miércoles, 19 de enero de 2011

NUESTRO MUNDO: LAS LECCIONES DE TUNEZ PARA WASHINGTON

By CAROLINE B. GLICK
01/17/2011

Si en el climax de las protestas antigubernamentales en Tunez la semana pasada, Israel y los palestinos hubiesen firmado un acuerdo final de paz, los manifestantes hubiesen empacado sus carteles y se hubiesen ido a casa?
Por supuesto que no.
Entonces que nos cuenta la naturaleza de la politica americana de Medio Oriente que en el punto maximo de las protestas en contra del regimen en Tunez, la Casa Blanca estuviera consumida con la pregunta de como dar el puntapie inicial al mordaz proceso de paz entre los palestinos e Israel?
De acuerdo a Politico, cuando la primera revolucion popular en la historia arabe moderna estaba en plena marcha, la semana pasada la Casa Blanca organizo dos "fuerzas de tareas" para producir "nuevas ideas" para obtener que los palestinos acepten sentarse con los negociadores israelies. La primera fuerza de tareas esta comprendida por los ex consejeros de seguridad nacional de Clinton y Bush, Sandy Berger y Stephen Hadley.
La segunda es liderada por el ex embajador americano para Israel bajo la administracion Clinton, Martin Indyk.
Y mientras estos expertos estaban poniendose en marcha, el Presidente americano Barack Obama envio a su consejero y ex enviado de paz para Medio Oriente bajo el primer y segundo gobierno de Bush y de Clinton, Dennis Ross a Israel para reunirse con lideres israelies y palestinos para pedirles sacar "nuevas ideas." Asombrosamente, ninguna de estas fuerzas de tareas o reuniones ha llegado a nada nuevo.
Nuevamente, de acuerdo a Politico, estas fuerzas de tareas y consultas generaron tres posibles movimientos para la Casa Blanca de Obama. En primer lugar, puede poner mas presion sobre Israel anunciando apoyo americano para un "plan de paz" que requeriria que Israel rinda su ciudad capital y fronteras defendibles.
Segundo, Estados Unidos puede presionar a Israel buscando desestabilizar al gobierno del Primer Ministro Binyamin Netanyahu.
Y tercero, Estados Unidos puede presionar a Israel bombeando aun mas dinero en los cofres del gobierno palestino no electo y elevar asi las expectativas que EEUU apoya al plan del gobierno palestino no electo de declarar la independencia sin aceptar vivir en paz con Israel.
Bravo por las nuevas ideas.
LUEGO ESTA EL drama desarrollandose en Libano. Es dificil pensar en una mayor bofetada en la cara que la que Hizbullah y Siria dieron a Obama el pasado miercoles. Hizbullah derribo al gobierno del Primer Ministro libanes Saad Hariri con el apoyo abierto y activo de Siria mientras estaba reunido con Hariri en la Oficina Oval.
Y como respondio Obama a esta bofetada en la cara? Enviando al Embajador Robert Ford a Damasco para asumir su nuevo puesto como el primer embajador americano en Siria desde que Siria y Hizbullah conspiraron para asesinar al padre de Hariri, el ex primer ministro libanes Rafik Hariri hace seis años atras.
La realidad esta estrellandose sobre la administracion Obama. Pero en vez de enfrentar los desafios presentados por la realidad, el gobierno de Obama esta enterrando su cabeza en la arena. Y esta enterrando la cabeza en la arena con el firme apoyo de la elite endogamica de politica exterior americana.
El derrocamiento del presidente tunecino Zine El Abedine Ben Ali el viernes pasado es un acontecimiento divisorio de aguas en el mundo arabe. Es demasiado temprano para aventurar siquiera una suposicion acerca de como se vera Tunez dentro de un año. Pero no es demasiado temprano como para entender que el regimen de Ben Ali no fue la unica cosa destruida el viernes pasado. Las dos bases principales de analisis occidental experto sobre "Medio Oriente" tambien han sido deshechas.
La primera base de lo que ha pasado como sabiduria occidental acerca de la region es que lo unico que motiva a la proverbial "calle arabe" a actuar es el odio a Israel.
