viernes, 12 de noviembre de 2010

Mensaje XXXI - Rab Isaac Ruben Yacar‏

6 de Kislev de 5771

13 de Noviembre de 2010

Encendido de las Nerot de Shabat: 19:23hs.
Shabat Finaliza: 20:14hs.

Perasha Vaiesé



La escalera:

La escalera del sueño de Iaacob, cuya parte inferior estaba apoyada sobre la tierra tiene múltiples significados.

Trataremos de explicarlo de acuerdo a nuestro entendimiento.

Estamos acostumbrados a observar escaleras de distintos materiales y formas. Están las de madera, aluminio, las que son mecánicas y muchas más. No son las únicas. En la vida actual existen otros tipos de escaleras que al igual de las de material tienen el mismo mecanismo: subir y bajar. Por ejemplo en los rangos militares, sociales, gubernamentales y más aun económicos.

Países que están en alzas, de pronto caen y viceversa. Parecería ser que la vida es como un sube y baja.

La base de la escalera debe ser nuestro punto de partida. Si la base es solida se puede llegar muy alto.

La escalera que aparece en el sueño de Iaacob, estaba inclinada hacia el Bet Hamikdash. De la misma manera debe ser la persona, con un equilibrio que representa a la base y a las aspiraciones, las cuales serían la inclinación de la escalera, sin importar el lugar geográfico en el cual se encuentre. Estas aspiraciones deben ser elevadas tanto espiritualmente como en lo personal.

El primer sueño que se menciona en la Torá está representado mediante esta escalera. Muchos son los sueños que la Torá nombra. Como los de Parho que demostró el quehacer económico del país. Los sueños de Iosef que trajeron tanta envidia y odio entre los hermanos y otros más.

Ser el primero merece una atención concreta ya que todo lo que la Torá menciona como primero, tiene un significado especial.

Siguiendo este orden, la palabra “Sulam” cuyo significado es escalera, es la única vez que figura en todo el Tanaj.

Los diferentes comentaristas explican que por intermedio de esta profecía Hashem le mostró a Iaacob, como también a nuestros patriarcas, todo el futuro del pueblo de Israel hasta la llegada del Mashiaj.

Por ejemplo la entrega de la Torá, el Bet Hamikdash y las cuatro diásporas del pueblo de Israel.

Sinai = Sulam = 130:

Uno de los presagios del futuro que tuvo Iaacob, fue la entrega de la Torá. El libro Baal Haturim demostró que la numerología (Guemataría de la palabra Sulam) es 130 al igual que la palabra Sinaí.

La similitud entre la escalera y el monte de Sinai es:

1) La escalera estaba sobre la tierra

“Vehine Sulam Mutzav” (He aquí que la escalera se encuentra) su numerología es 327 al igual que la palabra “Hakevesh” (rampa).

“Artza”, la palabra tierra, representa al “Mizveaj Adama”, el altar de piedra.

2) Y su pedestal llegaba al cielo

“VeRosho Maguia HaShamaima” (su extremo superior llegaba al cielo), simboliza el aroma de los Korbanot que subían al cielo.

3) He aquí los ángeles

“Vehine Malajei” (he aquí los ángeles), tiene las mismas letras que “Elu HaCohanim” (estos son los Cohanim). Alude a los Cohanim que iban a servir en el futuro en el Bet Hamikdash.

Las cuatro diásporas:

En el sueño, Iaacob, vislumbró una escalera, la cual se extendía desde la tierra hacia el cielo. En el mismo, visualizó un ángel ascendiendo por ella a quien reconoció como el ministro del reino de Babilonia. Este ascendía setenta peldaños y luego caía. Iaacob comprendió que el pueblo de Israel, permanecería exiliado durante setenta años bajo el reino babilónico.

Luego vio al ángel de Midian, el cual ascendía cincuenta y dos escalones y luego caía. Comprendió así que los Iehudím estarían bajo el exilio persa durante cincuenta y dos años.

El tercer ángel que visualizó fue el de Grecia ascendiendo ciento ochenta escalones para luego hundirse, presagiando el período del exilio griego.

