por y actuar de parte de Hamás”, viajaron a Sudáfrica para participar en una serie de actos. En 2012, la fundación mandó a Sudáfrica al miembro de Hamás Abdul Aziz Umar para promover la liberación de prisioneros de esta última organización. Umar ha sido identificado por Israel como el autor intelectual de un atentado suicida perpetrado por Hamás en Jerusalén en 2003.
En 2011, funcionarios de la embajada de Sudáfrica en Ramala mantuvieron un encuentro público con parlamentarios de Hamás. Pretoria tiene igualmente presencia diplomática en Gaza.
En 2007 el ministro de Inteligencia de Sudáfrica, Ronnie Kasrils, invitó al primer ministro de Hamás en Gaza, Ismaíl Haniyeh, a encabezar una delegación a Sudáfrica. Kasrikls demandó que la comunidad internacional levantara el embargo impuesto a Hamás desde su victoria electoral de junio de 2006.
El histórico abrazo de la causa palestina por parte de líderes sudafricanos es bien conocido. Célebremente, Nelson mandela elogió en 2004 al líder de la OLP Yaser Arafat como “uno de los más destacados luchadores por la libertad de esta generación”. Ahora bien, aunque Mandela era crítico con sus políticas, reconocía el derecho de Israel a existir.
Los estrechos lazos de Sudáfrica con Hamás, un grupo que busca la destrucción de Israel, es un desarrollo preocupante. Durante su alocución en Ciudad del Cabo, Meshal prometió que la violencia de Hamás contra Israel proseguiría. Ni el CNA ni el Gobierno sudafricano condenaron esas palabras, lo que sólo puede ser interpretado como una aprobación tácita de la actualcampaña de violencia de Hamás en Jerusalén y la Margen Occidental.
© Versión original (en inglés): Foundation for Defense of Democracies
© Versión en español: Revista El Medio
© Versión en español: Revista El Medio
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.