LA AMENAZA TERRORISTA BAJO LAS OLAS

LA AMENAZA TERRORISTA BAJO LAS OLAS

La vasta infraestructura de energia submarina del mundo—plataformas de petroleo y gas, cabezas de pozos, tuberias y bombas—es ahora vulnerable a ataque por parte de submarinos baratos y vehiculos no tripulados.

por Andrew F. Krepinevich
2/11/11

Casi 60 años atras la serie clasica de documentales de television "Victoria en el Mar" recordo por primera vez las proezas de la Armada americana durante la IIª Guerra Mundial. Muchos episodios destacaron la Batalla del Atlantico contra submarinos alemanes que estaban llevando a cabo guerra de guerrillas en el mar. Su objetivo: destruir los buques de carga aliados que estaban dando un salvavidas economico de America a Inglaterra.
Los submarinos alemanes buscaban una forma de guerra conocida como ataque al comercio, atacar los activos economicos del enemigo en el mar. Las armadas americana, britanica y canadiense ganaron la Batalla del Atlantico, gracias a su utilizacion de caravanas y explotacion de avances en tecnologia y tacticas en guerra submarina—pero solo despues de sufrir horrorosas perdidas en sangre y dinero.
Al final de la guerra, Estados Unidos surgio por lejos como la potencia naval predominante del mundo. Desde entonces el compromiso americano con proveer acceso irrestricto a los mares del mundo a todas las naciones ha permitido una era de globalizacion y crecimiento economico.
Los recuerdos de una epoca en que el acceso a los mares no estaba garantizado se han desvanecido. Pero mucho ha cambiado en los ultimos 60 años. Dos acontecimientos en especial sugieren una creciente necesidad que EEUU y otras naciones pacificas comiencen a pensar nuevamente acerca de como defender su comercio maritimo, aunque bajo circunstancias muy diferentes.
El primer acontecimiento es el surgimiento de una economia submarina. Dos años despues de la IIª Guerra Mundial, en 1947, el primer descubrimiento de petroleo fuera de las costas fuera de la vista de tierra ocurrio en el Golfo de Mexico. Hoy casi el 30% de la produccion petrolera americana y el 15% de su produccion de gas son producidos desde fuentes en la plataforma submarina extra continental. Mundialmente, un 30% de la produccion mundial de petroleo viene de la produccion fuera de las costas.
Una enorme cantidad de inversion de capital se ha ido en crear esta plataforma de energia submarina. Esto incluye plataformas petroleras que perforan, extraen y almacenan temporariamente petroleo y gas, tanto como los pozos petroleros y de gas, conductos y bombas requeridos para transferir el producto desde su localizacion submarina hasta la costa.
Esta vasta infraestructura fue construida con la presuncion que aunque tendria que tratar con desastres naturales, no seria un blanco en la guerra. En la jerga militar, mucha de la infraestructura comprende blancos "suaves" que no necesitarian mucho en el camino de los explosivos para causar daños importantes y quizas catastroficos. Afortunadamente muchos de estos blancos no han sido faciles de alcanzar—hasta ahora.
Esto nos trae al segundo acontecimiento: la difusion de tecnologia militar y armamento que pueden amenazar la economia submarina con una nueva forma de atacar el comercio.
En años recientes, narco-carteles latinoamericanos han comenzado a mover su carga a traves de submarinos. Aun cuando no son ni remotamente la clase de submarinos de la armada americana, estos simples barcos no obstante son capaces de operar bajo el mar en aguas litorales mientras mueven toneladas de cocaina. Ellos tienen un alcande de hasta 2000 millas y cuestan casi unos pocos millones de dolares para ser construidos. Estos submarinos pueden sumergirse a profundidades de unas pocas docenas de pies, lo cual es suficiente para hacer dificil la deteccion, permitiendoles aproximarse a plataformas petroleras fuera de las costas con poca o ninguna advertencia.
Aun mas preocupante es la proliferacion de vehiculos submarinos no tripulados, los cuales fueron una vez casi exclusivamente operados por ejercitos occidentales. Con el crecimiento de la economia submarina, el desarrollo y produccion civil despego en la decada de 1980. Los vehiculos submarinos no tripulados ahora son ampliamente utilizados para una variedad de propositos comerciales y cientificos.
Estos vehiculos submarinos no tripulados son quizas mas conocidos por su rol en localizar barcos hundidos. A diferencia de los pequeños submarinos operados por los narco-carteles, los vehiculos submarinos no tripulados pueden descender al piso del oceano. Si son adaptados para propositos militares, ellos podrian cargar minas y otros explosivos, tanto como camaras y sensores electronicos. Ellos tambien se estan volviendo mas baratos, con una amplia variedad de sistemas disponibles a la venta en el sector privado.
Luego estan las minas navales, ahora fabricadas en mas de 30 paises. Algunos productores, como Rusia, estan desarrollando minas con mejores sensores, sistemas de reconocimiento de blancos, revestimientos encubiertos, y sistemas de auto-propulsion para permitirles moverse. Pero las minas no tienen que ser sofisticadas para ser efectivas, especialmente contra los miles de blancos suaves poblando la plataforma continental.
Aun cuando los narco-carteles estan interesados en hacer dinero, no la guerra, este no es el caso de las entidades radicales no estatales o sus estados patrocinantes. Algunos grupos, incluido al Qaeda, buscan lograr la victoria no derrotando a sus enemigos en el campo de batalla sino infligiendole dolor o daño inaceptables, sea contra civiles indefensos o infraestructura economica. Para este fin, los radicales islamicos han emprendido ataques, empleando medios mucho menos sofisticados y con exito minimo, sobre un carguero de petroleo en el Golfo de Aden en octubre del 2002 e instalaciones de produccion de petroleo sauditas en febrero del 2006. Si Estados Unidos se encuentra en una confrontacion con Iran, este podria emplear a representantes para lograr fines similares.
Con una campaña relativamente pequela de su parte, en resumen, los enemigos de America podrian imponer costos potencialmente enormes sobre su economia submarina, incluidas la perdida de recursos energeticos, infraestructura dañada y degradacion ambiental.
Esta amenaza naciente para los activos energeticos submarinos de America requiere atencion antes que llegue a la puerta de la nacion. El Departamento de Seguridad Interna, en coordinacion con el Departamento de Defensa, deben explorar el costo y posibilidad de opciones para defender la economia energetica submarina, para poder moverse rapidamente a crear un escudo defensivo si surge la necesidad. La comunidad de inteligencia debe vigilar la amenaza enfocandose en la proliferacion de medios de ataque submarinos, especialmente la que pertenece a entidades no estatales radicales. En el frente diplomatico, deben ser hechas campañas para comprometer en esta campaña a estados amigos que tienen importantes activos energeticos submarinos propios, tales como Brasil, Canada, Mexico, Noruega y el Reino Unido.
Dadas las apuestas involucradas, asi como EEUU y sus aliados desarrollaron las fuerzas, capacidades y metodos necesarios para defender sus activos economicos en el mar durante la Batalla del Atlantico, es necesaria ahora una campaña similar con respecto a los intereses economicos submarinos de America. La alternativa es esperar lo mejor—y la esperanza no es una estrategia.
El Sr. Krepinevich es presidente del Centro para Evaluaciones Estrategicas y Presupuestarias.
Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba