Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba
por Douglas Feith
 
Para retener el poder frente a una revuelta popular, el dictador sirio Bashar al-Assad ha matado a casi 15000 civiles. Desde un punto de vista humanitario, esta es una crisis. Desde un punto de vista de un interes nacional, es una oportunidad para socavar a los enemigos de los Estados Unidos tanto en Damasco como en Teheran. Pero el Presidente Obama ha tratado la agitacion sangrienta, primero y principal, como una oportunidad para fortalecer la idea que America debe someterse al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
En los 16 meses desde que comenzo la revuelta, la administracion Obama tampoco promovio "zonas seguras" humanitarias en la frontera turca de Siria, ni proveyo de armas a los rebeldes. No ha ayudado a establecer una zona de exclusion aerea, tampoco ha apoyado ataques militares de la OTAN contra las fuerzas de Assad. 
Al principio, el Sr. Obama pidio en vano que Assad se comporte humanamente. Finalmente el exhorto en vano a Assad para que renuncie al poder.
Mientras tanto, el Sr. Obama ha mirado a la ONU en busca de respuestas. La ultima: la Secretaria de Estado Hillary Clinton trabajo con los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad y el enviado de la ONU, Kofi Annan, en un acuerdo el 30 de junio pidiendo que los sirios diseñen una transicion politica para su propio pais—y extrañamente sugiriendo que el regimen de Assad puede cooperar en el intento. 
La vacuidad del acuerdo es una señal del apoyo del que goza Assad en Rusia y China, cada uno de los cuales tiene poder de veto en el Consejo de Seguridad. Los funcionarios de la administracion Obama se quejan por ese apoyo, pero el presidente ruso, Vladimir Putin, se les encoge de hombros.
Por que Rusia puede escudar a Assad, dañar al pueblo sirio, y frustrar la diplomacia americana? Debido a que el Sr. Obama ha hecho del Consejo de Seguridad el foco de la politica americana con respecto a Siria. Esto no era inevitable, tampoco era necesario.
Al preguntarsele por que ellos no han hecho mas contra el despota sirio, funcionarios del gobierno de Obama hablan con resignacion de la necesidad de aprobacion multinacional. "Nosotros tenemos que tener una base legal clara para cualquier accion que emprendamos", testifico ante el Senado en Marzo el Secretario de Defensa Leon Panetta. "Nuestro objetivo seria buscar permiso internacional." El Embajador de EEUU ante la OTAN, Ivo Daalder dijo a un publico ingles en mayo que la OTAN carecia de "claro apoyo regional" y "una firme base legal" para actuar en Siria. La justificacion legal, destaco el, "muy probablemente" tendria que ser una resolucion del Consejo de Seguridad. 
Este legalismo es tanto mala ley como mala politica. El Consejo de Seguridad no es un foro judicial. El Estatudo de la ONU da al Consejo de Seguridad el poder de tomar "decisiones" (resoluciones especiales que los paises de la ONU estan comprometidos "a aceptar y llevar a cabo"), pero tales resoluciones obligatorias son precisamente las que estan sometidas al poder de veto por parte de cualquiera de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad. El Consejo puede ser una fuente de apoyo diplomatico util y de autoridad de tipo legislativo, pero el estatuto no dice que la aprobacion del Consejo es un pre-requisito en todos los casos para una accion militar de un pais u otra accion en el exterior. Especialmente turbio es como debe gobernar las intervenciones humanitarias el estatuto.
La historia muestra que el Consejo de Seguridad no es la piedra de toque de la legalidad internacional. El Presidente John Kennedy "puso en cuarentena" a Cuba durante la crisis de los misiles de 1962 sin ningun permiso del Consejo de Seguridad. De igual manera sin tal permiso, el Presidente Bill Clinton ayudo a liderar la campaña de bombardeo de la OTAN para defender a los musulmanes serbios en la region Kosovo de Serbia de la opresion por parte de su propio gobierno. El Sr. Obama no ha buscado autorizacion del Consejo de Seguridad para su campaña de ataques con vehiculos aereos no tripulados contra al Qaeda en Pakistan, Yemen y otras partes. 
Cuando los funcionarios de los Estados Unidos o cualquier otro pais creen que tienen intereses humanitarios apremiantes o intereses de seguridad nacional para hacer algo, ellos lo hacen. Cuando un presidente americano piensa que los intereses americanos requieren accion, el puede razonablemente buscar apoyo politico de la ONU. Pero es absurdo hacer un fetiche del permiso del Consejo de Seguridad, especialmente si el problema que necesita remedio es causado por un amigo cercano de Rusia o China e involucra el tipo de accion violenta y anti-democratica que perpetran a menudo los propios funcionarios rusos y chinos.
La miseria de Siria es una ventana al pensamiento estrategico del Sr. Obama. Por mucho que el lamente el derramamiento de sangre alli, el considera a Siria menos importante que reforzar al Consejo de Seguridad como un medio de restringir el poder americano.
Lo mismo sucedio el año pasado cuando Moammar Gadhafi estaba atacando ciudades libias y acercandose a la aniquilacion completa de los rebeldes. El Sr. Obama no intervendria hasta que la Liga Arabe y el Consejo de Seguridad llamaran a la accion.
Al negarse a actuar en Siria, el presidente esta perdiendo una oportunidad de promover los intereses de seguridad de EEUU en el Medio Oriente, mientras esta beneficiando a Iran, el principal patrocinante del regimen de Assad. Y al sugerir que America carece de autoridad legal internacional para actuar, el esta socavando la soberania americana. Los presidentes tradicionalmente se han propuesto reforzar la soberania y libertad de accion de America, pero el Sr. Obama evidentemente se pone del lado de los legalistas globales que ven la soberania nacional como un problema que debe ser superado, no como un principio que debe ser estimado.
 
El Sr. Feith, alto miembro del Instituto Hudson, se desempeño como subsecretario de defensa para politica entre los años 2001 y 2005.