miércoles, 29 de abril de 2009

UNA TRANSFERENCIA DE MEMORIA‏


By MENACHEM Z. ROSENSAFT

El 24 de abril de 1945, mi madre, Dr. Hadassah Bimko Rosensaft, dio uno de sus primeros relatos testimoniales de los horrores del Holocausto en un noticiario de Movietone News que fue filmado en el recientemente liberado campo de concentracion nazi de Bergen-Belsen.
Cuando las tropas britanicas ingresaron a Bergen-Belsen cerca de la ciudad alemana de Hanover nueve dias antes, ellos encontraron una devastacion de miseria humana para la cual ellos no estaban finalmente preparados. Mas de 10000 cuerpos yacian dispersos por el campo, y los 58000 prisioneros sobrevivientes, la desbordante mayoria de los cuales eran judios, estaban sufriendo una combinacion de tifus, tuberculosis, disenteria, malnutricion extrema y otras muchas enfermedades virulentas. Mi madre, una dentista judia de Polonia que aun no contaba con 33 años de edad, estaba entre los sobrevivientes. Sus padres, primer marido, hijo de cinco años y medio y hermana habian sido todos gaseados en Auschwitz- Birkenau, donde ella habia pasado mas de 15 meses antes de ser enviada a Bergen-Belsen en noviembre de 1944. Con la guerra aun en curso, el Brigadier H. L. Glyn-Hughes, el vice director de servicios medicos del ejercito ingles del Rhine, la nombro para organizar y dirigir a un grupo de doctores y enfermeras entre los sobrevivientes para ayudar a un equipo de personal medico militar para el cuidado de los miles de prisioneros criticamente enfermos del campo.
Una semana despues de la liberacion, el noticiario Movietone News britanico arribo a Bergen-Belsen para grabar la evidencia de los crimenes de la Alemania Nazi. En el noticiario, mi madre hablo convincentemente y desafiantemente en fluido aleman, eligiendo sus palabras cuidadosamente, sin vacilar. Vestida en un uniforme medico blanco, ella observo directamente a la camara. "Es dificil para mi describir", dijo, "todo lo que nosotros los prisioneros experimentamos aqui en los campos. Como un pequeño, muy pequeño ejemplo puedo relatar que los prisioneros eramos arrojados a la tierra de un sucio, enlodado campo, sin mantas, sin bolsas de heno, sin camas. A nosotros se nos daba un doceavo de una pieza de pan diaria y un litro de sopa de nabo por lo que casi el 75% de los prisioneros se hinchaban por el hambre. Estallo una severa epidemia de tifus, y el hambre y el tifus nos devoraron."
A traves de la camara ella conto al mundo como los alemanes se habian rehusado a dar a los hambrientos prisioneros los envios de alimentos enviados por la Cruz Roja hasta poco antes del arribo de las tropas britanicas, y como el comandante SS del campo habia robado grandes cantidades de chocolates destinadas para los chicos judios para enriquecerse el mismo en el mercado negro.
Cinco meses despues, mi madre fue una de las principales testigos para la fiscalia en el primer juicio a criminales de guerra nazis. En su testimonio ante un tribunal militar britanico en Luenenburg, Alemania, ella describio en detalle la brutalidad y sadismo de los oficiales y guardias SS en Auschwitz y Bergen-Belsen.
En su segundo dia en el estrado de testigos, uno de los abogados defensores nombrado por la corte sugirio, de acuerdo al informe publicado en el The New York Times del 23 de septiembre de 1945, que la declaracion de mi madre de que ella habia visto a uno de los acusados patear y golpear a los prisioneros era "puro invento." "Yo quisiera apuntar", replico mi madre, "yo estaba presente y no el consejero defensor durante aquellas condiciones que he descripto."
Este incidente puede ser descartado como una tactica de juicio de los celosos abogados, si no fuera por otros temas noticiosos publicados en la misma pagina que el testimonio de mi madre. Alli, el General George Patton, director del gobierno militar americano de Bavaria, es citado diciendo que "esta cosa nazi es exactamente como una pelea electoral Democrata y Republicana." Avance rapido a Patrick Buchanan, alto funcionario de la Casa Blanca bajo las presidencias Nixon y Reagan y una vez candidato archi-conservador para la nominacion presidencial republicana, quien escribio el 17 de marzo de 1990, en una columna de sindicato que hubiera sido imposible para los judios perecer en las camaras de gas del campo de muerte de Treblinka. En la misma columna, Buchanan se refirio al "asi llamado sindrome del sobreviviente del Holocausto" al cual el describio como involucrando "fantasias grupales de martirologio y heroismo". Y entonces avance rapido mas lejos hacia el Obispo Richard Williamson, el renegado clerigo catolico cuyo Papa Benedicto XVI penso rehabilitar a principios de este año, quien declaro en la television sueca que "yo creo que la evidencia historica esta largamente en contra, es enormemente contraria a los seis millones de judios siendo deliberadamente gaseados en camaras de gas como politica deliberada de Adolf Hitler... Yo creo que no hubo camaras de gas."
El Obispo Williamson no esta solo. El diciembre de 2006, el presidente irani Mahmoud Ahmadinejad reunio una conferencia internacional pseudo-academica en Teheran titulada "Conferencia Internacional sobre 'Revision del Holocausto: Vision Global'", en la cual luminarias tales como David Duke, el alguna vez mago Imperial del Ku Klux Klan, "debatio", en efecto, si mis abuelos y hermano habian efectivamente sido gaseados en Auschwitz.

Seis meses despues que mi madre murio en octubre de 1997, estuve en Auschwitz-Birkenau con mi hija Jodi, entonces una estudiante de segundo año del college. Ella camino en silencio a traves de las barracas de madera podrida. Despues de 15 o 20 minutos, Jodi me miro y dijo, "Sabes, se ve exactamente de la forma en que Dassah (que era como ella llamaba a mi madre) lo describio." Yo me di cuenta que una transferencia de memoria habia tenido lugar. Mi hija, nacida 33 años despues del Holocausto, habia reconocido Birkenau a traves de los ojos de mi madre, a traves de los recuerdos de mi madre."

Por los ultimos 64 años, los sobrevivientes han luchado contra aquellos que buscan negar o trivializar el genocidio de la juderia europea. Ahora, mientras los testigos del Holocausto se desvanecieron en la historia, nosotros como sociedad debemos tomar su causa por nuestra cuenta absorbiendo sus memorias en nuestra conciencia colectiva. Los testimonios personales de los sobrevivientes, incluyendo las palabras de mi madre en el noticiario de Movietone y sus memorias publicadas postumamente, son su legado duradero. Ellas son tambien nuestro mas poderoso antidoto contra los negacionistas del Holocausto contemporaneos y futuros.
El autor es Consejero General del Congreso Judio Mundial y profesor adjunto de Derecho en Cornell Law School. El es el presidente fundador de la Red Internacional de Hijos de Sobrevivientes Judios del Holocausto.
Fuente: The Jerusalem Post
Foto: Yad Vashem- Soldado britanico hablando con prisionero en el campo de Bergen-Belsen luego de la liberacion

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.