- Israel lamenta las víctimas de ambos lados
Dorit Shavit
Embajadora de Israel en Argentina
La falta de proporcionalidad no está en el uso de la fuerza, sino en los objetivos. Las ideas fundamentalistas de Hamas por aniquilar a Israel, frente a nuestro objetivo: frenar el ataque de Hamas hacia la población.
En el lapso de pocas semanas, Hamas ha lanzado cerca de dos mil misiles y cohetes contra la población civil israelí. Los dirige contra áreas densamente pobladas, con la intención de incrementar el número de muertos y heridos. Realiza esta acción sabiendo que nadie puede procesarlos, pese a estar cometiendo crímenes de guerra. Porque Hamas no es un entidad jurídica.
En la misma sintonía, este grupo no permite a los civiles de Gaza salir y huir de los blancos militares. Es para ellos también un objetivo incrementar allí el número de víctimas.
Israel, por su parte, lamenta las víctimas de ambos lados. La diferencia está en que Israel ha enfocado sus energías en proteger a sus ciudadanos, construyendo refugios y desarrollando un sistema antimisiles sofisticado. Más aún, Israel hace un esfuerzo denodado para poner a salvaguarda a la población civil de Gaza.
La técnica consiste en avisar a los habitantes de las viviendas con volantes, llamadas telefónicas y a través de la radio local, informando sobre el lugar que será atacado, con el único propósito de que los vecinos alcancen a evacuar la zona.
La falta de proporcionalidad o asimetría no está en el uso de la fuerza, sino en los objetivos. Las ideas fundamentalistas de Hamas por aniquilar a Israel, frente al claro objetivo que tenemos: frenar el constante ataque de Hamas hacia la población, defendiendo a los ciudadanos israelíes mediante la utilización de los recursos necesarios y suficientes para desarticular el origen de la agresión.
Es importante subrayar que, en paralelo con la producción y el lanzamiento de misiles, Hamas ha invertido su energía y dinero en la construcción de una red de túneles subterráneos con el propósito de infiltrarse en territorio israelí para matar a sangre fría a ciudadanos. Hay una enorme cantidad de evidencia acerca de estos macabros proyectos.
La inteligencia del Estado de Israel descubrió que Hamas tenía planificado un megaataque en ocasión de la celebración del próximo Año Nuevo judío.
Dado esta realidad, el gobierno israelí llegó a la conclusión de que no existe otra alternativa que realizar una operación terrestre que permita descubrir los túneles y prevenir la infiltración de los terroristas de Hamas en el territorio israelí. Esta operación comenzó 10 días atrás. En este margen temporal, las fuerzas de defensa de Israel ya descubrieron 31 túneles.
Hoy es común ver en los medios de comunicación gente que se pregunta por qué “el poderoso” Estado de Israel no accede a las prerrogativas del movimiento Hamas.
Para comenzar a responder, debemos recordar que Israel dejó la Franja de Gaza hace nueve años. Se retiró por completo con el propósito de que los palestinos ejercieran su responsabilidad y construyeran sus instituciones, como preámbulo para su independencia.
Dos años después, los elementos más moderados del gobierno, representados por el Partido Al Fatah, fueron expulsados y llegaron al poder voces más radicalizadas, a través de Hamas. Valiéndose del ilimitado uso de la fuerza contra opositores, muchas veces de manera brutal, esta agrupación comenzó a contrabandear armas y municiones con el fin de atacar la zona sur de Israel.
La respuesta a esta situación está en las bases mismas de la constitución de Hamas como organización islámica radical. La causa de este conflicto no es territorial. La proclama de Hamas es la aniquilación del Estado judío. Así lo pregonan sus líderes, sin ningún tipo de vergüenza.
Hamas es una organización fundamentalista. Se expresa en términos absolutos y no acepta la negociación como método para resolver conflictos. La séptima cláusula de su Carta Fundacional indica la clara necesidad de liquidar a los judíos de la región.
Ante esta realidad, si hoy Hamas se desarmara y frenara su ataque a la población del Estado de Israel, no habría más lucha.
Si Israel se desarmara y frenara su lucha contra Hamas, no habría Israel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.