La caricatura que enfureció a la Unesco

La caricatura que enfureció a la Unesco


La caricatura de Eran Wolkovsky que no gustó en la UNESCO

La caricatura de Eran Wolkovsky que no gustó en la UNESCO
El embajador israelí ante la Unesco, NimrodBarkan, fue llamado a consultas por un importante funcionario de esta organización de la ONU dedicada a la educación, ciencia y cultura. Pensando que iba a ser "recriminado" por la decisión de su Gobierno de congelar su contribución económica a la Unesco-al igual que EE.UU- en protesta por la admisión de Palestina como Estado de pleno derecho, Barkan fue sorprendido por el motivo de la conversación.

En la mesa del despacho de Eric Falt, asesor del director general de las Relaciones Públicas, le esperaba una caricatura publicada el pasado 4 de noviembre en el diario israelí Haaretz. Humor que sentó muy mal a los dirigentes de Unesco.

Eran Wolkovsky (Haaretz) autor de la polémica caricatura.

En el dibujo y en clara alusión a los planes, cada vez más cercanos, de un ataque aéreo israelí contra las instalaciones nucleares iraníes, el primer ministro Benjamin Netanyahu y el titular de Defensa, Ehud Barak, dan las últimas instrucciones en una base militar. Finalizando su mensaje sobre el bombardeo en Irán, Netanyahu pide a los cuatro pilotos: "Y a la vuelta, ¡bombardeáis la oficina de la Unesco en Ramala!".

Un satírico dibujo que puede ser interpretado de varias formas. Como ácida crítica a los siameses Barak-Netanyahu en su empeño de acabar por la vía militar con lo que consideran "amenaza existencial" y de paso ajustar cuentas con la Unesco por aceptar la petición palestina para ser un país más miembro de esta organización. El autor Eran Wolkovsky quiso combinar una crítica al mensaje belicista de su jefe de Gobierno ante el Irán nuclear con el enfado en Israel ante la agencia de la ONU.

En la sede de la Unesco, sin embargo, la caricatura no ha provocado sonrisas sino enfado y honda preocupación."Esta caricatura pone en peligro la vida de nuestra gente allí, que son diplomáticos desarmados. Vuestra obligación es protegerlos. Sabemos que hay libertad de prensa en Israel peso el Gobierno debe evitar ataques contra la Unesco", le dijo Falt que definió la caricatura como "incitación". Por último, le entregó una carta de protesta oficial firmada por la Directora General de la organización. Irina Bokova

Según cuentan fuentes de Exteriores, el sorprendido Barkan respondió al interlocutor de Unesco: "Efectivamente tenemos libertad de expresión y de prensa por lo que el Gobierno no puede controlar todas las caricaturas que salen. Pregúntense que han hecho ustedes para que un diario moderado y con profundo compromiso internacional como Haaretz publique una caricatura de este tipo. Quizás el problema esté en la Unesco".

"Es irónico que recibamos una protesta oficial por algo publicado en el medio que más critica la política del Gobierno. Si nos dedicáramos a protestar por sus artículos o caricaturas, no tendríamos tiempo para trabajar", explican fuentes israelíes a EL MUNDO.ES mientras el ministerio de Exteriores- según revela Haaretz- envió un irónico telegrama de respuesta a Barkan: "¿Qué quieren exactamente en la Unesco? ¿Que enviemos nuestros mejores chicos a defender a los representantes de la Unesco? ¿O que cerremos el diario? Parece que el entorno en el que trabajas se va pareciendo cada vez más a una granja de animales".

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