Por último Iaacob vio al ángel de Edom (nuestro exilio actual), pero al contrario de los otros, ascendió demasiado sin bajar. Al ver que no descendía, un sentimiento de temor lo evadió a Iaacob y comprendió así que el fin de este exilio sería incógnito.

La Tefilá:

La palabra “Sulam” con la letra “Vav”, suma 136 al igual que la palabra “Kol” (voz), ya que la voz de la Tefilá es la escalera para el ascenso hacia Hashem.

Los ángeles se elevan desde la tierra, y llevan nuestras plegarias hasta el Trono Celestial. Luego vuelven a bajar hacia nosotros cargados de bendiciones celestiales.

La escalera del dinero:

La palabra “Sulam”(escalera), tiene la misma numerología que la palabra “Mamon” (dinero) y que la palabra “Oni” (pobreza), en hebreo. Sobre el Versículo de Bereshit 1:26, esta dicho: “Hagamos una persona”. Dicen los comentaristas: La palabra “hagamos”, se la dijo Hashem a las personas con dinero: “Yo hare a las personas pobres y ustedes van a darles el dinero, juntos”. Si la persona tiene dinero y no se la da a un pobre, esta persona no estaría practicando la unión, y no tiene relación alguna con Hashem. Pero si le da el dinero a los pobres, sobre esto está dicho: “He aquí una escalera apoyada sobre la tierra, que su cabeza llega hasta el cielo”. Esta persona que brinda de sus bienes se encontraría aquí, con los pies en la tierra, y su cabeza “llegaría al cielo”, porque mediante esta Mitzvá garantiza la unión con Hashem. Si no da Tzedaká, sale del término “Hagamos una persona”, ya que estaría haciendo lo contrario para tener unión hacia Hashem.

También la palabra “Sulam” (escalera), tiene la misma numerología que la palabra “Sinaí”.

“Escalera apoyada sobre la tierra y su cabeza llega hasta el cielo”: Esto se logra por medio del estudio de la Torá. En este versículo hay cuatro palabras que describen a la palabra “Jesed” (bondad): “Vaiajalom” (y soñó), “Sulam” (escalera), “Olim” (Suben), “Veiordim” (y bajan). Estas cuatro palabras hacen alusión a las cuatro diásporas. En cada una de ellas le falta la letra “Vav”, la cual según su numerología, en hebreo, es el número seis, para hacer alusión a los Seis tomos de la Mishna (Torá oral). Si van a estudiar la Torá oral, los gobiernos de las cuatro diásporas se van a destruir rápidamente.

La escalera y el orgullo:

Cuentan sobre una escalera de diez escalones que estaba apoyada sobre la pared de una casa. A pesar que todos los peldaños eran iguales, uno al otro, y estaban hechos del mismo árbol y tipo, con todo eso, el escalón superior tenía orgullo sobre los inferiores, y más aún con el escalón que estaba sobre el piso. El escalón que estaba arriba de todos los demás, abrió su boca con orgullo y dijo a los demás: “El dueño de la casa me puso sobre todos ustedes para que sea su cabeza”. En ese momento pasó un hombre por el camino, y escuchó estas palabras. Decidió poner al escalón inferior como superior y al superior como inferior. El escalón que antes estaba arriba, se puso muy triste y se arrepintió de lo que dijo. Y en cuanto al inferior, que terminó siendo el superior ahora, no se enorgulleció, y pensó que cualquier otra persona podría venir y cambiarlo de vuelta de lugar, como le pasó al otro peldaño.

Esto significa que no debemos enorgullecernos de nuestros bienes materiales, ya que el dinero es como los peldaños de la escalera. Un día está arriba y al otro día puede estar abajo, puesto que este mundo es como una rueda.

SHABAT SHAOLM!!

Baruj Hashem estamos recibiendo muchos comentarios sobre los mensajes que mandamos semanalmente previos a Shabat. Nos gratifica mucho recibir los comentarios ya que nos da estímulo para seguir escribiendo y que B¨sd cada vez lo reciba más gente.

También pueden visitar nuestra sitio web que es www.shaaresion.org.ar que esta renovada y con muchas actualizaciones!!.

RAB ISAAC RUBEN YACAR.

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