martes, 29 de julio de 2014

CULTURA


                                             **La Herencia Del Amor**

He recibido una herencia, que mi padre, al morir, me dejó toda su ciencia y yo
hoy me pregunto: ¿que puedo hacer con ella, si nada entiendo, si nada comprendo?
Mi padre, que en paz descanse, escribió y escribió, en cuadernos y libros. Mi padre
creía que yo entendería y no fue así, no entendí.
En cada hoja, que conseguía escribía, relataba, comentaba y decía: que lo que el había
escrito era tan importante que pasaría a la posteridad, en ningún colegio faltaría, todas
las universidades las tendrían y sería obligatorio que los novios lo leerían, solo al verse
y conocerse con quien sería su mujer ideal.
No pasó mucho tiempo, cuando un anciano llegó a mi casa y se presento como poeta y
experto en el amor. Ofreció comprarme todo lo que mi padre había escrito, muy contento
se lo vendí:
*Estimado señor poeta: ¿ que hará usted, con estos libros y apuntes, libretas y anotadores ?
Le pregunto como una curiosidad, a su empeño por comprar, escritos por lo que nada vale,
según mi parecer. Le agradezco que me los compre, en caso contrario, los hubiera tirado,
para mi no tienen ningún valor.*
**Hijo, hubieras cometido un crimen atroz. Tu padre, fue el mejor poeta, que el Señor en
la tierra plantó y le otorgó el privilegio de conocer, en profundidad, al amor. Tu padre, todo
anotaba, no hay nada que le faltaba para conocer el amor. Es imposible enamorarse sin antes
leer, lo que tu padre escribió**
Es así, como la herencia unos pesos me dejó, no puedo quejarme del viejo poeta, pero hay
algo que no entendí. Nunca estuve enamorado y si lo estuve, nunca lo comprendí.

Mario Beer-Sheva 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.