domingo, 12 de octubre de 2014

El escribir hace revivir hechos de nuestra vida, de adolescencia, de juventud,
de madurez y de vejez.
Recuerdo de mi adolescencia ,amores eternos que duraron semanas.
De mi juventud he tenido amores ,que remplazaba con otros amores,
fueron amores de la edad. Efímeros ,rebeldes e inquietos como mis años.
La madurez trajo los hijos, en que depositamos todas nuestras ilusiones,
el trabajo para el mantenimiento y el bienestar de la familia y sin olvidar,
las ilusiones ,cuando ellas llegaron al mundo.
Hoy, en la vejez, disfrutamos recordando los tiempos buenos que fueron
parte de ilusiones ya pasadas.
Muchas de ellas se cumplieron, otras no. Lo principal es recordar los
tiempos felices que mantuvieron inmune ,nuestro amor .Hemos tenido
épocas buenas y malas .Pero ,justamente, fueron las épocas malas que
soldaron nuestro amor y el desánimo no llegó a nuestros corazones.
Esos tiempos no hicieron más fuertes, ya que fuimos dos, en afrontar
las dificultades.
En este pequeño compendio de nuestra vida, quiero decirles, que en el
tiempo bueno todo es bueno ,pero en el tiempo malo es cuando el amor
muestra las raíces que da vida a la vida ,para afrontarlas, sin temor a los
años duros que debemos superar.
El timonel reconoce la calidad del barco en aguas turbulentas y no en
mar chicha.
Dejad que los años malos se hagan presente y estrechad filas para
hacerles frente .Saldrán inmunes seguramente ,si así no fuera vuestros
amores no tienen raíces .No son amores.
Son amores de pasión y que hoy secos, como las hojas de los árboles
en otoño ,mueren por falta de savia ,por falta de alimento que da vida
al amor.
**La Savia del Amor**
Mario Beer-Sheva
 Israel 

 El escribir hace revivir hechos de nuestra vida, de adolescencia, de juventud,
de madurez y de vejez.
Recuerdo de mi adolescencia ,amores eternos que duraron semanas.
De mi juventud he tenido amores ,que remplazaba con otros amores,
fueron amores de la edad. Efímeros ,rebeldes e inquietos como mis años.
La madurez trajo los hijos, en que depositamos todas nuestras ilusiones,
el trabajo para el mantenimiento y el bienestar de la familia y sin olvidar,
las ilusiones ,cuando ellas llegaron al mundo.
Hoy, en la vejez, disfrutamos recordando los tiempos buenos que fueron
parte de ilusiones ya pasadas.
Muchas de ellas se cumplieron, otras no. Lo principal es recordar los
tiempos felices que mantuvieron inmune ,nuestro amor .Hemos tenido
épocas buenas y malas .Pero ,justamente, fueron las épocas malas que
soldaron nuestro amor y el desánimo no llegó a nuestros corazones.
Esos tiempos no hicieron más fuertes, ya que fuimos dos, en afrontar
las dificultades.
En este pequeño compendio de nuestra vida, quiero decirles, que en el
tiempo bueno todo es bueno ,pero en el tiempo malo es cuando el amor
muestra las raíces que da vida a la vida ,para afrontarlas, sin temor a los
años duros que debemos superar.
El timonel reconoce la calidad del barco en aguas turbulentas y no en
mar chicha.
Dejad que los años malos se hagan presente y estrechad filas para
hacerles frente .Saldrán inmunes seguramente ,si así no fuera vuestros
amores no tienen raíces .No son amores.
Son amores de pasión y que hoy secos, como las hojas de los árboles
en otoño ,mueren por falta de savia ,por falta de alimento que da vida
al amor.
**La Savia del Amor**
Mario Beer-Sheva
 Israel 

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