Ofensiva estadounidense-iraní-ruso-iraquí es lanzada para recuperar Ramadi de manos de ISIS
Ramadi, la capital de la vasta provincia de Anbar, fue la segunda ciudad iraquí importante en caer en manos del Estado islámico después de la devastadora pérdida de Mosul. La importancia de la ofensiva lanzada este Martes, 22 de diciembre para su recaptura de manos de ISIS se encuentra principalmente en la composición de la fuerza de asalto, que es única en los conflictos sirios e iraquíes contemporáneos.
Fuentes militares de Debkafile informan que sus socios son Estados Unidos y los elementos del ejército y la fuerza aérea rusa, dos variedades de la milicia iraquí, los chiítas y los sunitas bajo el mando iraní, así como el ejército regular iraquí
El ejército iraquí es representado como el líder en el asalto. Pero esto es sólo una concesión para recuperar el honor perdido cuando el pasado otoño permitieron que la ciudad cayera en manos de ISIS. El comando real está en manos de los oficiales de Operaciones Especiales de Estados Unidos junto a las tropas iraquíes y los oficiales rusos registrados en el centro de mando operativo que establecieron el mes pasado en Bagdad.
Esta sala de guerra de Rusia está en comunicación con el cuartel militar de EE:UU. en la capital iraquí. Es a partir de la sala de guerra de Rusia que los altos mandos de las milicias pro-iraníes reciben sus órdenes. El más prominente es Abu Mahadi al-Muhandis, que dirige la mayor milicia chií iraquí conocida como el Comité Popular de Movilización.
El ejército iraquí es representado como el líder en el asalto. Pero esto es sólo una concesión para recuperar el honor perdido cuando el pasado otoño permitieron que la ciudad cayera en manos de ISIS. El comando real está en manos de los oficiales de Operaciones Especiales de Estados Unidos junto a las tropas iraquíes y los oficiales rusos registrados en el centro de mando operativo que establecieron el mes pasado en Bagdad.
Esta sala de guerra de Rusia está en comunicación con el cuartel militar de EE:UU. en la capital iraquí. Es a partir de la sala de guerra de Rusia que los altos mandos de las milicias pro-iraníes reciben sus órdenes. El más prominente es Abu Mahadi al-Muhandis, que dirige la mayor milicia chií iraquí conocida como el Comité Popular de Movilización.
Observando también por primera vez, nuestras fuentes militares revelan que los funcionarios iraníes colaboran con el enlace entre los estadounidenses y los rusos en el frente contra el ISIS. Si esta combinación funciona para Ramadi, sin duda será trasladado al frente sirio y con el tiempo, tal vez el próximo verano, servirá como el formato de la ofensiva general que los estadounidenses están planeando para arrebatar Mosul de manos del Estado islámico.
Cuando el secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter fue a Bagdad la semana pasada para revisar los preparativos finales para la operación de Ramadi, funcionarios estadounidenses seguían insistiendo en que el ejército iraquí era apto para el trabajo pesado después de haber sido entrenados por instructores norteamericanos.
Para el martes, fuentes estadounidenses admitían que las milicias pro-iraníes también formaban parte de la operación. Fuentes militares de Debkafile informan sobre la división de las tareas de la siguiente manera:
Las Fuerzas del ejército iraquí están atacando el centro de la ciudad de Ramadi desde el norte; las Milicias chiíes atacan desde el sur. La fuerza aérea de Estados Unidos está golpeando los objetivos de ISIS dentro de la ciudad con el fin de paralizar su capacidad para luchar contra las fuerzas que se aproximan. La fuerza aérea rusa está en espera, lista para destruir cualquier refuerzo que ISIS intente cruzar desde Siria para ayudar a sus compañeros en la asediada Ramadi.
Los expertos, que no pierden de vista la ofensiva, no tienen ninguna duda de que va a terminar en el éxito.Los yihadistas que se sostienen en Ramadi son pocos en número, de 400 a 500 combatientes como máximo. Sin embargo, la limpieza de la ciudad después de la victoria presenta una dificultad desalentadora. En Tikrit y en la ciudad de la refinería de Baiji, ISIS dividió su estructura de defensa en dos niveles, uno en la superficie y el segundo subterráneo escondido.
Los expertos, que no pierden de vista la ofensiva, no tienen ninguna duda de que va a terminar en el éxito.Los yihadistas que se sostienen en Ramadi son pocos en número, de 400 a 500 combatientes como máximo. Sin embargo, la limpieza de la ciudad después de la victoria presenta una dificultad desalentadora. En Tikrit y en la ciudad de la refinería de Baiji, ISIS dividió su estructura de defensa en dos niveles, uno en la superficie y el segundo subterráneo escondido.
El nivel superior fue escasamente atendido por la lucha contra la fuerza, pero está plagado de minas, camiones con trampas explosivas y artefactos explosivos improvisados detonados por control remoto.
El nivel inferior, que consiste en sistemas de túneles interconectados profundamente excavados, es donde los combatientes de ISIS se esconden y saltan por la noche para realizar ataques. De acuerdo con la experiencia adquirida en otros campos de batalla iraquíes contra ISIS, ni el ejército iraquí ni las milicias chiíes locales han sido capaces de sondear y destruir estos sistemas de túneles. Y ello es necesario para poder eliminar del todo al Estado Islámico de las ciudades “liberadas”.
El nivel inferior, que consiste en sistemas de túneles interconectados profundamente excavados, es donde los combatientes de ISIS se esconden y saltan por la noche para realizar ataques. De acuerdo con la experiencia adquirida en otros campos de batalla iraquíes contra ISIS, ni el ejército iraquí ni las milicias chiíes locales han sido capaces de sondear y destruir estos sistemas de túneles. Y ello es necesario para poder eliminar del todo al Estado Islámico de las ciudades “liberadas”.
Ramadi se enfrentará al mismo dilema.
Fuente: Debkafile.
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