lunes, 14 de marzo de 2011

ALTO FASCISMO


By RHONDA GARELICK
Published: March 6, 2011


CUANDO YO DEJABA un cafe de Paris la otra noche, en vez del usual “Bonsoir, Madame,” el mozo me dijo, “Feliz Semana de la Moda!” como si todos nosotros fuesemos a celebrar una fiesta nacional.



Quizas si. La moda es mas que negocios en Francia: es una mitologia, una religion laica, una fuente de orgullo nacional, especialmente durante la Semana de la Moda, cuando el pais recuerda su historia como el lugar de nacimiento de la alta costura.
En los ultimos dias, sin embargo, en respuesta a la diatriba antisemita del director creativo de Christian Dior, John Galliano, los franceses han estado recordando un capitulo mucho mas ominoso en su historia.

De acuerdo con testigos, un borracho Sr. Galliano exploto con una mujer sentada cerca de el en un bar de Paris. "Sucia cara judia, tu debes estar muerta", se dice que le dijo. "Tus botas son de la mas baja calidad, tus medias son de la mas baja calidad. Tu eres tan desagradable que no quiero verte. Yo soy John Galliano!”
Francia es altamente sensible a tales temas, y las represalias llegaron rapidamente. Dior despidio al Sr. Galliano, quien ahora enfrenta acusaciones de usar un insulto racial, un crimen en Francia. Pero mas alla del espectaculo de la aborrecible politica de un hombre, el episodio invita a la consideracion de la curiosa relacion entre la moda francesa y el fascismo.
Durante la Ocupacion, los nazis y sus aliados franceses reconocieron el poder y prestigio nacional de la industria de la moda francesa y buscaron captarla. Cuando el gobierno colaboracionista de Vichy tomo la direccion de la revista de estilo de vida francesa Paris Soir, anuncio en sus paginas un "verano de costura... y compras." Los nazis estaban tan enamorados del lugar de la moda en la cultura francesa que en sus planes para la Europa de la posguerra, ellos estipularon que, a diferencia de otras industrias, el sector de la moda continuaria en Francia.

Muchos en la moda estuvieron dispuestos a seguir el juego. Lucien Lelong, un diseñador que apoyaba a Vichy y cuya casa continuo abierta durante la guerra, vio la costura como una fuerza politica:"Nuestro rol es dar a Francia la cara de serenidad. Cuanto mas elegantes esten las francesas, mas mostrara nuestro pais al mundo que nosotros no tenemos miedo."
Las publicaciones de moda francesas defendieron una profunda conexion entre el esplendor cultural de la costura y el nacional de las francesas, incluso identidad genetica.
“Toda mujer en Paris es un cartel de propaganda viviente, la funcion universal de la francesa es continuar elegante", escribio un periodista de modas a principios de la decada de 1940. “Las francesas son los repositorios de la elegancia, debido a que este legado esta inscripto en su raza,” escribio otro. Y a medida que Vichy continuo siguiendo la linea nazi sobre la forma fisica aria, mas revistas de moda francesas comenzaron a enfocarse en el ejercicio y dieta para mujeres.
Aun cuando no todos en el mundo de la moda francesa se alinearon con las ideas fascistas, no es coincidencia que muchos lo hicieran. Despues de todo, hay profundos y desestabilizadores paralelos entre la industria, particularmente en Europa, y la estetica antidemocratica del fascismo.

Ambos, por ejemplo, se basan en un puñado de lideres de oraculo, carismaticos, que emiten proclamas para multitudes selectas. Los lideres fascistas ofrecian a sus seguidores la perspectiva de una identidad realzada y mitica — un sueño de juventud y belleza, los mismos atributos prometidos por la alta moda.

Aun cuando la moda se ha alejado mas alla de los peores años de Vichy, el rol del diseñador celebridad estilizado, casi mitico continua en la forma de figuras como el Sr. Galliano y Karl Lagerfeld de Chanel. El Sr. Galliano ha sido conocido por vestirse como un pirata o un dandy prusiano, mientras que el Sr. Lagerfeld se apega a una interpretacion en cierta forma gotica de un oficial prusiano del siglo XVIII.
En la raiz de todo el sistema esta el mito mas elusivo de todos: la promesa imposible que la moda puede vencer la inadecuacion fisica y el envejecimiento, confiriendo la belleza y juventud que nosotros vemos en las pasarelas y en toda pagina de Vogue — un culto a la perfeccion fisica muy en casa en la historia del fascismo.
Y aunque nosotros insistimos en la diversidad racial de las actuales normas de belleza de la moda, el cuerpo ideal de los fascistas ha persistido y se ha expandido mucho mas alla de Europa. Los hitos de la estetica nazi — ojos azules, pelo rubio, formas atleticas y rasgos angulosos — son los mismos elementos que definen lo que llamamos el estilo todo americano, aun visible en los miticos pasajes de propagandas de diseñadores como (los decididamente no arios) Ralph Lauren y Calvin Klein.
Lo cual nos trae de regreso al Sr. Galliano en el bar de Paris. La suya no fue una diatriba generica antisemita, sino el pronunciamiento conciente de un arbitro del gusto de clase mundial (“Yo soy John Galliano!”). No solo no uso insultos etnicos, el acuso a la mujer de no ser atractiva ni estar a la moda, asociando ambos con la etnia, con ser judia (lo cual resulta que ella no era).

El vinculo esta claro: como un demagogo fascista de antaño, el estaba declarando que ella no pertenecia al grupo dorado que viste las botas correctas, y a partir de esto el Sr. Galliano se deslizo sin esfuerzos a una condena de su misma carne y a un deseo por su muerte.

La semana pasada el diario frances Le Monde declaro que despidiendo al Sr. Galliano, Dior habia hecho sonar "la campana de la muerte para el mito del diseñador omnipotente." Eso puede ser prematuro, dadas las profundas raices del mito. Pero las diatribas borrachas de un hombre en un bar pueden haber establecido una importante discusion sobre una menos linda corriente en una industria multimillonaria en dolares. Feliz Semana de la Moda.


Rhonda Garelick, profesora de Ingles y artes escenicas en la Universidad de Nebraska-Lincoln, esta trabajando en una biografia cultural de Coco Chanel.
Fuente: The New York Times- Este articulo fue traducido especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba

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