domingo, 5 de agosto de 2012

detalles desconocidos en la historia argentina!


detalles desconocidos en la historia argentina!
 
Comentario interesante de un gran amigo J.L. a consecuencia de una fotografia, que pocos conocerán  pero que ha llamado la atención del fotógrafo viajero,  muy probablemente un turista israeli, cuando la vio nada menos que en un cementerio católico que aloja restos de familias argentinas de prosapia.
Comenta J.L: “Nosotros vivimos dos años en Buenos Aires , no lejos de “ La Recoleta ”. Más de una vez  caminamos  entre los panteones de la campanuda y antigua necrópolis. Una de las primeras veces, al observar  un  panteón artísticamente ostentoso, casi caemos de espaldas cuando divisamos,  en su pesada puerta doble, un  símbolo de tamaño considerable tallado en cobre, símbolo  inequívocamente judío que cruza en forma oblicua ambas hojas del portalón en bajorelieve. Es a todas luces la imagen tradicional, tallada y repujada, de uno de los  esclavos judíos que lleva a Roma el pesado candelabro de siete brazos, la  Menoráh ,  que  con otros tesoros y los rollos de la Torá sacó del Templo de Jerusalén el comandante  de las legiones romanas, Tito, hijo del emperador Vespasiano y futuro sucesor él mismo del trono del Imperio Romano. Con la caída y destrucción de Jerusalén la Menoráh fue llevada a Roma y paseada en la procesión de la victoria que se celebró en honor de Tito, suceso que se encuentra tallado en el famoso Arco romano que lleva su nombre.
el cartel en hebreo está traducido más abajo.
No sería aventurado suponer que nadie en el mundo, que no fuera judío o no siéndolo expresamente quisiera evocar y resaltar ese lejano origen,  haría  tallar en la puerta de entrada al panteón familiar la misma talla de la Menoráh del Arco de Tito y  la haría reproducir escultóricamente en el interior de la tumba familiar.
Nos acercamos al panteón; estaba cerrado. Acertó a pasar por allí uno de los cuidadores y pudimos convencerlo para que nos dejara mirar adentro del panteón.
En el interior vimos  la escultura que podrán abservar en la fotografía, con  motivo similar al de la puerta.
Concuerdo con quien escribió  el texto en hebreo  cuando dice que  “alguna familia de conversos ha querido realzar sus raíces judías”.

El panteón nombrado  es el de la familia Anchorena ,  situado aproximadamente en el centro de La Recoleta.   Hay quienes afirman que no obstante otras interpretaciones, el patronímico Anchorena deriva del hebreo anshei = hombres  (o gente)  e  ireinu = de nuestra ciudad, es decir anshei ireinu = paisanos, coterráneos o conciudadanos.
Historias de los conversos en América Central y América del Sur incluyen ese apellido en las listas de patronímicos  de  judíos sefardíes venidos a América después de la expulsión.

“Cosas veredes, Sancho, que non crederes”, transcurridos más de quinientos años de la expulsión de los judíos de España”.