El presidente de la Knesset (Parlamento israelí), Reuven Rivlin (foto), instó hoy, jueves, al embajador chino, Gao Yanping, a que su país apoye sanciones más estrictas contra Irán tras el informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica que la acusa de desarrollar armas atómicas.
El funcionario reconoció que China había pedido tiempo para revisar ese reporte, pero señaló que “el intento de ganar tiempo cuando no lo hay es engañoso” y advirtió del peligro que conlleva la posesión de armamento nuclear en manos “fundamentalistas”.
Rivlin agregó que “China se acercó a la condición de superpotencia”, razón por la cual “si se une al movimiento para sancionar a Irán, ello se hará efectivo”.
“China es una nación muy responsable y nuestra posición respecto de Irán es bien conocida: estamos en contra del armamento nuclear”, le respondió Gao.
“Estamos investigando a fondo el informe de la AIEA, tomaremos en cuenta sus conclusiones y luego tomaremos una decisión”, añadió.
Por su parte, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hong Lei, recordó que su país siempre sostuvo que “el diálogo y la cooperación son el camino correcto para resolver la cuestión nuclear de Irán” y que “las sanciones no pueden resolverla fundamentalmente”.
De todos modos, Beijing siempre expresó lo mismo y finalmente votó a favor de las resoluciones del Consejo de Seguridad de imponer sanciones a Teherán.
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