Bombardeos sobre la ciudad de Gaza controlada por Hamas
Israel está luchando contra un grupo terroristas. El grupo terrorista Hamás en su Carta Fundacional habla de la destrucción total de Israel. (1) Luego habla de extender el movimiento Yihadista en el mundo y de la muerte de todos los judíos e infieles. (Se entiende que son infieles todos aquellos que no piensan como ellos, de cualquier religión, incluso la musulmana). Su vida es la lucha. Sus medios son la lucha armada. Sus objetivos matar o morir. Vencer o perecer en el intento.
Este grupo terrorista ha tomado el control en la Zona de Gaza, en el año 2005 y luego de desalojar del poder a Al Fathaj en 2007 se apodera de todo el territorio y no permite ningún tipo de competencia interna.
Esta es la tercera vez, desde ese entonces, que Israel debe entrar directamente en batalla contra estos terroristas debido a los continuos ataques de estos hacia la población de Israel que viven en zonas que lindan con la franja. Miles y miles de todo tipo de proyectiles han caído sobre suelo israelí. Si los daños no han sido más importantes es porque hasta el presente los combatientes de Hamás no contaban con equipos de gran precisión. Disparaban contantemente sin determinar con exactitud dónde iban a caer sus proyectiles. Su intención fue siempre causar daños materiales y humanos. No les importaba si sus bombas caían en zonas ampliamente pobladas, en colegios, hospitales, clínicas, mercados, etc. Su objetivo era solo matar y destruir. Cuanto más mejor. En esos momentos nadie decía nada. Nadie objetaba muy públicamente sus actos. Eran los pobres palestinos que protestaban contra la opresión y la ocupación de Israel. No importaba que Israel no ocupara ni un centímetro cuadrado de la Franja ni que se haya retirado unilateralmente de ella. Era una buena causa hablar de ocupación. Sobre ese tema tienen derecho a discutir los habitantes de Cisjordania, pero ellos están enfrentados con los palestinos de Hamás y no suponemos que los bombardeos al sur de Israel era para que los colonos israelíes se retiraran de las zonas en disputa con Abu Masen y su gente.
Respecto a que estaban aislados y no tenían elementos hemos visto que, como de costumbre, han mentido. Durante este tiempo ingresaron a la Franja, combustible, alimentos, materiales de construcción, herramientas y cualquier otro tipo de elemento que ellos habían solicitado. Recibiendo subsidios de instituciones americanas y europeas compraban cemento, hierro y herramientas que no utilizaban para la construir colegios u hospitales sino para planear la mejor red subterránea de la zona para arribar a Israel y provocar la muerte y el rapto de civiles y militares.
Hoy Hamas está obligada a mantener una lucha contra Israel, que quien no conoce el tema en profundidad sostiene que es desproporcionada. En la guerra y en el amor, todos los recursos son válidos. Y cada uno emplea los mejores elementos disponibles para protegerse del enemigo y destruir a este si es posible. Israel trata de dirigir sus ataques desde donde provienen los proyectiles que surcan los cielos y caen en tierra abierta o son destruidos por sus elementos de defensa. Hamas tira sus cohetes a ciudades altamente pobladas tratando de matar la mayor cantidad de israelíes posibles. Si no tiene el éxito esperado es porque el sistema de defensa funciona. Los periodistas desde la franja de Gaza muestran barrios destruidos, niños heridos, madres llorando y cualquier tipo de circunstancia similar. Realmente es lamentable. Se sufre viendo esas imágenes de dolor. Pero sinceramente, prefiero ver a los palestinos en esas circunstancias y no al pueblo de Israel. A esos mismos periodistas, a los cuales les encanta mostrar desgracias, ¿nunca han tenido oportunidad de mostrar los depósitos de armamentos en los sótanos de mezquitas y hospitales?
Hamas tiene que luchar hasta morir o desaparecer. No hay opciones intermedias. Va a luchar hasta sus últimas consecuencias o perderá credibilidad entre la población palestina. Obligará a los niños a subir a las azoteas. Llenará los colegios de población civil y pondrá las reservas de proyectiles en su interior bajo tierra. Llorarán sus representantes lágrimas de cocodrilo pero no se rendirán jamás. Su esencia y su vida lo exigen. Lucha o muerte.
Israel debe destruir la mayor cantidad de armas posible. Inutilizar sus lanzaderas, derrumbar sus túneles y terminar de ser posible con sus dirigentes. Pero esto no puede eternizarse. Se debe apurar al máximo el objetivo y luego retirarse de la zona. Si es necesario seguirá actuando la artillería, la aviación y la marina. Pero desde afuera, donde los soldados no tengan que enfrentarse en combates de guerrillas dentro de las ciudades. La historia nos muestra que las guerrillas ciudadanas causan muchas bajas en las fuerzas armadas. No se debe intentar permanecer en Gaza. Terminar el objetivo cuanto antes y luego respaldar la acción desde territorio Israelí.
Cr. Víctor Vaisman
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