LA OLA ISLÁMICA MUEVE A LOS CRISTIANOS DEL MEDIO ORIENTE___________

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LA OLA ISLÁMICA MUEVE A LOS CRISTIANOS DEL MEDIO ORIENTE

Dr. Yaron Friedman

La emigración de los cristianos árabes hacia fuera de Medio Oriente es una de las mejores mediciones para la evaluación del poder de la ola islámica que cubre la región. Hace poco se oyeron voces de alarma de boca de dirigentes del mundo cristiano como, por ejemplo, el Papa Benedictus XVI en Roma y el Arzobispo de Canterbury, Dr. Rowin Williams. Ellos fueron los últimos en advertir por la persecución de cristianos a partir de la Primavera Árabe. La ola islámica, que cobró impulso por medio de los incidentes en el mundo árabe, aumentó la persecución de los cristianos. El ejemplo más sobresaliente es el ataque a los cristianos coptos en Egipto que representan menos del 10% de la población. Poco antes del estallido de las revueltas en el país (2 de enero, 2011), tuvo lugar una explosión en la Iglesia Copta de Alejandría, en el cual murieron 21 fieles cristianos y 97 resultaron heridos. Durante la revuelta fue creciendo la persecución de cristianos en Egipto.

En entrevistas otorgadas recientemente por los líderes de la Iglesia Católica en Egipto, a partir de la victoria del Partido Islámico en las elecciones al parlamento, surgió que los coptos en el país, presentaron decenas de miles de pedidos de emigración a países de Europa y Estados Unidos.

Cabe destacar que, el ataque a los cristianos, no caracteriza al Islam oficial. Dirigentes religiosos de la Universidad de Al Azhar en El Cairo, se expresaron públicamente contra el ataque a los cristianos argumentando que se opone a los valores del islam. Su llamado tuvo eco en otros países árabes. Sin embargo, los movimientos islámicos como los salafíes, Al Qaeda y otras fracciones de la Jihad, solo aumentaron en el último tiempo sus ataques contra objetivos cristianos y, entre ellos, los asesinatos de curas y quema de iglesias.

La minoría cristiana en Medio Oriente va en creciente caída. Los árabes cristianos tienen una reproducción natural muchos más baja ( con respecto a los musulmanes) y, en los últimos años, el fenómeno de su emigración a Occidente tomó gran impulso como respuesta a los movimientos en la región. La invasión norteamericana a Irak aumentó su migración negativa dado que eliminó la estabilidad del régimen dictatorial Baath, del que formaban parte, también, los cristianos. La partida de las fuerzas norteamericanas de Irak (fines de 2011), dejó a los cristianos al descubierto de ataques por parte de la organización terrorista Al Qaeda. En Líbano, el poder de la organización chiita Hezbollah aumentó la corriente de migración cristiana. Los chiitas aprovecharon esa situación para adquirir, con ayuda iraní, tierras y viviendas de los cristianos que abandonaban el país.

En la Autoridad Palestina creció la huida de los cristianos a partir de la Segunda Intifada y el punto clave del ataque simbólico a los cristianos ocurrió en 2002, cuando terroristas tomaron la Iglesia de la Anunciación en Belén. En Gaza, el asalto de Hamas al poder generó alarma entre la minoría cristiana de la Franja.

En todos esos lugares se reiteraron fenómenos similares de asesinatos a civiles cristianos y sacerdotes, asaltos a iglesias y hasta el cobro por la fuerza del impuesto a la Jazia (impuesto per cápita obligatorio hasta mediados del siglo XIX para los no- musulmanes que eran súbditos del Imperio Otomano) según las leyes religiosas islámicas.

Los coptos en Egipto, los maronitas en Líbano, los asureos en Irak, los ortodoxos, católicos y demás corrientes cristianas no son sino pueblos antiguos, cristianizados en los límites del Imperio Romano. Esas poblaciones fueron mayoría en la región a comienzos de la Edad Media. En el siglo VII, los musulmanes salieron de la Península Arábiga y crearon un Imperio desde España hasta Irán. Desde entonces, comenzó el proceso de islamizar a los habitantes de esas latitudes (la mayoría de manera voluntaria). Los cristianos atravesaron un proceso de adaptación a las costumbres y la lengua árabe. En la actualidad, los árabes cristianos representan una minoría pequeña de 30 millones dentro de los 200 millones de árabes y dos tercios emigraron a Estados Unidos.

¿Acaso Medio Oriente futuro se vaciará de cristianos que fueron mayoría en las poblaciones de la región hace más de mil años? Si se cristaliza el sueño fundamentalista de crear un Medio Oriente islámico puro, ¿será eliminada esa minoría cristiana que trajo a la región la idea de nacionalidad, la misma ideología que hizo pedazos el Imperio Musulmán?.

El Dr. Yaron Friedman, es graduado de la Universidad de la Sorbona en Paris, Profesor de árabe y de Islam en el Technion, en la Facultad de Estudios Humanísticos y en el Seminario de la Galilea. Su libro, “Los alawitas, historia, religión e identidad”, fue editado en 2010.



