COMO VITTORIO ARRIGONI FUE A GAZA ESPERANDO MORIR

Es realmente aun un misterio por que los peregrinos politicos son exterminados por las entidades totalitarias a las que ellos adoran?

April 18, 2011 - by Jamie Glazov

Pedazo por pedazo, decoralo, arregla los detalles, encuentra los ingredientes, imaginalo, aconsejate, dale forma en una obra sin espectadores, una que existe solo para uno mismo, solo para el pequeño momento mas corto de la vida.
—Michel Foucault, describiendo el placer de prepararse para el suicidio.

El porrista italiano de Hamas, Vittorio Arrigoni, ha muerto a manos del terrorismo islamico al que el venero durante su vida. El compañero de viaje hizo la travesia a la Franja de Gaza para prosternarse ante su deidad laica, Hamas, y ayudar a su empresa de perpetrar el genocidio contra los israelies. Los terroristas islamicos, quienes se llaman a si mismos “salafistas,” mostraron su gratitud hacia Arrigoni secuestrandolo, golpeandolo sin piedad y ejecutandolo.
El episodio fue, por supuesto, todo parte de un guion esperado: aun cuando los meidos y nuestra elevada cultura literaria nunca discute las razones, el registro historico revela un hecho innegable: como miles de peregrinos politicos antes que el, Vittorio Arrigoni fue a Gaza a morir. De hecho, conciente o inconcientemente, en su inextinguible busqueda por sacrificar vidas humanas en el altar de sus ideales utopicos, los compañeros de viaje siempre ansian por la muerte, y si no la muerte de otros, entonces la propia.
No es coincidencia que un poco antes que los "salafistas" mataran a Arrigoni, Juliano Mer-Khamis, un porrista del terrorismo en Israel, quien, como Arrigoni, dedico su vida a elogiar el culto a la muerte palestino y trabajando por la aniquilacion de Israel, fue asesinado por terroristas islamicos en Jenin. No es coincidencia que Rachel Corrie, la infame facilitadora del Movimiento Solidaridad Internacional, un grupo que interrumpe actividades antiterroristas de las Fuerzas de Defensa de Israel, cometiera suicidio protegiendo a terroristas de Hamas arrojandose frente a una aplanadora israeli. Y no es coincidencia que las activistas izquierdistas por la "paz" sean rutinariamente violadas, maltratadas y esclavizadas por los arabes de Judea y Samaria a los que ellas vienen a ayudar y glorificar en su odisea de odio a los judios contra Israel. Y no contengan su respiracion, dicho sea de paso, esperando que las feministas izquierdistas protesten por este fenomeno; ellas estan siguiendo lealmente los pasos de la compañera viajera norteamericana Anna Louise Strong y el escritor aleman stalinista Bertolt Brecht, dos creyentes izquierdistas tipicos que pasaron completamente sin inmutarse por los arrestos y muertes de sus amigos en las purgas stalinistas- no habiendo nunca siquiera preguntado por ellos despues de su desaparicion.
Debajo de la veneracion del enemigo despotico por parte del creyente reside uno de sus mas poderosos anhelos: someter todo su ser a una entidad totalitaria. Esta dinamica psicologica involucra identificacion negativa, por la cual una persona que no se ha identificado positivamente con su ambiente subyuga su individualidad a una entidad poderosa, autoritaria, a traves de la cual experimenta indirectamente un sentimiento de poder y proposito. El historiador David Potter ha cristalizado suscintamente este fenomeno:

. . . la mayoria de nosotros, si no todos nosotros, nos satisfacemos y realizamos nuestras propias identidades como personas a traves de nuestras relaciones con otros; quienes somos, en un sentido lo que nuestra comunidad, o como algunos sociologos dirian, mas precisamente, lo que nuestro grupo de referencia nos reconoce como ser. Si no no reconoce, o si nosotros no sentimos que lo hace, o si estamos confundidos en cuanto a lo que es el reconocimiento, entonces nos volvemos no solo solitarios, sino incluso perdidos y profundamente inseguros de nuestra identidad. Nosotros somos manejados por esta incertidumbre en una campaña en cierta forma obsesiva para descubrir nuestra identidad y asegurarla. Si esta busqueda prueba ser demasiado larga o demasiado dificil, la necesidad de identidad se vuelve fisicamente muy pesada y el individuo puede ser llevado a escapar de esta necesidad renunciando a su propia identidad y convirtiendose en alguna causa aparentemente mas grande fuera de el mismo.

