jueves, 24 de febrero de 2011

Extractos de los comentarios del primer Ministro Netanyahu en el Parlamento israelí


de febrero, 2011
(…) Llamé al Primer Ministro de Nueva Zelanda, John Key, y le ofrecí ayuda. Contamos con una buena cantidad de experiencia segura en limpieza de ruinas y tareas similares, y le dije: “Sr. primer Ministro: están sufriendo un terremoto, y nosotros, también, estamos sufriendo un terremoto”. Pero el nuestro está cubriendo una extensa zona del mundo, desde Afganistán hasta el Magreb; desde el paso de Khyber hasta el Estrecho de Gibraltar; la tierra se mueve. Está derribando edificios en algunas áreas, socavando sus cimientos en otras. El temblor continúa y no cesará.Lo vimos en Túnez, luego en Egipto, Yemen, Bahrein, Libia y aún está lejos de terminar. Pero hay diferencias; cada país es diferente, pero hay una sola cosa en común para la región entera: es una zona extremadamente volátil.
¿De dónde proviene esta inestabilidad? Proviene del hecho que, el progreso y las reformas políticas y económicas, que se diseminaron a través del mundo durante el siglo XX, en gran medida contuvieron al mundo árabe y a gran parte del musulmán. Llegó el siglo XXI con todo el nuevo poder tecnológico y la información, no solo con Al -Jazeera, a través de Internet y redes sociales con las que estamos familiarizados; y eso impacta en esas sociedades golpeándolas con dureza, exponiendo a sus ciudadanos sobre lo que se habían perdido. Eso causó una enorme agitación dado que, esos cambios, no ocurrieron gradualmente, permitiendo el liberalismo económico y político.
Hay un lugar – en esa región - donde ese shock no ocurrió y, ese lugar, no fue arrojado al tumulto. Este lugar es el Estado de Israel. La razón por la que Israel no está sujeto a la confusión es debido a que somos un país democrático, liberal y de avanzada. Tenemos muchos defectos, pero, básicamente, somos uno de los países más avanzados del mundo, con una economía sana, crecimiento y libertad; es un lugar donde podemos ponernos de pie o tomar asiento en la Knesset, nuestro parlamento, y decir lo que se piensa. Tenemos permiso y gran libertad.
Por tanto, estamos en un periodo de transición y, esta transición y la inestabilidad que puede traer, tal vez continúe durante muchos años. Anhelamos y hacemos lo mejor que podemos y, espero, que el mundo árabe, así como Irán, se conviertan en verdaderas democracias. Si alcanzamos ese punto, tendremos la base para la estabilidad y la paz.
Amigos: Son bien concientes del hecho que hay otras posibilidades. Debemos prepararnos para cualquier escenario. La mejor manera en que lo haremos es leyendo la realidad tal como es. Esta inestabilidad, en la que vivimos, ya está siendo abusada por fuerzas negativas y un oscuro despotismo activo en todos los países que mencioné, intentando balancear el resultado hacia algo que ninguno de nosotros quisiera. Esos resultados no serían agradables para nadie que lucha por el progreso y la paz.
Leer la realidad requiere que aceptemos las cosas tal como son. El mundo no siempre las ve al principio; vienen de sorpresa. La mayor parte del mundo nos dijo que la razón de la inestabilidad en Medio Oriente, el epicentro del terremoto y la causa de la inseguridad es el conflicto árabe-israelí. Eso es lo que dijeron.
Nosotros lo expresamos de otra manera: tenemos un problema y queremos resolverlo. Pero, además, sabemos que esta región no es estable, y lo dije desde este podio y también lo hicieron mis colegas. Dije que, en tanto buscamos una solución, debemos tomar en cuenta esa inestabilidad de las fuerzas islamistas extremas que ingresan a cada lugar, incluyendo sitios que dejaron o deberían abandonar.
No es esta la primera vez que me refiero a esto y no es la primer Knesset en la que lo confirmo. A propósito de leer la realidad, hace cinco años dije que si abandonábamos Gaza, Hamas tomaría el poder. En ese momento, dijeron que atemorizábamos a la nación.Cuando renuncié al gobierno, dije que Irán podría armar a Hamas luego que éste subiera al poder; darle miles de misiles. Y dijeron que estábamos alarmando al pueblo. Entonces, a renglón seguido, afirmamos que, Hamas, dispararía esos misiles, no solo hacia Sderot, sino también sobre Ashkelon, Ashdod y Be´er Sheva.Y, otra vez, se dijo que estábamos alarmando a la gente.
Dijeron: el miedo no es la política. Y tienen razón. Pero tampoco el engaño. La política es, ante todo, que vean la realidad; leerla y aceptarla tal como es. Y los insto hoy a dejar esa línea de razonamiento. Aceptar la realidad, ver lo que está sucediendo. Eso requiere aceptar el hecho que nos encontramos en una región volátil, y todos podemos confiar en nuestra propia fortaleza, unidad y determinación para protegernos. Deseamos realizar compromisos por la paz pero sin implicar nuestra seguridad. Si se nos pide conciliar con un acuerdo de paz que nos desarme en nuestra defensa, les dijo que no habrá paz ni seguridad. Y somos categóricos en eso.
