El Primer Ministro turco Recep Tayyip Erdogan el domingo continuo su ataque verbal sobre Israel, de acuerdo al periodico saudita Al Wattan, que lo cito diciendo que la mezquita al Aksa, la Cueva de los Patriarcas y la Tumba de Rajel "no fueron ni nunca seran sitios judios, sino sitios islamicos."
Erdogan se refería a la reciente inclusión de Israel de la Cueva de los Patriarcas y la Tumba de Raquel en su lista de patrimonio nacional, pero no estaba claro por qué se menciona la Mezquita de Al Aksa, ya que el sitio no fue incluido.
En declaraciones a los periodistas palestinos, Erdogan habría dicho, "Palestina [estuvo] siempre en la parte superior de las prioridades de Turquía". Expresó su apoyo a la reanudación de las conversaciones indirectas entre Israel y los palestinos. Vestido con un manto de identidad pan-islámico, Erdogan le dijo a Al Wattan que "amo a mis hermanos en Al Fatah y Hamas, en la misma medida, porque son mis hermanos musulmanes y no puedo distinguir entre ellos."
Primer ministro de Turquía comenzó a criticar a Israel a raíz de la operación Plomo Fundido del año pasado, y ha sido puntual en expresar su opinión sobre las acciones de Israel desde entonces. En el pasado reciente, criticó duramente a Israel durante las conferencias de prensa con el primer ministro libanés y con el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad.
Turquia tambien recientemente se distancio de los Estados Unidos, retirando al embajador en Washington después que un comité del Congreso decidió reconocer la matanza de armenios durante la Primera Guerra Mundial como un genocidio. En un indicio de las tensiones entre Israel y Turquía, Ankara no buscó la ayuda de los lobbies judíos en Washington, y estos grupos, que tradicionalmente han defendido a Turquía, se abstuvieron en esta ocasión de presionar al Congreso de no aceptar la resolución.
Fuente: The Jerusalem Post
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