Desde Yakarta a Jerusalem

10/11/10

En las ultimas semanas, Indonesia ha soportado un tsunami y una erupcion volcanica. En el lado positivo, tiene una economía en auge, una democracia vibrante y un clima de inversión acogedor. Y debido a que este país de mayoría musulmana tiene una larga tradición de moderación religiosa y laicismo, sirve como modelo, o reprimenda, a gran parte del resto del mundo islámico.
Entonces de que hablo el Presidente Obama a su llegada a Yakarta ayer? Los proyectos israelíes de construcción.
Por qué Obama eligió levantar esta lucha desde la distancia del sudeste de Asia es lo que cualquiera se pregunta. La decisión de Israel de seguir adelante con la construcción de unas 1.000 unidades de viviendas en el barrio de Har Homa de la Jerusalem municipal- un "asentamiento" sólo en el sentido más amarillista del término- fue tomada en octubre. Los gobiernos israelíes tanto de derecha como de izquierda han fomentado proyectos de construcción similares, desde que Jerusalem fue reunificada en 1967. Y la construcción de las nuevas viviendas no comenzará por meses si no años.
Nada de eso disuadió al Sr. Obama, quien advirtió al gobierno israelí que "este tipo de actividad nunca es útil cuando se trata de negociaciones de paz." El Departamento de Estado también intervino, diciendo que estaba "profundamente decepcionado", mientras que el portavoz palestino Saeb Erekat agregó que la construcción nueva prueba "que Israel elige los asentamientos, no la paz." Este es el mismo Sr. Erekat que recientemente escribió una carta de admiración a Ahmed Saadat, el autor intelectual del asesinato en 2001 de un miembro del gabinete israelí.
Todo lo que Israel ha hecho es insistir en que los judios tienen derecho a vivir en cualquier parte de su capital, algo que podría ser objeto de controversia en Ramallah, pero no debería serlo en Washington. El apoyo público de Obama a la opinión palestina respecto a lo que constituye un asentamiento sólo pone la paz negociada que el busca más fuera del alcance.
Mientras tanto, el gobierno de Indonesia prohíbe a los ciudadanos israelíes visitar su país. Si el señor Obama quiere salvar la distancia entre Yakarta y Jerusalem, tal vez él puede comenzar con eso.
Fuente: The Wall Street Journal