miércoles, 28 de enero de 2009
Los sueldos de los parlamentarios israelíes
Knesset (parlamento israelí) resolvió anular el aumento de sueldos aprobado para los miembros del Parlamento, fijado en 3% para el año 2009. Su promotor, David Tal, declaró que "La resolución constituirá un ejemplo, un símbolo y un mensaje de los representantes hacia el pueblo, por su decisión de congelar sus sueldos en momentos de crisis para no afectar su imagen pública".
La resolución tendrá vigencia durante el 2009 y fué tomada por la Comisión que determina las condiciones de empleo de los miembros de la Knesset y las normas de trabajo. El Jefe de la Comisión es el diputado David Tal (Kadima) quien propuso la medida y resultó aceptada por la Comisión Pública que orienta en temas de sueldos y condiciones de trabajo de los miembros de la Knesset.
El sueldo de los diputados es ajustado a los sueldos promedio. El índice de aumento promedio para enero es de 3% y los miembros de la Knesset recibirían un incremento de 900 shekalim (de acuerdo a un sueldo mensual de 32 mil shekalim). Sus ingresos son actualizados 4 veces al año y la Comisión debatirá la reducción de esa recomposición, a una vez anual.
"Se trata de un aumento poco significativo, ya que los parlamentarios no reciben un sueldo alto en comparación con otras funciones en el mercado de trabajo", dice Tal. "Pero la resolución de congelar persigue el objetivo de representar un ejemplo y un mensaje hacia el pueblo".
El responsable de sueldos en el Ministerio del Tesoro, Ilan Levin, informó en el debate que el Tesoro evalúa la posibilidad de congelar los sueldos del resto del servicio oficial y del sector público, a punto de recibir el aumento de enero, de acuerdo a las mediciones de precios al consumidor.
"El paso dado por la Knesset, nos alienta en esa dirección", dice Levin. Por ahora no hay una predisposición a congelar los sueldos de clases más débiles y, si llega ese momento, se hará con el consentimiento de la Central de los Trabajadores. Si bien reconoció que el tema está siendo evaluado, se resolvio no afectar a los trabajadores sino a los que mantienen un poder adquisitivo respetable y pueden ayudar en el fortalecimiento del mercado.
Fuente: Ynet 23-12
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