Carta a Adolfo Pérez Esquivel desde Israel‏

Sembrando vientos y tempestades
Carta a Adolfo Pérez Esquivel



Hola Adolfo:

Al leer tu carta que por casualidad ingreso en mi casilla de correo, me llegaron muy agradables recuerdos tuyos que vienen desde esa nefasta y negra época de la Argentina, de la dictadura militar de los Videla y de los Massera. Aunque tú no me conozcas, yo ya te admiraba por esa época, cuando nos llegaban noticias de tus valientes y pacificas luchas para defender los Derechos Humanos y apoyar a los familiares de las victimas de la dictadura de los tenebrosos militares de los setenta. Cuando recibiste el Premio Nobel de la Paz en 1980, por tu compromiso y protagonismo en el Servicio de Paz y Justicia fue como si los premiados hubiéramos sido todos aquellos argentinos que perseguíamos una sociedad mas justa y mas humana.

Creo que tu amigo, al que haces referencia, estaba sinceramente muy preocupado y dolorido por los bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza; el probablemente no estaba enterado que los violentos fundamentalistas islámicos venían golpeando fuerte con sus modernos misiles iraníes a alrededor de 1.000.000 de habitantes cuyo único delito cometido es vivir en paz en el sur de Israel; el te contaba de la existencia de esas supuestas masacres que nunca ocurrieron en la realidad y quizás el desconocía de que el derecho internacional considera que toda vivienda, escuela, edificio, donde se esconden armamentos y se abre fuego contra el territorio de un estado soberano, sobre su población civil o sobre las fuerzas que ejercen el derecho de legítima defensa, como objetivos militares.

No se que ocurrió con tus últimos años y tu contacto con la realidad pero quizás no te hayas enterado de que Israel se retiro voluntaria y unilateralmente ya hace como tres años de Gaza, sacando por la fuerza a miles de israelíes que vivían y trabajaban pacíficamente allí, esperando así, con su buena fe e inocencia, gozar de muchos años de paz y tranquilidad en la zona. Nuestros poblados, ciudades, kibutzim y moshavim que son actualmente blanco cotidiano del bombardeo de Hamas, no son ningunos asentamientos ni zonas ocupadas sino sencillamente territorio israelí reconocido legal y legítimamente por las leyes internacionales. Debes buscar y enterarte en las bibliotecas o paginas de Internet de lo que son en la realidad o que status tienen Beer Sheva, Ashkelon, Sderot, Ashdod, Kiriat Gat, etc. Supongo que en tus épocas universitarias o en tu trabajo profesional fundamentabas tus actividades y trabajos con datos y parámetros auténticos y veraces.

Luego de tantos intentos de dialogo y treguas que fracasaron rotundamente dices que no quieren llegar a una solución del conflicto, no aclaras quien no quiere pero supongo que hablas de los muchachos de Hamas que están abocados desde hace muchísimo tiempo a realizar una limpia y prolija tarea junto a Irán y Al Kaeda de borrar a Israel del mapa, al ultimo que se le ocurrió una idea así de original fue a Adolfo Hitler en la década de los cuarenta pero como no existía Israel con sus valientes soldados, tenían a mano a las indefensas comunidades judías europeas en su reemplazo y a su merced.

Las reiteradas soluciones de la ONU para poner fin al conflicto y buscar una salida política ya hace tiempo que hubieran terminado definitivamente con la existencia del Estado de Israel pues con su rotunda parcialidad no le hubieran permitido defenderse ni cuidar de su población y hoy toda la región seria una republica islámica de Palestina y los judíos y cristianos que hoy viven armónicamente allí estarían muertos, exiliados o sometidos al yugo de la humana y bondadosa ley religiosa islámica aplicada a rajatabla y sin contemplaciones algunas. Si se hubiera aplicado la resolución del año 1948 sobre la constitución de dos Estados, el de Israel y Palestina y nuestros vecinos árabes no la hubieran rechazado como lo hicieron para echarnos al mar, tendríamos paz y armonía desde hace sesenta años. Israel fue el único que aceptaba dicho plan, decididamente.

Hoy coincido completamente contigo de que el pueblo palestino tiene los mismos derechos que los israelíes pero lamentablemente les son negados de ejercerlos, en forma hipócrita y cínica, por sus corruptos y fanatizados dirigentes e ideólogos y no justamente por Israel a quien se lo intenta colocar como el nuevo y posmoderno chivo emisario de las naciones en estas complejas épocas de la globalización de la mentira y de la infamia.