*Fuente: Cidipal
LA OLA ISLÁMICA MUEVE A LOS CRISTIANOS DEL MEDIO ORIENTE

Dr. Yaron Friedman

La emigración de los cristianos árabes hacia fuera de Medio Oriente es una de las mejores mediciones para la evaluación del poder de la ola islámica que cubre la región. Hace poco se oyeron voces de alarma de boca de dirigentes del mundo cristiano como, por ejemplo, el Papa Benedictus XVI en Roma y el Arzobispo de Canterbury, Dr. Rowin Williams. Ellos fueron los últimos en advertir por la persecución de cristianos a partir de la Primavera Árabe. La ola islámica, que cobró impulso por medio de los incidentes en el mundo árabe, aumentó la persecución de los cristianos. El ejemplo más sobresaliente es el ataque a los cristianos coptos en Egipto que representan menos del 10% de la población. Poco antes del estallido de las revueltas en el país (2 de enero, 2011), tuvo lugar una explosión en la Iglesia Copta de Alejandría, en el cual murieron 21 fieles cristianos y 97 resultaron heridos. Durante la revuelta fue creciendo la persecución de cristianos en Egipto.

En entrevistas otorgadas recientemente por los líderes de la Iglesia Católica en Egipto, a partir de la victoria del Partido Islámico en las elecciones al parlamento, surgió que los coptos en el país, presentaron decenas de miles de pedidos de emigración a países de Europa y Estados Unidos.

Cabe destacar que, el ataque a los cristianos, no caracteriza al Islam oficial. Dirigentes religiosos de la Universidad de Al Azhar en El Cairo, se expresaron públicamente contra el ataque a los cristianos argumentando que se opone a los valores del islam. Su llamado tuvo eco en otros países árabes. Sin embargo, los movimientos islámicos como los salafíes, Al Qaeda y otras fracciones de la Jihad, solo aumentaron en el último tiempo sus ataques contra objetivos cristianos y, entre ellos, los asesinatos de curas y quema de iglesias.

La minoría cristiana en Medio Oriente va en creciente caída. Los árabes cristianos tienen una reproducción natural muchos más baja ( con respecto a los musulmanes) y, en los últimos años, el fenómeno de su emigración a Occidente tomó gran impulso como respuesta a los movimientos en la región. La invasión norteamericana a Irak aumentó su migración negativa dado que eliminó la estabilidad del régimen dictatorial Baath, del que formaban parte, también, los cristianos. La partida de las fuerzas norteamericanas de Irak (fines de 2011), dejó a los cristianos al descubierto de ataques por parte de la organización terrorista Al Qaeda. En Líbano, el poder de la organización chiita Hezbollah aumentó la corriente de migración cristiana. Los chiitas aprovecharon esa situación para adquirir, con ayuda iraní, tierras y viviendas de los cristianos que abandonaban el país.

En la Autoridad Palestina creció la huida de los cristianos a partir de la Segunda Intifada y el punto clave del ataque simbólico a los cristianos ocurrió en 2002, cuando terroristas tomaron la Iglesia de la Anunciación en Belén. En Gaza, el asalto de Hamas al poder generó alarma entre la minoría cristiana de la Franja.

En todos esos lugares se reiteraron fenómenos similares de asesinatos a civiles cristianos y sacerdotes, asaltos a iglesias y hasta el cobro por la fuerza del impuesto a la Jazia (impuesto per cápita obligatorio hasta mediados del siglo XIX para los no- musulmanes que eran súbditos del Imperio Otomano) según las leyes religiosas islámicas.

Los coptos en Egipto, los maronitas en Líbano, los asureos en Irak, los ortodoxos, católicos y demás corrientes cristianas no son sino pueblos antiguos, cristianizados en los límites del Imperio Romano. Esas poblaciones fueron mayoría en la región a comienzos de la Edad Media. En el siglo VII, los musulmanes salieron de la Península Arábiga y crearon un Imperio desde España hasta Irán. Desde entonces, comenzó el proceso de islamizar a los habitantes de esas latitudes (la mayoría de manera voluntaria). Los cristianos atravesaron un proceso de adaptación a las costumbres y la lengua árabe. En la actualidad, los árabes cristianos representan una minoría pequeña de 30 millones dentro de los 200 millones de árabes y dos tercios emigraron a Estados Unidos.

¿Acaso Medio Oriente futuro se vaciará de cristianos que fueron mayoría en las poblaciones de la región hace más de mil años? Si se cristaliza el sueño fundamentalista de crear un Medio Oriente islámico puro, ¿será eliminada esa minoría cristiana que trajo a la región la idea de nacionalidad, la misma ideología que hizo pedazos el Imperio Musulmán?.

El Dr. Yaron Friedman, es graduado de la Universidad de la Sorbona en Paris, Profesor de árabe y de Islam en el Technion, en la Facultad de Estudios Humanísticos y en el Seminario de la Galilea. Su libro, “Los alawitas, historia, religión e identidad”, fue editado en 2010.



*Fuente: Cidipal