Esta rendicion a la totalidad involucra que el creyente se rinda no solo en ceder su individualidad ante un todo mas grande sino tambien, idealmente, a sacrificar su vida por el. Ansiando por su propia auto-extincion, el creyente implora el martirologio por la idea. Como Eric
Hoffer señala en su clasico El Verdadero Creyente, la oportunidad de morir por la causa da significado al deseo del creyente de arrojar a su yo interior: "un sustituto adoptado en moderacion no puede suplantar y cancelar el yo que nosotros queremos olvidar. Nosotros no podemos estar seguros que tenemos algo digno por lo que vivir a menos que estemos listos a morir por ello."
Asi, Vittorio Arrigoni, Juliano Mer-Khasin, y Rachel Corrie estuvieron simplemente solo continuando lealmente la larga tradicion suicida de su fe politica. Nosotros estamos bien concientes, despues de todo, del destino oscuro de los creyentes que viajaron a Rusia despues de la Revolucion Bolchevique de 1917 para construir el comunismo; nosotros estamos bien versados de lo que sucedio con los iranies de izquierda que regresaron a su pais despues de la revolucion irani de 1979 para ayudar a Khomeini a construir el paraiso islamico. Solo aquellos que no pueden aceptar las verdaderas motivaciones de los creyentes utopicos pueden continuar negando lo que aquellos peregrinos politicos estuvieron buscando en su odisea de arrojarse a si mismos de sus propios yo no deseados.
Necesita uno explicar excesivamente por que la feminista "progresista" Naomi Klein convoco a traer “Najaf a New York” en su infame columna de 2004 en The Nation, en la cual ella estiro su mano en solidaridad con Muqtada al-Sadr y su ejercito mahdi islamofascista en el bastion chiita iraqui de Najaf? Traer Najaf a New York significaria que el bastion chiita iraqui, donde Muqtada al-Sadr y su ejercito mahdi en una epoca manejaron sus camaras de tortura y sembraron su terror, seria replicado en las costas de America. Que podria posiblemente ver de admirable Naomi Klein en el feroz terror nihilista del ejercito mahdi? Continuaria ella con vida por mucho tiempo mas de sesenta segundos despues de contactarse con el?
Es posible que los impulsos de Klein esten relacionados con aquellos de Noam Chomsky, un judio que se ha distinguido, entre otras formas intrigantes por viajar a Libano para abrazar personalmente a los lideres de Hezbollah, cuya mas alta prioridad declarada es librar al mundo de judios?
El asesinato del rehen americano Tom Fox a manos de terroristas iraquies en marzo de 2006 fue un ejemplo perfecto de este fenomeno patologico. Fox estaba entre cuatro miembros del grupo izquierdista Equipos Pacificadores Cristianos (CPT) quienes fueron secuestrados por terroristas islamicos en Irak en noviembre de 2005. Aparte de expresar apoyo por los terroristas, uno de los temas mas energicamente articulados del grupo conllevaba el anhelo por la muerte. En el discurso de 1984, "Reconciliar al Pueblo de Di-s", por ejemplo, el que dio lugar a la formacion de CPT, el ministro menonita Ron Sider urgio a sus oyentes: "Nosotros debemos estar preparados a morir por miles."
No es sorprendente que cuando las tropas britanicas y americanas rescataron a los otros tres rehenes y salvaron sus vidas, los cautivos liberados se rehusaron a agradecer a sus liberadores - quienes habian arriesgado sus propias vidas participando en el rescate - o cooperar en una sesion critica de interrogatorio con oficiales de inteligencia. Doug Pritchard, el co-presidente de CPT, se salio de su camino para decir al mundo que el secuestro mismo (y por consecuencia el asesinato de Fox) fue culpa de America, no de los secuestradores o los verdugos. "La ocupacion ilegal de Irak por parte de fuerzas multinacionales", afirmo el, fue la "causa raiz" de los secuestros. En otras palabras, el demonio los hizo hacerlo.
Los cautivos liberados resintieron del hecho que ellos habian sido liberados por las mismas fuerzas a las que despreciaban. Y los rescatadores habia robado a los rehenes restantes el destino idealizado sufrido por Fox. Jan Benvie, una maestra de Edimburgo que estaba lista para ir a Irak con el grupo en el verano de 2006, aprendio la leccion tambien. Ella anuncio antes de su partida: "Nosotros dejamos en claro que si somos secuestrados no queremos que haya fuerza o cualquier forma de violencia usada para liberarnos."
Hacia el fin de su vida, el filosofo frances Michel Foucault, quien apoyaba y adoraba los campos de muerte de Khomeini, defendio firmemente "el derecho de cada uno a matarse." El suicidio, escribio el jactanciosamente, en un ensayo en 1979, era "el mas simple de los placeres." Es una coincidencia que Foucault, quien habia intentado matarse muchas veces por sentimientos de culpa por su homosexualidad, apoyara apasionadamente un culto de muerte que asesinaba homosexuales?
Los terroristas de Gaza tienen una larga historia de secuestrar y abusar, violar y matar a aquellos que llegan para ayudarlos y asistirlos.
Vittorio Arrigoni sabia eso muy bien.
Al final, la historia de Arrigoni es la historia de la Izquierda – una historia mejor resumida por el dicho del demonio de Goethe, al cual Marx invoco perpetuamente, como lo hjizo en The Eighteenth Brumaire de Louis Napoleon: “Todo lo que existe merece perecer."
Arrigoni es el idolo contemporaneo para los peregrinos politicos que viajaron a despotismos para ayudar a construir los paraisos en los cuales ellos esperaban arrojarse de sus propios yos indeseados. Ellos pagaron el precio final. Y ningun costo menor debe ser pagado por la transformacion trascendental de esterilizar la sucia tierra. Tal desinfeccion puede solo ser hecha posible por el poder purificador de la sangre humana - sangre que, en la empresa utopica, debe, en el capitulo final, convertirse en la de uno.

Jamie Glazov es el editor de la revista Primera Plana. Es autor del nuevo libro "Unidos en Odio: El romance de la Izquierda con la Tirania y el Terror."
Fuente: Pajamas Media- Esta nota fue traducida por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba.