Por Rubén FriedmannTras el pase de su delegación, que desfiló con cintas negras en sus brazos, los hogares israelíes tuvieron en las pantallas de sus televisores los rostros de los deportistas y sus respectivos nombres (foto superior).
A su vez, la ministra de Deportes israelí, Limor Livnat, que asistió al evento también con una cinta negra, guardó de pie un minuto de silencio durante el discurso del presidente del Comité Olímpico Internacional, Jacques Rogge.
El abanderado de la delegación, el surfista Shajar Tzuberi, encabezó en desfile con una visible bandera israelí en su corte de cabello (foto a la izquierda).
Estas muestras de recuerdo se produjeron ante la negativa del Comité Olímpico de llevar a cabo un minuto de silencio durante la ceremonia inaugural, propuesta por Israel al cumplirse 40 años del hecho.
El 5 de setiembre de 1972, durante los Juegos de Múnich, un comando de terroristas palestinos denominado “Setiembre Negro” tomó como rehenes a once de los veinte integrantes del grupo israelí. Tras la muerte de dos deportistas y un fallido intento de rescate, asesinaron a todos los secuestrados.