Los hechos están a la vista y son incuestionables, cuando un pseudo estado terrorista comete atrocidades contra otro pueblo o contra su propio pueblo, viola el derecho internacional y sus inexistentes leyes propias trasformándose simplemente en lo que siempre fueron, una banda de terroristas y asesinos teocráticos. Los terrorismos, los fanatismos laicos o religiosos, los modernos islamo fascistas no deben tener lugar en este sufrido y maltratado mundo, que se merece a esta altura de la Historia algo más justo y mas digno que estados islámicos teocráticos y terroristas.

Dices: ¿Israel, hasta cuándo continuarás oprimiendo a tus hermanos? ¿Hasta cuándo continuarás sembrando la muerte, torturas y justificando lo injustificable para destruir al pueblo palestino? ¿Tienes la respuesta, o sólo escuchas la sordera de tu propia voz? De que opresión hablas? Que muertes, torturas y destrucción declamas? A que destrucción te refieres? Creyendo de que eres alguien bien intencionado, no te entiendo, no comprendo tu sordera o tu ceguera, ni tu supuesta ignorancia de una realidad que no te atreves a reconocer. Si te dieras una vuelta por Israel para recorrer y mirarlo todo, con la absoluta libertad como lo hacemos tanto los israelíes como los visitantes, te darías cuenta de que a pesar de tu Premio Nobel, de tus estudios universitarios y de tu prestigio eres un esclavo de preconceptos, de dogmatismos, de prejuicios dignos de seres entre los cuales no te contaba ni siquiera en sueños.

Israel no olvida de su propia historia ni del horror del holocausto ni de sus dos mil años de persecuciones y humillaciones, ni de los que dieron su vida por la libertad ; precisamente por esto lucha a brazo partido contra estas bandas terroristas que no son el pueblo palestino, ni son los niños y mujeres desvalidos que muestran las fotografías de los prestigiados medios internacionales de comunicación, ni son la misma humanidad, todos ellos son los reales rehenes de la Yihad islámica mundial con la que simpatiza tanto nuestra izquierda ilustrada.

Adolfo, no hagas a tu hermano lo que te hicieron contigo. No inundes esta gran confusión con mas confusión pues tu parcialidad y supuesta ignorancia tira por la borda tantas luchas, tantos años de sacrificio, tanta búsqueda de justicia, que te elevaron como persona y como luchador por los derechos humanos, aléjate del fango de los violentos e intolerantes de turno, de los Luis D'Elia, de los Quebracho, de los terroristas islámicos que en tristes día mancillaron nuestra querida patria con los funestos y sangrientos atentados contra todos nosotros los argentinos, en la Amia y en la Embajada de Israel. Desarma la razón armada pues no nos harán bien a ti, ni a mí, ni a toda la humanidad.

Escuchemos el clamor de nuestros hijos, de todas las organizaciones que buscan un mundo mejor, de las diversas comunidades religiosas, de los grandes pensadores honestos y orgullosos de su misma esencia, tanto en Argentina, en Israel y en el Mundo; son voces dignas de escuchar por vos, por mí y por todos. Los intentos y esfuerzos por la paz realizados por Shimon Peres, actual Presidente de Israel y Premio Nóbel de la Paz, siguen adelante, no están vacíos de contenido, no son una farsa, solo síguelo escuchando como antes, igual que siempre, a veces fallan tus oídos y no los que emiten las palabras. Nuestro Shimon Peres es un verdadero modelo de estadista mundial, a pesar de que a veces no concuerdo en todos sus pensamientos, pero lo evidente de el nos es imposible negarlo.

Dices: Israel, haz provocado una profunda herida a la humanidad marcada en tiempos de odio, de guerra, de dolor y muerte, donde el terror es el común denominador y contamina a las nuevas generaciones ¿Olvidas que lo que siembras recoges?
Hay que despertarte Adolfo, hay que sacudirte un poco, estas repitiendo atrocidades que escuchaste en los círculos violentos que te atraparon en su laberinto intrincado de mentiras y de violencia, de oscuridades y de engaños, lo lamento por vos y por mi Adolfo.

Finalmente coincido contigo en que necesitamos transformar las espadas en arados, escucha pues tú también al Profeta Isaías. Necesitamos proveernos de la voluntad política y de la decisión clara del espíritu para actuar con dignidad y sabiduría. Surgiría así una excelente oportunidad para que estos oscuros nubarrones que ensombrecen tu otrora imagen de luchador por los Derechos Humanos, desaparezcan.

Un ex admirador tuyo, bastante frustrado y desencantado por lo que hicieron los años y la realidad contigo pero con la ferviente esperanza de que todo esto haya sido solo un mal sueño o una momentánea confusión.

Guido Maisuls

Kiriat Bialik, Israel.

Enero del 2009



"y juzgará entre las naciones y
reprenderá a muchos pueblos;
y volverán sus espadas en rejas de arado,
y sus lanzas en hoces; no alzará espada
nación contra nación, ni se adiestrarán
más para la guerra" (Isaias 1,4)