Hay, hoy, una debate, en esta Casa, en ambas partes, de si tener (o no) un socio debemos saber cuán comprometido está con la paz, si desea convertirse en estable, y si llegará. Hay un debate y quisiéramos verlo llegar aquí o iríamos hacia él. Porque nunca sabremos si no hablamos. Y, ellos, se rehúsan a hacerlo. Dicen que deberíamos darles todo lo que quieren y entonces se sentaran junto a nosotros. Ese es un modo de negociar…Pero, ni siquiera, dijeron eso. Esta ese debate y otro, que todos tienen conocimiento, sea si se dice fuerte o no. Debería haber una discusión con relación a nuestro socio hoy, pero hay incertidumbre sobre si habría, en el futuro, un socio.
Les diré algo que todos sabemos- al menos los miembros árabes de la Knesset lo saben- que nadie puede prever lo que pasará al oeste nuestro. Créanme! Aun las mentes más inteligentes y las agencias de muchos países no lo predijeron, y no pueden decirnos cuándo terminará. No sabemos lo que tendremos al oeste o al este nuestro. No sabemos si nada pasará o si algo surgirá de allí. ¿Quién puede asegurarnos que , en medio de todo esto, un Estado palestino se sostendrá?
De manera que, ¿qué conclusión podemos extraer? Si oyen, escucharán.
Amigos, miembros de la Knesset, Todos saben que lo que digo es verdad. Es probable que sepan que, un acuerdo de paz, no garantizará la paz de la región, donde las relaciones oficiales ( o no oficiales) pueden evaporarse en un instante. Eso ocurrió con las relaciones de-facto que teníamos con un país; lazos económicos y otros se disiparon en un abrir y cerrar de ojos cuando Irán tuvo la revolución en 1979.Y también ocurrió con relaciones más fuertes, más formales y más establecidas con otro país; relaciones que, incluso, comprendían maniobras militares conjuntas. Y, entonces, 400.000 turistas desaparecieron de la noche a la mañana cuando, en Davos, el primer Ministro turco atacó al presidente Shimon Peres y marcó un drástico cambio en la dirección de la política turca. Por supuesto, espero que las cosas vuelvan atrás tal como eran.
Hoy, sabemos que necesitamos estar seguros que los acuerdos de paz con Egipto y Jordania sobrevivirán y se harán más fuertes. Ese es el motivo por el que cuando queremos hacer la paz con los palestinos, con la Autoridad Palestina, hablamos sobre un Estado palestino. Dije en mi discurso en Bar Ilan, y elijo mis palabras con cuidado: “un estado desmilitarizado que reconozca al Estado judío”. No hablaré sobre el Estado judío y el reconocimiento de los derechos del pueblo judío.
Pero quiero hablar sobre la desmilitarización. Esto no es jarabe de pico. No solo estoy tildando mi lista. Nosotros necesitamos seguridad.
En cada reunión y en cada comunicación, en conversaciones con el presidente Obama, la canciller Merkel, David Cameron (primer Ministro británico) con todos, con sus ministros de RREE, y con cada uno de sus representantes, explico que la presencia israelí en el Valle del Jordán durante años es vital, porque nadie sabe qué pasará mañana. Porque abandonamos Líbano, cada pulgada de éste, e Irán se introdujo. Dejamos cada pulgada de Gaza, e Irán se metió. El Estado de Israel no puede permitirse abandonar sin hacer acuerdos de seguridad, sin una valla adecuada desde Judea y Samaria, porque no permitiremos que esto ocurra por tercera vez.
De manera que tenemos discusiones cuando Abu Mazen acordó hablar (… ) seis horas en dos años. Eso fue todo. Quería hablar sobre el territorio. Le dije: “Por todos los medios, conozco tu posición acerca del territorio (…) pero quiero decirte algo sobre mi posición acerca de la seguridad. Necesitamos esta presencia pero, al fin y al cabo, también cada uno de ustedes lo necesitan. Nadie puede decirnos lo que pasará en el este”, le dije. Hoy, podría decirle “Nadie sabe lo que pasará al oeste”.
Pero, ser responsable, serio, realista y digno estadista requiere que insistamos en esas cuestiones y solo mencionarlas con rapidez: “Sí, las mencioné”.Debemos luchar por ellas con todo lo que tenemos porque, después de todo, la seguridad sustenta la paz, o al menos la protegerá si la paz se deshace. De manera que, insistimos, no como precondición para entrar a las negociaciones. No tenemos precondiciones. No somos nosotros quienes rehusamos conversar.
Hay verdades que toman un tiempo hasta que el mundo las ve. Muchas cosas se dijeron sobre el pueblo judío durante cientos de años. Y, el mundo, las aceptó sin considerar, siquiera, si eran correctas o verdaderas.
Saben que, todo lo que digo aquí, es verdad. Estamos insistiendo en los puntos más cruciales.Venimos a hablar de una solución realista y pragmática que tome en consideración Medio Oriente tal como es. Debemos dividir nuestro cerebro.Es nuestra responsabilidad, como líderes, separar los deseos de nuestro corazón, la paz divina que todos quisiéramos ver de la paz práctica que requiere el país, y un pueblo que sufrió tanto, que fue difamado y falsamente etiquetado por actuar con responsabilidad. Elogié a Naciones Unidas por vetar las resoluciones.
Hoy, es con el mejor interés del Estado, durante esos acontecimientos históricos que se están desplegando delante de nosotros, que entendamos la realidad, de modo adecuado, lo que exige prudencia y no decisiones apresuradas; Requiere responsabilidad y no desorden; Necesita unidad y no sectarismos.Fuente
Cidipal

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.