El premier francés habló de la necesidad de "medidas excepcionales" y su par británico quiere mantener controlado el whatsapp
Líderes europeos aumentan las restricciones tras los ataques
En Francia y Gran Bretaña presentaron propuestas "antiterroristas" para modificar su legislación. Supervisarán a los condenados por acciones extremistas y pretenden vigilar las redes sociales en Internet, entre otras iniciativas.
Homenaje - Hollande asistió a los funerales de los policías caídos en los ataques de la semana pasada, mientras su gobierno prepara una batería de medidas.
Tras el brutal atentado contra la redacción de la revista humorística Charlie Hebdo, diferentes figuras de la política europea pidieron la adopción de medidas de seguridad más estrictas para, según dijeron, hacer frente al terrorismo. El premier francés, Manuel Valls, y su par británico, David Cameron, presentaron sus propuestas "antiterroristas" para modificar la legislación en sus respectivos países, mientras la líder ultraderechista gala Marine Le Pen volvió a insistir con realizar mayores controles en las fronteras, prohibir la libre circulación de personas en la región y aumentar la presencia policial.
En plena Asamblea Nacional, durante una sesión de homenaje a las víctimas de los atentados de la semana pasada, el primer ministro Valls dijo que el gobierno francés está dispuesto a adoptar "medidas excepcionales", aunque aseguró que se trata de iniciativas que "no contradirán el principio del derecho" ni afectarán la vida cotidiana de quienes profesan el Islam. "Francia está en guerra contra el terrorismo, los yihadistas, el radicalismo, pero no contra una religión", señaló Valls, quien además informó que los diputados franceses refrendaron la participación del país en la coalición internacional liderada por Estados Unidos para combatir al Estado Islámico (EI) en Irak.
El funcionario habló sobre la necesidad de implementar un nuevo "fichero" de personas condenadas por extremismo, que las obligaría a declarar su domicilio y permanecer bajo estricta supervisión. También anunció que, de aquí a fin de año, se ampliará a todo el país un programa piloto que comenzará a aplicarse esta semana en dos cárceles de París, donde se instalarán salas para agrupar y aislar del resto de los reclusos a quienes estén detenidos por pertenecer a organizaciones terroristas.
A partir de septiembre, Francia comenzará a utilizar su propio registro de datos de pasajeros de aerolíneas, una herramienta que, por ahora, permanece bloqueada en el Parlamento Europeo. El gobierno que preside François Hollande, quien ayer participó de los funerales de los policías caídos en los ataques, recibirá la semana que viene una batería de propuestas de los ministerios de Justicia, Interior y Defensa, y además presentará un proyecto de ley para reforzar los servicios secretos encargados de información interna, como así también imponer una vigilancia más estricta en internet y las redes sociales, usadas "más que nunca por los yihadistas", afirmó Valls.
La propuesta del premier francés va en sintonía con la presentada ayer por su par británico, David Cameron, quien aseguró que si su partido, el Conservador, gana las próximas elecciones de mayo limitará el uso de las comunicaciones en su país para prevenir futuros atentados terroristas. El funcionario consideró que los servicios de mensajería instantánea, como WhatsApp, "son un lugar seguro para que los terroristas se comuniquen entre ellos".
Cameron sostuvo que la actual legislación no permite acceder, "incluso en casos de urgencia y con una orden firmada por el ministro del Interior", a mensajes cifrados. Por eso dijo que dotará a los servicios secretos británicos de nuevas competencias para espiar las comunicaciones privadas y la actividad en internet de los ciudadanos bajo el pretexto de "prevenir el terrorismo" y garantizar "una normativa exhaustiva que garantice un lugar seguro donde comunicarse". Las leyes sobre acceso a las comunicaciones privadas expiran en 2016, por lo que si Cameron triunfa en las elecciones de mayo tendrá la posibilidad de legislar.
El gobierno británico ya aumentó las competencias de las agencias de seguridad al permitir la retirada del pasaporte de presuntos yihadistas británicos, como así también al negar temporalmente el retorno al país de quienes hayan combatido junto al EI en territorios como Siria e Irak. Sin embargo, no consiguió dar competencias a los servicios secretos para examinar libremente todas las comunicaciones, debido a la oposición de organizaciones de defensa de los derechos civiles, la opinión pública y los legisladores liberal-demócratas, socios de Cameron en el gobierno. «
En plena Asamblea Nacional, durante una sesión de homenaje a las víctimas de los atentados de la semana pasada, el primer ministro Valls dijo que el gobierno francés está dispuesto a adoptar "medidas excepcionales", aunque aseguró que se trata de iniciativas que "no contradirán el principio del derecho" ni afectarán la vida cotidiana de quienes profesan el Islam. "Francia está en guerra contra el terrorismo, los yihadistas, el radicalismo, pero no contra una religión", señaló Valls, quien además informó que los diputados franceses refrendaron la participación del país en la coalición internacional liderada por Estados Unidos para combatir al Estado Islámico (EI) en Irak.
