lunes, 2 de julio de 2012

El pueblo egipcio se vuelca al islamismo

Luego de más de una semana de incógnitas y rumores, la Comisión Electoral de Egipto ha divulgado el resultado de las elecciones generales celebradas los días 16 y 17 de junio pasado. El vencedor, al igual que en la primera vuelta, ha sido el Ing. Muhamed Mursi, que con algo más de 13.230.000 (un 51.73 %) votos, superó a su rival Ahmed Shafir que solo logró 12.300.000 (48.27 %). De un padrón de 51.000.000 de votantes, menos del 52 % se ha presentado ante las urnas, lo que indica una cierta apatía de los mismos en las primeras elecciones democráticas, para elegir un presidente, de su historia. Como ya hemos mencionado en artículos anteriores, el pueblo egipcio debía elegir entre el candidato de los Hermanos Musulmanes, o el que había sido el último Primer Ministro en la época de Mubarak. Muy lejos se encuentra la ideología de estos candidatos con los primeros manifestantes que comenzaron a reunirse en febrero de 2011 en la céntrica plaza Tahrir de El Cairo. Por aquella época, jóvenes, en su mayoría universitarios, de ambos sexos, se convocaban por medio de las redes sociales para protestar contra el tiránico régimen del ejército. encabezado por Mubarak y que ya llevaba décadas en el poder. El movimiento original, anti militar y laico fue tomando ebullición y logró desestabilizar al régimen. Pero, poco a poco éste, fue sufriendo una metamorfosis, que fue cambiando al mismo y, el movimiento de los Hermanos Musulmanes se fue transformando en el eje de la protesta. Hoy luego de las elecciones realizadas, vemos que esta fuerza es la mayoría en las tierras de nuestro vecino. El cambio ha sido contundente. El prestigioso diario Haretz ha editorializado con la siguiente frase "La Primavera Arabe se transforma en un Invierno Islámico". Si esa es la opinión de la influyente publicación de izquierda, ya nada queda por agregar. El nuevo presidente se encuentra ante una situación realmente muy particular. Ha sido electo en el cargo, pero no existe en Egipto una constitución ni ley alguna que establezca sus obligaciones, sus derechos, sus poderes, etc. El parlamento que había sido elegido seis meses atrás acaba de ser disuelto por el ejército que anuló las elecciones realizadas oportunamente. Sin duda un caso muy particular pues su mandato no esta basado en ninguna disposición legal ni jurídica. Mursi, según cuentan los que lo conocen, no es una persona de una personalidad arrolladora. Siempre ha sido un político de bajo perfil y de poco poder de mando. Estudió enEgipto y luego fue a vivir a los Estados Unidos de Norte América. Allí, en California completó sus estudios universitarios y fue profesor de la Universidad Estatal de ese estado. Se nacionalizó como ciudadano estadounidense y sus hijos nacidos en ese período también tienen nacionalidad americana. Luego de vuelta en Egipto, nunca renunció a ella. Viste siempre de saco y corbata y es de muy poco hablar. Esta será la personalidad que rija los destinos del país vecino, los próximos años. En su primer discurso informó que va a ser el presidente de toooodos los egipcios. Con la marcha veremos los resultados. Israel no puede permanecer al margen de lo que ocurra en las puertas de su casa. En primer término, el Primer Ministro manifestó que espera que Mursi cumpla con los tratados de paz firmados en 1979. Este en su campaña electoral manifestó que entendía que los mismos deberían ser revisados. Pero sabemos que en período pre electoral los políticos dicen lo que estiman que la gente quiere oír y luego en la práctica, no todo se pude cumplir. Egipto necesita tranquilidad. La principal fuente de recursos es el turismo. Sin paz no hay turismo. Además el ejército, que seguirá influyendo poderosamente en lo estratos de poder, depende de la ayuda americana. Sin eso no pueden manejarse operativamente. Barak Obama se apresuró a felicitar al triunfador. Congratulaciones por él. Aunque debemos recordarle al bueno de Barak, que es necesario, de vez en cuando, releer las fábulas de Esopo. Casualmente la del granjero y la víbora. No vaya a suceder que ahora se le de calor, y luego se sufra de la picadura mortal. Sería interesante quitarle el veneno de entrada, para evitar males mayores. Otros que festejaron su triunfo han sido los líderes de Hamas de la Franja de Gaza y las autoridades de Irán. Eso no habla muy bien a su favor. A corto plazo resulta casi evidente que Egipto tiene problemas muy serios e Israel no será una prioridad inminente. Pero a Israel si le preocupan dos temas que deben ser solucionados de inmediato. En primer término, el control de la Península del Sinaí por donde se filtran terroristas de Gaza y refugiados políticos, o como quiera llamárseles, que ingresan en nuestras fronteras provenientes de Africa. El otro tema de vital importancia es que cada vez que recrudecen los movimientos terroristas desde Gaza y comienzan a llover proyectiles en el sur del país, Egipto ayudaba a poner paños fríos y calmaba los ánimos de Hamás. No sabemos a ciencia cierta si el acercamiento ahora entre ambos gobiernos mejorará o empeorará la situación. En este tema, sólo el tiempo podrá decirnos si es mejor o peor el cambio de timón. Por ahora sólo esperar. Fortificar internamente a Israel. Coadyuvar a una Israel unida, fuerte y poderosa. Que pueda defenderse por sus propios medios Esa es la misión primordial de las autoridades, y en el cumplimiento de ese objetivo se deben volcar todas las fuerzas.NOTI OLE
I Cont. Víctor Vaisman Editor Responsable