Muy cerca de casa. Esa fue la razon dada por el editor publico del The New York Times para su afirmacion que el jefe de la oficina Jerusalem del Times debe ser reasignado debido a que su hijo decidio unirse a las Fuerzas de Defensa de Israel.
Esto esta cerca de casa para nosotros tambien. Despues de todo, esta disputa golpea el corazon de un principio central del periodismo moderno, que como profesionales nosotros debemos apuntar a evitar no solo los conflictos de interes, sino la aparicion de tales conflictos, para mantener la credibilidad ante los ojos de los lectores. Seguramente el editor publico Clark Hoyt, quiso sostener esa norma cuando recomendo una transferencia para Ethan Bronner. Bendito el The New York Times por sus reglas severas, pero afirmar que Bronner no puede ahora hacer su trabajo es ir muy lejos.
Informar desde el centro de una historia apasionadamente disputada para la mas respetada organizacion de noticias del mundo es un trabajo solo para alguien extremadamente talentoso y ferozmente independiente, y Bronner, para todos los efectos, es ambas cosas. Incluso Hoyt elogio su "excelente expediente."
Y esa es la medida para juzgar a un periodista: su trabajo. Como el editor del Times Bill Keller dijo en su bien recibida defensa de Bronner: "Todo periodista trae a la historia una vida- una historia, relaciones, ideas, creencias." Imaginar lo contrario es imaginar el periodismo hecho por robots. El periodismo depurado limpio de todas las tendencias es imposible; juicios son hechos a cada paso del camino que reflejan creencias sobre quienes y que son noticias valiosas, y por que, y los mejores periodistas permiten que su humanidad forme su trabajo. Ellos tambien estan disciplinados para reconocer aquellas tendencias y mantenerlas bajo control.
Eso puede ser dificil de hacer por cuenta propia, y esto es donde el tipo del periodismo al cual el Times aspira- el tipo que nosotros aspiramos en Forward tambien- se eleva de la escritura y opinion comun. Esta la obligacion de verificar los hechos y declaraciones, y observar los diferentes lados de una historia. Hay guardabarreras, preguntas desde adentro, normas aceptadas a seguir, y muchos pasos entre la hora en que un periodista apreta el boton de enviar yla hora en que un articulo es publicado. Y, una vez que el articulo es publicado en la prensa u online, los periodistas pueden ser responsabilizados. Cuando lo hacemos mal, como pasara, ustedes pueden decirnoslo. Ustedes tienen nuestra direccion.
Imaginar que el trabajo de Bronner estaria comprometido fatalmente por el servicio militar de su hijo es tambien no entender a la sociedad israeli. A diferencia de este pais, donde nosotros dudamos que muchos miembros de los principales medios tengan hijos o hijas en servicio en Irak o Afganistan, Tzahal es precisamente casi ubicuo. Si no es tu hijo, es el del vecino. Para mejor o para peor- y es ambos- la conexion con el ejercito no es un concepto abstracto, es una parte rutinaria de la vida.
Despues de cubrir el conflicto israeli-palestino por 27 años, Bronner ha sido puesto a prueba. Si el ha tenido prejuicios acerca del ejercito y ellos iban a infectar su trabajo, eso hubiese sucedido mucho tiempo atras.
Algunos lectores nunca se convenceran, y para ellos, la apariencia de conflicto es todo. Pero como Keller destaco correctamente, a aquellos lectores no puede permitirseles dictar lo que el resto de nosotros necesita. Y nosotros necesitamos informacion mas honesta y minuciosa del Medio Oriente, no menos. Dejemos que el trabajo hable por si mismo.
Fuente: Forward
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