Por casi una generacion, los sucesivos gobiernos americanos han basado sus politicas medio-orientales en la sabiduria colectiva de gente de la talla de Ross, Hadley, Berger, Indyk, George Mitchell, Dan Kurtzer, y Tony Blair. Y por casi una generacion, estos hombres sabios han argumentado que la reforma, democracia, derechos humanos, derechos de las mujeres, derechos de las minorias, libertad de culto, desarrollo economico e imperio del derecho arabes pueden solo ser encarados despues que sea firmado un tratado de paz entre Israel y los palestinos. En su opinion "experta", los autocratas arabes y sus sujetos oprimidos por igual estan tan molestos por la dificil situacion de los palestinos que ellos no pueden ser molestados con sus propias vidas.
La revolucion de Tunez expone esta "sabiduria" como un completo y absoluto disparate. Como la gente en todas partes, lo que mas interesa a los arabes es su propio nivel de vida, su relativa libertad o falta de ella, y sus proyectos para el futuro.
Mohammed Bouazizi, el graduado universitario tunecino de 26 años que se encendio fuego a si mismo el mes pasado luego que fuerzas de seguridad del regimen destruyeron su carreta de productos sin licencia no actuo como lo hizo debido a Israel.
El egipcio que se encendio fuego a si mismo en Cairo el lunes fuera del parlamento egipcio, y el argelino que se encendio fuego a si mismo en Tebessa el domingo, no eligieron auto-inmolarse en la plaza publica debido a su preocupacion por los palestinos. Asi tambien, los manifestantes contra el regimen en Jordania no estan manifestando debido a que no hay estado palestino al occidente del rio Jordan.
La revolucion tunecina demuestra que la "unidad arabe" y el compromiso con los "derechos palestinos", es poco mas que un premio consuelo para los "expertos" occidentales.
La preocupacion principal de los dictadores arabes no es Israel, sino la prolongacion de su control del poder. Desde su perspectiva, una de las claves para mantener su ferreo control del poder es neutralizar el apoyo americano para la libertad.
Argumentando que Israel es la causa raiz de todas las patologias arabes, los despotas arabes ponen a EEUU a la defensiva. Teniendo que defender su apoyo por los odiados judios, EEUU se siente menos comodo criticando a los dictadores por su represion a su propio pueblo. Y sin los americanos respirando en sus nucas, los dictadores arabes pueden dormir mas o menos facilmente. Dado que a Europa no le importa que ellos obstaculicen los derechos humanos, solo EEUU constituye una amenaza para la legitimidad de la represion con puño de hierro de su pueblo por parte de estos autocratas arabes.
Y esto nos trae a la segunda base falaz del analisis "experto" occidental del Medio Oriente destruida por los recientes acontecimientos en Tunez. Esa base es la creencia que es posible y deseable construir una estructura de alianza estable sobre la espalda de las dictaduras.
La revolucion de Tunez expuso dos verdades basicas sobre las relaciones con las dictaduras. Primero, ellas no pueden perdurar mas que el regimen. Como los dictadores no representan a nadie mas que a si mismos, cuando el dictador deja la escena, nadie se sentira obligado por sus decisiones.
La segunda verdad fundamental expuesta por el derrocamiento de Ben Ali es que todo poder es efimero. El dia de Ben Ali llego el pasado viernes. El dia de sus hermanos despotas arabes tambien llegara. Y cuando ellos sean derrocados, sus alianzas seran derrocadas con ellos. En gran medida, el fracaso de la administracion Obama para entender la inestabilidad cronica de las dictaduras explica su obsesion con apaciguar al dictador sirio Bashar Assad. Debido a que EEUU asume erroneamente que el regimen de Assad es inherentemente estable, malinterpreta la logica de Assad de preferir a Iran y Hizbullah por sobre los EEUU.
Assad es miembro de la comunidad minoritaria alawita. El teme a su pueblo no solo debido a que los oprime a traves del estado de terror, sino debido a que dada su identidad alawita, la mayoria de los sirios no lo ven como uno de ellos.
