ANALISIS: EL CURSO ERRATICO DE ALEMANIA CON ISRAEL

Por Benjamin Weinthal

BERLIN - La inestabilidad política y social desarrollandose en Egipto eclipsó la visita de la canciller alemana, Angela Merkel la semana pasada a Israel. Mientras estuvo en Israel como parte de una sesión conjunta del gabinete alemán-israelí, ella dio marcha atrás de una
nueva ronda de sanciones contra Irán.
"Tenemos que ver si las nuevas sanciones son necesarias", dijo la canciller. Durante los discursos a la Knéset en 2008 y al Congreso de los EEUU en 2009, Merkel subrayó que su gobierno no aceptará un Irán con armas nucleares y que la seguridad de Israel es "no negociable."
En sus comentarios en Israel, Merkel pareció hacer su deseo de aplicar nuevas sanciones dependiente de si Rusia y China se unirían a una nueva ronda. El año pasado, sin embargo, ella habló de sanciones independientes de Rusia y China como parte de una "coalición de los dispuestos." Su curso en zigzag respecto a Irán ha irritado a estadounidenses e israelíes.
La frustración de EEUU con Merkel y su ministro de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle, parece haber llegado a un punto de quiebre esta semana. La posición recalcitrante de Alemania sobre el cierre del conducto principal financiero de Irán en Europa - el Banco de Comercio Europeo Irani (EIH) con sede en Hamburgo - provocó que un grupo bipartidista de senadores de EEUU el 1º de febrero emita una dura carta a Westerwelle.
"Le escribimos para expresar nuestra profunda preocupación con el apoyo financiero continuo a la actividad de proliferación nuclear de Irán a través del Banco de Comercio Europeo-Irani en Hamburgo e instamos al gobierno alemán a adoptar medidas inmediatas para poner fin a estas prácticas", escribieron los 11 senadores.
La carta bipartidista fue firmada por los siguientes senadores: Frank R. Lautenberg (D-New Jersey), Mike Johanns (R-Nebraska), Barbara Boxer (D-California), Bob Casey (D-Pennsylvania), Scott Brown (R-Massachusetts), Al Franken (D-Minnesota), Kirsten Gillibrand (D-New York), Mark Kirk (R-Illinois), Jon Kyl (R-Arizona), Joe Lieberman (I-Connecticut), y Jerry Moran (R-Kansas).
Aun cuando el tono de la carta señalaba que Alemania comparte la preocupación de la comunidad internacional sobre violaciónes a los derechos humanos, el programa nuclear, y el apoyo al terrorismo de Iran, los senadores incrementaron el lenguaje diciendo: "Sin embargo, la operación continua del EIH permite al régimen iraní eludir las sanciones y menoscabar su eficacia."
Los florecientes relaciones comerciales de Alemania e Irán, en particular la negativa de Merkel a cerrar el EIH, siguen siendo un problema inquietante para el gobierno israelí.
Según un artículo de prensa del jueves en Reuters: "El Banco del Estado de la India (SBI) organizará los pagos, que serán en euros, con el banco alemán EIH, dijo la fuente bajo condición de anonimato."
El artículo observaba que el "SBI tiene [garantía] de los más altos niveles del gobierno para tratar con el EIH. Hay un atraso de alrededor de $2 mil millones en pagos."
La Embajada de Israel en Berlín, ha seguido de cerca la operación reciente y reiteradamente ha instado al gobierno alemán a actuar en contra del EIH.
El EIH también desempeña un rol clave en el procesamiento de transacciones comerciales para muchas empresas alemanas activas en Irán. Los críticos acusan a Merkel y el Ministerio de Economía de estar relegando la seguridad de Israel a una posición secundaria con el fin de no alienar a su electorado de empresas de mediano y pequeño nivel, un bloque de votación clave para el socio de la coalición de Merkel, el Partido Democrático Libre.
El procesamiento de los pagos de gas de India a través del EIH es precisamente lo que inquieta a los políticos y funcionarios de seguridad israelíes y estadounidenses. Los ingresos de las operaciones del EIH pueden ser usados por Irán para avanzar en su programa de armas nucleares y financiar a entidades terroristas como Hamas y Hezbolá.
El tema de la construcción de asentamientos y las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos también tuvo un papel durante la visita de dos días de Merkel a Israel.
Mientras que los titulares de los periódicos alemanes estaban llenos de cobertura saturada de los manifestantes egipcios que buscan desestabilizar al gobierno de Mubarak, el diario conservador Die Welt publicó un comentario protagónico del editorialista Torsten Krauel en su portada el martes criticando fuertemente a Merkel por su política sesgada e irregular hacia Israel.
El artículo de Krauel - "Las Políticas para Medio Oriente de Merkel Animan a los Extremistas" - clasificaba la fijación de Merkel en presionar a Israel a poner fin unilateralmente a la construcción de asentamientos alrededor de Jerusalem en un momento de agitación masiva en el mundo árabe como un equivocado.
Él escribió que el tono de Merkel durante su visita a Israel supone que "estos asentamientos son el único obstáculo en el camino a una rápida paz en Medio Oriente. Por esta razón, la Canciller comete un gran error."
Krauel, que fue el corresponsal de Die Welt en Washington y es ahora un editor principal de política alemana en el diario, ve la postura política exterior actual de Merkel hacia Israel como deficiente, en gran parte debido a que su política no dará lugar a concesiones de seguridad de la parte árabe para el estado judío. Él cita la retirada de Israel de Líbano y Gaza como ejemplos elocuentes de la cooperación israelí, que se encontró con la absorción por parte de los radicales islámicos de esas zonas y ataques con misiles en las fronteras sur y norte de Israel.
Su comentario representa, con pocas excepciones, una especie de anomalía periodística en el paisaje de los medios de comunicación y consultoras políticas alemanas. El punto de partida del Medio Oriente entre la mayoría de los periodistas y grupos de reflexión alemanes como el Instituto Alemán de Asuntos Internacionales y Seguridad, que sirve como el principal asesor de política extranjera del gobierno alemán, ha sido la promoción de un acuerdo de paz con los palestinos como la condición sine qua de la estabilidad regional.
La Revolución del Jazmin en Túnez y la campaña de la clase trabajadora común de Egipto para democratizar su sistema político han desacreditado rápidamente el modelo de Alemania de dar prioridad a un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos sobre la resolución de los problemas de la amenaza iraní, los autoritarios gobiernos árabes, el control de Hamas de Gaza, y el ascenso de Hezbolá como el hacedor de reyes en la política libanesa.
Todo esto ayuda a explicar la deconstrucción por parte de Krauel de la defectuosa insistencia de Merkel en que Israel acepte de inmediato la oportunidad actual de cerrar un acuerdo con los palestinos y frene la construcción de apartamentos israelíes en Cisjordania y Jerusalem Oriental.
Las políticas de Merkel hacia la seguridad israelí y la estabilidad de Medio Oriente dependen de cuanto ve su administración la seguridad nacional de Israel como parte integral de la seguridad nacional de Alemania.
En marcado contraste con la comprensión de los Estados Unidos de la seguridad israelí, a la retórica y las acciones erráticas alemanas de Merkel les falta el mismo nivel de aplicación política y han dado lugar a la expresión de creciente frustración por parte de los funcionarios, políticos y diplomáticos de EEUU e Israel.
Fuente: The Jerusalem Post- Este artículo fue traducido especialmente para el blog de OSA Filial Córdoba