lunes, 30 de marzo de 2009

ANALISIS: LA JUSTICIA TARDIA CONTINUA LLEVANDO UN MENSAJE PODEROSO‏

By EFRAIM ZUROFF

Tomo muchos enervantes meses, pero ayer los fiscales alemanes finalmente anunciaron la decision que era largamente esperada en Washington e Israel. Alemania buscara la extradicion del criminal de guerra ucraniano Ivan Demanjuk de los EEUU por crimenes que el cometio en el campo de muerte Sobibor.
Como su primer paso en aquel proceso, ellos emitieron una orden de arresto para el ex wachmann (guardia de campo), quien tambien sirvio en el campo de muerte Majdanek, el campo de entrenamiento de las SS en Trawniki, Polonia, y los campos de concentracion en Flossenberg y Regensberg en Alemania.
Asi parece que un cierre podra finalmente ser alcanzado en uno de los mas prominentes, aun no comprendidos casos de un criminal de guerra nazi en tres decadas. Parte de la confusion radica en la situacion legal en los EEUU, donde criminales de guerra nazis no pueden ser acusados por cargos por sus crimenes de tiempos de guerra, debido a que fueron cometidos fuera de los EEUU y no contra ciudadanos americanos. Bastante mas que ignorar a los numerosos perpetradores del Holocausto que emigraron a America bajo falsas identidades, los EEUU decidieron presionar los cargos contra ellos por violaciones a las leyes de inmigracion y naturalizacion, pero la pena maxima para esas ofensas fue la perdida de la ciudadania americana y la deportacion. Asi, cuando Demjanjuk fue originalmente sentenciado en los EEUU por estos crimenes (sobre la base de su identificacion como "Ivan el Terrible", quien opero las camaras de gas en el campo de muerte de Treblinka y asesino a cientos de miles de judios), los americanos intentaron asegurar que el tambien seria juzgado por cargos criminales y castigado por estos crimenes. Esto llevo a su extradicion a Israel, donde el podria ser juzgado por genocidio y crimenes contra el pueblo judio, lo cual serian cargos mucho mas apropiados en este caso.
Demjanjuk fue originalmente sentenciado y sentenciado a morir en Israel, pero durante su proceso de apelacion, dudas se elevaron respecto de su identidad como "Ivan el Terrible" de Treblinka, luego que el testimonio se encontro 30 ex guardias del campo que fueron juzgados en Kiev y testificaron que el ucraniano llamado "Ivan el Terrible" que operaba las camaras de gas tenia una enorme cicatriz sobre su mejilla, lo cual no era el caso de Demjanjuk.

Como resultado, la Corte Suprema israeli, contrariamente a la percepcion popular, no absolvio a Demjanjuk, sino que lo condeno por un crimen menor- membresia en una organizacion nazi, lo que llevo a un castigo de siete años en prision. El ya habia cumplido ese tiempo y fue por lo tanto expulsado del pais.

Demjanjuk pudo retornar a los EEUU y recuperar su ciudadania americana; pero para credito de la Oficina de Investigaciones Especiales en el Departamento de Justicia americano, ellos nuevamente lo acusaron, esta vez por su servicio como guardia en Sobibor, Trawniki, Flossenberg y Regensberg.

Ellos tuvieron exito en quitarle la ciudadania americana y obtuvieron una orden de deportacion, pero hasta el miercoles, ningun pais estaba dispuesto a aceptarlo y acusarlo por su papel en los asesinatos en los campos en los que sirvio.

Asi, la decision del miercoles de los fiscales alemanes es de gran significado, porque crea una fuerte probabilidad que una persona que participo activamente en los asesinatos masivos de judios no solo sea juzgado, sino finalmente obtenga un castigo apropiado. El hecho que esto este teniendo lugar mas de 60 años despues de la guerra envia un poderoso mensaje que el paso del tiempo de ninguna manera disminuye la culpàbilidad de los perpetradores del Holocausto y que la vejez no debe significar un refugio para los despiadados asesinos.

Esperanzadoramente, como en el caso del juicio de Eichmann en 1961, que desperto renovados esfuerzos en Alemania para acusar a los criminales nazis que de otra manera podrian jamas haber sido llevados a juicio, yo sinceramente espero que la decision de acusar a Demanjuk ayude a crear la voluntad politica para llevar a mas criminales de guerra nazis a la justicia e inspire a aquellos paises a enfrentar este asunto para proceder con el coraje y determinacion requerida para responsabilizar a los perpetradores del Holocausto.

La justicia tardia, con todos sus problemas, continua enviando un muy poderoso mensaje acerca de cual debe ser nuestra actitud con aquellos que cometieron asesinatos en masa.

El autor es director de la Oficina Israel del Simon Wiesenthal Center - www.operationlastchance.org.

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