Como dictadores y asesinos ellos mismos, los ayatollahs de Iran y cabecillas terroristas de Hizbullah apoyan al regimen de Assad en una forma en que EEUU nunca pudo, aun si lo hubiera deseado. De hecho, como Assad ve las cosas, dada la naturaleza de su regimen, no hay posibilidades que una alianza con EEUU haga nada mas que debilitar el control ferreo del poder por parte de su regimen.
Los intentos americanos por establecer relaciones con Assad dicen a este dictador dos cosas aparentemente contradictorias al mismo tiempo. En primer lugar ellos le señalan que su alianza con Iran y Hizbullah fortalece su estatura regional. Sin aquellas alianzas, EEUU no estaria interesado en apaciguarlo.
En segundo lugar, debido a la inestabilidad cronica de su tiranico estado terrorista, y su posterior miedo absoluto a la democracia, Assad ve los intentos americanos por atraerlo hacia la alianza occidental como intentos por derrocar a su regimen. Cuanto mas gente como Obama y Clinton intentan atraerlo, mas convencido estara que ellos estan en liga con Israel para derribarlo.
FRENTE A ELLO, la revolucion tunecina reivindica la politica del ex presidente George W. Bush de presionar por la democratizacion del mundo arabe. Como Bush reconocio luego de los ataques del 11/S, EEUU esta pobremente servido confiando en dictadores que mantienen su poder sobre las espaldas de su pueblo.
Bush no obstante se metio en problemas al ver una linea recta entre el problema y su solucion elegida de elecciones. Como la victoria de Hamas en la Autoridad Palestina y las victorias de la Hermandad Musulmana en las elecciones parlamentarias de Egipto por un lado, y el socavamiento de gobiernos pro-occidentales electos democraticamente en Libano, Afganistan e Irak han dejado en claro por el otro lado, las elecciones no son la solucion al autoritarismo.
La revolucion tunecina deja muchas lecciones para los politicos americanos. En primer lugar, recordandonos de la inherente fragilidad de las alianzas con las dictaduras, Tunez demuestra el imperativo estrategico de una Israel fuerte. Como la unica democracia estable en la region, Israel es el unico aliado confiable de EEUU en el Medio Oriente. Una Israel fuerte y segura es la unica garante permanente de los intereses estrategicos americanos en el Medio Oriente.
En segundo lugar, EEUU debe proceder con gran precaucion cuando considera sus vinculos con el mundo arabe. Todas las apuestas deben ser cubiertas. Esto significa que EEUU debe mantener vinculos cercanos con tantos regimenes como sea posible para que ninguno sea visto como irremplazable.
Arabia Saudita tiene que ser equilibrada con Irak, y apoyar un nuevo regimen en Iran. El apoyo por Egipto tiene que ser equilibrado con relaciones cercanas con Sudan del Sur, y otros estados norafricanos.
En cuanto a engendrar alternativas democraticas, EEUU debe asegurar que no hace ninguna promesa que no tiene intenciones de mantener. La actual tragedia en Libano es un golpe para el prestigio americano porque Washington rompio su promesa de posicionarse por el movimiento 14 de marzo contra Hizbullah.
Al mismo tiempo, EEUU debe financiar y apoyar publicamente a los movimientos democraticos liberales cuando surgen. Debe tambien financiar menos a los movimientos democraticos liberales cuando ellos emergen. Asi tambien, dada la fuerza de los medios islamistas, EEUU debe hacer uso juicioso de sus medios noticiosos en idioma arabe para vender su propio mensaje de democracia liberal al mundo arabe.
La revolucion tunecina es un acontecimiento extraordinario. Y como otros acontecimientos extraordinarios, sus repercusiones estan siendo sentidas mucho mas alla de sus fronteras. Desafortunadamente, el comportamiento de la administracion Obama señala que no esta dispuesta a reconocer la importancia de lo que esta sucediendo.
Si el gobierno de Obama persiste en ignorar las verdades fundamentales expuestas por el derrocamiento popular del dictador de Tunez, no marginalizara simplemente al poder americano en el Medio Oriente. Pondra en peligro los intereses americanos en el Medio Oriente.


Fuente: The Jerusalem Post- Este articulo fue traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba.

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