martes, 25 de marzo de 2014

ACTUALIDAD

LA MANCHA DE SANGRE DE POLLARD

Fuente: The Jerusalem Post- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba
por Yishai Fleisher
20/3/2014
 
‘Jonathan Pollard esta muerto. El murio a la edad de 59 en la prision de Butner en Carolina del Norte, despues de 29 años de encarcelamiento. Aunque muchos aptos funcionarios de seguridad americanos se unieron a las campañas israelies para la liberacion del agente israeli, la salud de Pollard se habia deteriorado marcadamente en los ultimos años, resultando en su muerte."
Lo de arriba no es cierto aun, pero puede estar a semanas, dias o horas de ser cierto.
Con las noticias recientes de otra internacion mas y cirugia de emergencia en los riñones, intestinos y vesicula biliar de Jonathan Pollard, no podemos evitar el pensamiento de su muerte posible. Debemos mirarlo de lleno a la cara, e imaginar como nos sentiremos cuando escuchemos la noticia.
Estamos acostumbrados a pensar en el caso de Pollard como algo fuera de nosotros, no muy personal. Pero si Pollard muere en prision, entonces nuestra generacion entera morira solo un poco. Cargaremos la mancha de un hombre enfermo que arriesgo su vida para proteger a Israel. Cuando nuestros hijos nos pregunten: "Estabas ahi cuando Pollard estaba vivo?" La respuesta vergonzosa sera: “Si, estaba ahi, y no hice lo suficiente para ayudarlo..." Para recordarles: Pollard era un analista de inteligencia naval americana quien paso informacion a Israel, un aliado americano, sobre su propia defensa. El fue atrapado y acepto un acuerdo en la fiscalia, pero en vez de obtener dos a cuatro años como otros agentes que espiaron en los Estados Unidos para estados enemigos, Pollard obtuvo cadena perpetua.
Esta dura sentencia llego como resultado de declaraciones juradas escritas a la corte por el entonces secretario de defensa, Caspar Weinberger. Weinberger desde entonces ha sido desacreditado por personas como Robert “Bud” McFarlane, asesor en seguridad nacional de Ronald Reagan en la epoca, quien escribio al Presidente Barack Obama en nombre de Pollard, diciendo que Weinberger tenia una historia de "razonamiento desequilibrado" en lo que hacia a Israel.
McFarlane no es el unico funcionario en defender a Pollard. Lawrence Korb tambien escribio a
Obama para rogar clemencia: “Estimado Sr. Presidente: Como subsecretario de defensa en la epoca del arresto de Jonathan Pollard, solicito respetuosamente que usted ejerza su poder de clemencia en nombre del Sr. Pollard, quien ha estado ahora en prision durante 25 años. Jonathan Pollard es la unica persona en la historia de los Estados Unidos en recibir una cadena perpetua por pasar informacion clasificada a un aliado americano. Basado en mi conocimiento de primera mano, puedo decir con confianza que la severidad de la sentencia de Pollard es el resultado de una aversion casi visceral a Israel, y el lugar especial que ocupa en nuestra politica exterior por parte de mi jefe en la epoca, el secretario de defensa Caspar Weinberger.”
En un articulo de opinion en The Jerusalem Post, Korb escribio: “La mayoria de los principales tomadores de decisiones que estuvieron intimamente involucrados en el caso han emitido pedidos publicos de clemencia. Ellos incluyen al ex secretario de estado George Shultz, al ex senador David Durenberger (quien se desempeño como presidente del Comite Selecto del Senado sobre Inteligencia en la epoca de la condena de Pollard), y al ex congresista Lee Hamilton (presidente del Comite de Inteligencia de la Casa en la epoca de la condena de Pollard)... Figuras clave que vieron la evaluacion clasificada de daño años mas tarde tambien favorecen la liberacion de Pollard. Ellas incluyen al ex jefe de Inteligencia del Senado, Dennis DeConcini, al fiscal general adjunto Philip Heymann, al fiscal general Michael Mukasey, al abogado de la Casa Blanca Bernard Nussbaum, tanto como a James Woolsey, ex director de la CIA.”
Woolsey incluso publico una carta en The Wall Street Journal titulada “Es hora de conmutar la condena de Jonathan Pollard.”
Y hay incluso mas personas del mas alto nivel que han escrito a Obama buscando clemencia para Pollard, incluyendo a Henry Kissinger, Arlen Specter, Allen West, Dan Quayle y el Prof. Angelo Codevilla, junto con cientos de legisladores y lideres espirituales americanos que han firmado peticiones.
