domingo, 10 de noviembre de 2013

Estimados amigos de ReVista:

Estimados amigos de ReVista: Los invitamos a escribir al periódico El Mundo, de España, en respuesta a un artículo publicado en ese diario el día 5 de noviembre, firmado por Antonio Gala en el espacio La Tronera y titulado “Netanyahu”, en donde el autor compara a la “inteligencia judía” con el “nazismo” y arremete contra Israel y los judíos de varias maneras. Gala escribe, entre otras líneas, las siguientes: “ISRAEL no es esfuerza por adquirir buena fama: al minuto y medio de afirmar que busca la paz, provoca una nueva ola de violencia”. “(…)Israel – una raza más que un pueblo – no hará nunca nada que contradiga la aversión – o al menos la desconfianza – que suscitan sus gobiernos. Quizá ningún pueblo haya sufrido tanto como el judío por el simple hecho de serlo. Pero también es cierto que, prescindiendo de los extremos que caben dentro de tal nombre, se apresura a buscarse el temor o la enemistad de quien tiene en su entorno. Y la absoluta desconfianza”. “La inteligencia judía – yo creo que existe – es envidiable y reconocida; pero también su errátil proceder, salvo para sobrevivir en todo caso. Y, sin duda, a costa de quien sea y lo que sea. Como el propio nazismo”. Ante esta afrenta, Masha Gabriel, directora de ReVista de Medio Oriente /CAMERA en español, envió una carta al director del diario El Mundo. Reproducimos la carta al final de esta Alerta. Para favorecer la publicación de su carta, siga los siguientes pasos: Escriba a la siguiente dirección de correo electrónico: · cartas.director@elmundo.es · No exceda las 30 líneas mecanografiadas. · Incluya su nombre y número de identificación personal. · Y sea respetuoso en su escrito para incrementar las posibilidades de publicación de su carta. Recomendamos que utilicen la carta modelo para elaborar sus argumentos, pero los invitamos a redactar en sus propias palabras. No olvide difundir entre sus amigos y conocidos la labor de ReVista de Medio Oriente. Muchas gracias, amigos. ReVista de Medio Oriente Agréguenos en Facebook: ReVistamo y Twitter: @revistamo “Estimado señor Director, Permítame que me dirija a usted con una preocupación que en varias ocasiones he transmitido a su medio y que, a pesar de su gravedad, siempre queda desatendida . Vaya por delante el absoluto respeto por la libertad de expresión, algo que usted y su periódico llevan años abanderando con gran éxito. Todas las opiniones tienen derecho a ser escuchadas y expresadas sin que sobre ellas se ejerza censura alguna. Pero ¿qué sucede cuando esas expresiones consisten en un mensaje de odio a una minoría? ¿Debemos permitir que esa libertad de expresión se convierta en libertad de difamación? Eso es en lo que el señor Antonio Gala lleva años incurriendo a través de sus troneras en El Mundo. Desde su periódico, el señor Gala ha dado rienda suelta a su obsesión contra los judíos a quienes ha acusado, entre otras cosas, de no tener “freno a la avaricia” (El Mundo- La Tronera- 05/02/ 2009) o de ser una “pulga humana” que “debería tomar consciencia de sí misma y desaparecer” (El Mundo-La Tronera- 16/03/2011). El autor también ha justificado las persecusiones, los asesinatos y el genocidio de judíos dando a entender que algo habrán hecho las víctimas para merecerlo. (El Mundo-La Tronera- 05/02/2009). En su reciente Tronera del 05/11/2013, con la excusa de criticar al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el señor Gala vuelve a mezclar conceptos dispares de forma confusa y críptica, creando así una amalgama argumentativa contra los judíos. Comparación con el nazismo incluída. Disociado de la tozuda realidad, el señor Gala acusa a Israel de “provocar una nueva ola de violencia”, para después justificar los supuestos errores israelíes en los supuestos errores de su “raza”, su “errátil proceder, salvo para sobrevivir en todo caso. Y, sin duda, a costa de quien sea y lo que sea. Como el propio nazismo.” Dada esta comparación del judaísmo con el nazismo resulta irónicamente malintencionada su afirmación de que la “inteligencia judía” existe. El señor Gala parecería el paradigma del filósofo Jean Claude Milner quien en El Judío de Saber, destacaba cómo “la figura del judío de saber despierta la admiración y luego el odio, hasta estrellarse contra lo real del exterminio." El señor Gala tiene todo el derecho de odiar, envidiar o amar a los judíos. Nada tienen que ver sus opiniones y fobias personales con sus capacidades literarias con las que deleita a sus lectores. Pero un medio no puede convertirse en una tronera para el odio y la difamación. Es importante que de, algún modo, El Mundo ponga fin a la barra libre de hostilidad contra los judíos de la que disfruta el señor Gala. De lo contrario, será cómplice y propagador de un discurso de incitación al odio. Atentamente, Masha Gabriel Directora ReVista de Medio Oriente/CAMERA en español”