El funcionario habló sobre la necesidad de implementar un nuevo "fichero" de personas condenadas por extremismo, que las obligaría a declarar su domicilio y permanecer bajo estricta supervisión. También anunció que, de aquí a fin de año, se ampliará a todo el país un programa piloto que comenzará a aplicarse esta semana en dos cárceles de París, donde se instalarán salas para agrupar y aislar del resto de los reclusos a quienes estén detenidos por pertenecer a organizaciones terroristas.
A partir de septiembre, Francia comenzará a utilizar su propio registro de datos de pasajeros de aerolíneas, una herramienta que, por ahora, permanece bloqueada en el Parlamento Europeo. El gobierno que preside François Hollande, quien ayer participó de los funerales de los policías caídos en los ataques, recibirá la semana que viene una batería de propuestas de los ministerios de Justicia, Interior y Defensa, y además presentará un proyecto de ley para reforzar los servicios secretos encargados de información interna, como así también imponer una vigilancia más estricta en internet y las redes sociales, usadas "más que nunca por los yihadistas", afirmó Valls.
La propuesta del premier francés va en sintonía con la presentada ayer por su par británico, David Cameron, quien aseguró que si su partido, el Conservador, gana las próximas elecciones de mayo limitará el uso de las comunicaciones en su país para prevenir futuros atentados terroristas. El funcionario consideró que los servicios de mensajería instantánea, como WhatsApp, "son un lugar seguro para que los terroristas se comuniquen entre ellos".
Cameron sostuvo que la actual legislación no permite acceder, "incluso en casos de urgencia y con una orden firmada por el ministro del Interior", a mensajes cifrados. Por eso dijo que dotará a los servicios secretos británicos de nuevas competencias para espiar las comunicaciones privadas y la actividad en internet de los ciudadanos bajo el pretexto de "prevenir el terrorismo" y garantizar "una normativa exhaustiva que garantice un lugar seguro donde comunicarse". Las leyes sobre acceso a las comunicaciones privadas expiran en 2016, por lo que si Cameron triunfa en las elecciones de mayo tendrá la posibilidad de legislar.
El gobierno británico ya aumentó las competencias de las agencias de seguridad al permitir la retirada del pasaporte de presuntos yihadistas británicos, como así también al negar temporalmente el retorno al país de quienes hayan combatido junto al EI en territorios como Siria e Irak. Sin embargo, no consiguió dar competencias a los servicios secretos para examinar libremente todas las comunicaciones, debido a la oposición de organizaciones de defensa de los derechos civiles, la opinión pública y los legisladores liberal-demócratas, socios de Cameron en el gobierno. «
Amplia convocatoria por la tolerancia religiosa en Berlín
La canciller Angela Merkel y diversos líderes políticos y religiosos de Alemania participaron ayer en Berlín de una vigilia convocada por la comunidad musulmana contra el terrorismo y la islamofobia.
Bajo el lema "Mantenernos juntos. Dar la cara", los presentes recordaron a las 17 víctimas de las dramáticas jornadas de la semana pasada en Francia e hicieron un llamado a la tolerancia religiosa.
La movilización fue convocada por el Consejo Central de Musulmanes en Alemania (ZMD) y reunió a unas 25 mil personas.
En ese acto, Merkel sostuvo que "lo que necesitamos hacer ahora es usar todos los medios a nuestra disposición para combatir la intolerancia y la violencia". A su lado, Aiman A. Mazyek, presidente del ZMD, dijo que "los terroristas no ganarán en el futuro", y recordó que tanto "periodistas como artistas, todos deben tener libertad para poder expresarse".
Ante representantes religiosos de la Iglesia Católica, evangélica y de las comunidades judía y musulmana de Alemania, el presidente del país, Joachim Gauck, afirmó que la convocatoria había sido organizada en "nombre de la solidaridad". "Y nos hemos unidos para reafirmar lo que la concordia, la ley y la libertad significa para nosotros", dijo el mandatario
Bajo el lema "Mantenernos juntos. Dar la cara", los presentes recordaron a las 17 víctimas de las dramáticas jornadas de la semana pasada en Francia e hicieron un llamado a la tolerancia religiosa.
La movilización fue convocada por el Consejo Central de Musulmanes en Alemania (ZMD) y reunió a unas 25 mil personas.
En ese acto, Merkel sostuvo que "lo que necesitamos hacer ahora es usar todos los medios a nuestra disposición para combatir la intolerancia y la violencia". A su lado, Aiman A. Mazyek, presidente del ZMD, dijo que "los terroristas no ganarán en el futuro", y recordó que tanto "periodistas como artistas, todos deben tener libertad para poder expresarse".
Ante representantes religiosos de la Iglesia Católica, evangélica y de las comunidades judía y musulmana de Alemania, el presidente del país, Joachim Gauck, afirmó que la convocatoria había sido organizada en "nombre de la solidaridad". "Y nos hemos unidos para reafirmar lo que la concordia, la ley y la libertad significa para nosotros", dijo el mandatario
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