Entonces por que Pollard esta todavia en prision, aun cuando tantos han asumido una valiente postura publica, el ha cumplido mas que el tiempo suficiente, y sufre de una salud peligrosamente debil? Quizas Weinberger, cuyo padre era de ascendencia judia, no sea el unico antisemita alli. Tal vez hay personas en los salones del poder americano que quieren que los judios americanos e israelies mantengan sus cabezas gachas, y no se salgan de la linea. El encarcelamiento de Pollard es una forma de castigo colectivo – “Judios, conozcan su lugar.”
Ahora, yo estoy llamando al pueblo americano, tantos de quienes son amigos de Israel: Esta es la hora de su prueba – permitiran ustedes que muera este hombre, quien esta cumpliendo una condena de por vida inmoral por defender a Israel? Es su hora de ponerse en pie, y usar la democracia de la cual esta tan orgullosa America. Retiren todos los obstaculos. Ustedes ya tienen peces gordos detras de la causa, pero ahora debe ser escuchada la voz del pueblo. Asegurense que sus congresistas, senadores y presidente sepan que esto no se sostendra, porque sin justicia y libertad, que es America? Dicho esto, nosotros los judios e israelies no debemos pasar la pelota. Podemos culpar todo lo que querramos a los gobiernos americanos intransigentes, pero hemos dejado en claro que exigimos la libertad de Pollard? Seguro, decimos una oracion, enviamos un email electronico en cadena, e incluso asistimos a una concentracion por Jonathan. Pero hasta ahora, la mayoria de nosotros no interrumpio sus vidas ni hemos tomado medidas para perturbar la vida de nuestro gobierno, y la vida de las organizaciones judias que nos representan.
A lo largo de nuestra historia, nosotros los judios hemos conocido el dolor de los cautivos y esto esta reflejado en nuestra literatura, donde el Talmud llama a la redencion de los cautivos una mitzva raba, una gran mitzva, porque el cautiverio es visto como incluso peor que el hambre y la muerte. Maimonides escribe: “La redencion de los cautivos tiene precedencia sobre apoyar a los pobres o vestirlos.
No hay mayor mitzva que redimir a los cautivos... Ignorar la necesidad de redimir a los cautivos, profana [los versibulos], “No te quedes de brazos cruzados mientras es derramada la sangre de tu projimo” (Lev. 19:16) and… “Ama a tu projimo como a ti mismo” (Lev. 19:18).”
El Shuljan Aruj, el codigo de la Ley Judia, agrega: “Todo momento que uno retrasa en liberar cautivos, en casos donde es posible acelerar su libertad, es considerado equivalente al asesinato." Guau.
Hace poco, despues de la noticia de la hospitalizacion de Pollard, el Primer Ministro Binyamin Netanyahu estuvo en canal 10 y declaro: “Pollard no tiene que estar en el hospital ni en una prision – el tiene que ser liberado.”
Netanyahu continuo: “No hay una sola conversacion en la Casa Blanca que pase sin sacarlo a relucir [a Pollard],” y “Espero que podamos finalmente tener exito en traerlo a casa."
Estimado Primer Ministro Netanyahu: Si usted sigue "conversando” para su liberacion, Pollard pronto estara muerto. No hay tiempo para delicadezas, engatusamiento o juegos.
Para su propio bien tanto como el de Pollard, y para el bien de esta generacion, usted tiene que colocar el peso de Israel detras de esta cuestion: Llame a amigos, haga algunas amenazas, arroje algun musculo por alli.
Sr. Primer Ministro: Asi como usted hizo una prioridad de la liberacion de Gilad Schalit, asi tambien haga una prioridad de la liberacion de Pollard, para que esta Pascua, la fiesta de la libertad, Pollard pueda sentarse en una mesa de Seder en Jerusalem.
De hecho, todos nosotros queremos que Jonathan Pollard venga a casa. Esperamos que el vea la puesta de sol sobre el Mediterraneo, sienta la brisa del desierto sobre su cara, y diga la oracion agradecida en el Kotel en Jerusalem.
Si, todos nosotros queremos que el tenga salud y dias felices, pero a menos que algo cambie, Jonathan Pollard, nuestro hermano, pronto morira en la prision de Butner – y todos nosotros cargaremos con la mancha de sangre de su muerte por el resto de nuestras vidas. ■