lunes, 6 de agosto de 2012

Innovación israelí salva vidas


Después que los médicos en Rumania se dieron por vencidos y declararon que no había oportunidad de curar a una niña de 7 años  se le aconsejó a su madre ir a Israel para tratar el raro defecto genético, el cual evitaba que el cuerpo de su hija produjera células sanguíneas. La apuesta dio resultado y salvó la vida de su hija.
La madre de la niña enferma, identificada como B, vive con su familia en un pequeño poblado rumano. Después de su segundo matrimonio,  dio a luz a un hijo quien estuvo enfermo con el mismo síndrome y murió  a los 7  años. Después que ya no hubo  posibilidad de salvar la vida de B en Rumania,  la familia decidió enviarla al departamento de trasplante de médula ósea en el Hospital Hadassah Ein Kerem en Jerusalem.Por  meses la niña durmió en aislamiento, dentro de una burbuja, en un intento de evitar la infección con virus y gérmenes. “Su condición empeoró y se decidió someterla a una trasplante de médula ósea”, dijo el jefe del departamento, Prof. Reuven Or. “Encontraron un donante. Se hizo el trasplante pero  la condición de la niña continuó empeorando…Otro trasplante de médula ósea tampoco tuvo éxito, y los doctores estaban impotentes”.
Pero en el último momento, el Prof. Or recordó que  había leído sobre un proceso revolucionario desarrollado por Pluristem Therapeutics,  con sede en Haifa,  que tuvo éxito en inyectar células madres tomadas de una placenta directamente al músculo. “El problema era que todavía no habían experimentado  en personas, y solo había informes de éxitos en animales”, dijo el Prof. Or. “Como el cuerpo de la niña rechazaba todo tratamiento posible, y no había nada para hacer , decidimos recurrir a Pluristem, el cual le salvó su vida”.
 B fue dada de alta del hospital y regresó a su ciudad. El que está celebrando el éxito ahora es el desarrollador del proceso, Zami Aberman, padre de tres y abuelo de tres. “ Sólo soy un ingeniero mecánico quien tiende a pensar fuera del paradigma científico”, dijo . “Al principio se rieron. Pero miren!  Estaba, después de todo,  en lo correcto”.

(Traducción por el Consulado General H. de Israel en Guayaquil)-CIDIPAL
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