lunes, 3 de octubre de 2011

Netanyahu: El incendio provocado a la mezquita es “horrible” y no tiene lugar en Israel





El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, expresó su furia sobre el incendio provocado a una mezquita en la ciudad de Tuba en la Alta Galilea y le indicó al jefe de la Shin Bet que localice rápidamente a aquellos responsables.
Según la declaración dada a conocer hoy, el primer ministro se puso furioso cuando vio las fotos y dijo que el incidente contradice los valores del Estado de Israel, como la libertad de religión y de culto. “Las fotos son horribles y no tienen lugar en Israel”, expresó el premier.
El domingo por la noche se prendió fuego a una mezquita en la ciudad árabe israelí Tuba-Zangariyee en un sospechoso ataque. Todo el interior de la mezquita ardió en llamas, causando un severo daño. Se quemaron libros sagrados y se encontraron graffitis con las palabras “represalia” en las paredes.
La líder de la oposición, Tzipi Livni, también comentó sobre el incidente y dijo que si era un acto de “represalia” entonces éste debía ser condenado. “Quemar mezquitas contradice los valores de Israel como Estado Judío. Estos incidentes nos obligan a conducir una autoexaminación nacional”, dijo.
El miembro de la Knesset (parlamento israelí) de Ta’al, Ahmed Tibi, respondió con furia al ataque y dijo que “quien no pare este crecimiento canceroso y queme mezquitas en tierras ocupadas no debería sorprenderse si se extiende también al estado de Israel”.
El funcionario árabe-israelí expresó que el incendio no era un ataque de “represalia”, pero un trabajo de terroristas judíos. Pidió que se lleve a la justicia a los perpetradores del ataque y agregó: “Debemos mantener la furia contenida por un lado y por el otro reconstruir la mezquita lo antes posible”.
El miembro de la Knesset de Meretz, Zehava Galon, dijo que “se deben tomar pasos contra quien sea responsable de prender fuego a la mezquita. Este es el resultado de la impotencia de las autoridades de llevar a los rabinos a la tarea”.
Por su parte, el miembro de Kadima Otniel Schneller, residente del asentamiento Maale Michmash, atacó a los perpetradores del ataque y dijo que “los activistas de represalia son como terroristas”. También les pidió a las fuerzas policiales y de seguridad que penalicen estos “grupos anarquistas que son antisionistas y minimizan nuestro derecho en esta tierra”.

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