Justo antes de la ceremonia de Premios de la Academia, una figura en los medios israelies dijo que el estaba preocupado porque a la luz de las declaraciones de Scandar Copti, uno de los co-directores de Ajami, la nominada israeli para Mejor Pelicula en Idioma Extranjero, Copti probablemente iba a subir al escenario y dar un discurso que seria insultante y avergonzante para Israel.
"Ese debe ser nuestro gran problema", le dije. "Que una pelicula israeli gane un Oscar y el director diga algo vergonzoso."
Como resulta, ese no fue nuestro gran problema. Ajami no gano el Oscar, el que en cambio fue para El Secret de Sus Ojos, una pelicula argentina de Juan Jose Campanella. Israel nunca ha ganado un Oscar por Mejor Pelicula Extranjera, a pesar de ser nominada nueve veces (incluyendo tres veces en muchos años).
Cada vez que Israel no gana este premio, los israelies me preguntan al dia siguiente, "Por que no gano? Es antisemitismo?" Y un dia, cuando Israel gane (y finalmente lo hara), el director (o directores) subira y dira algo que avergonzara y molestara a algunos israelies. Esa es una prediccion del Oscar. Yo apostare por ella.
Pero que podemos hace4r con la controversia de este año, la que estropeo la imagen de una Israel unificada que muchos aqui esperaban que Ajami promoveria, ya que fue co-dirigida por Copti, un arabe-israeli cristiano de Jaffa, y Yaron Shani, un israeli judio de Haifa? Las tensiones se han estado montando el mes pasado, ya que dos de los hermanos de Copti (entre otros) fueron arrestados en Jaffa bajo lo que ellos dicen eran acusaciones injustas, y entonces sometidos a brutalidad policial. El dia antes de los Oscars, los residentes de Jaffa llevaron a cabo una manifestacion para protestar por la conducta policial, la cual recibio mas publicidad que cualquier manifestacion similar en los ultimos tiempos. Pero lo que puso a algunos israelies particularmente aprensivos fueron las declaraciones hechas por Scandar Copti mientras promovia la pelicula antes de la ceremonia del Oscar en Los Angeles, por sobre todo esta: “Ustedes tienen un director israeli y un director palestino; ustedes tienen actores israelies y actores palestinos. La pelicula representa a Israel, pero yo no; yo no puedo representar a un pais que no me representa."
El co-director Yaron Shani contrarresto esa declaracion diciendo que Ajami “es una pelicula israeli, tiene lugar en Israel, habla israeli, trata con los problemas en Israel.”
QUE LA pelicula recibio una importante porcion de su presupuesto del Fondo de Israel para Peliculas, un fondo gubernamental, el que ha estado promoviendo Ajami por meses en su Website y otras partes, nunca ha estado en discusion. Copti esta ciertamente en lo correcto al decir que la pelicula representa a Israel. Y aunque el puede sentir que no lo representa a el, de hecho, lo hace. Representa la desastrosa realidad de su vida en un pais complicado, donde muchos grupos son arrojados juntos en un area geograficamente pequeña. Hay conflictos entre todos los grupos, y dentro de todos los grupos: Entre judios y arabes, arabes musulmanes y arabes cristianos, arabes israelies y palestinos de Cisjordania, palestinos de Cisjordania y beduinos – y entre todos estos grupos y representantes del gobierno israeli (y otras autoridades, tanto formales como informales), incluyendo, y a menudo, la policia.
Estos conflictos son el tema de la pelicula Ajami, hecha con dinero de un gobierno al que Copti no siente que representa. Yo puedo simpatizar con su enojo por el tratamiento a su familia y amigos, pero el hizo una eleccion y no puede ser deshecha. No puede ser limpio tomar dinero de un gobierno y sucio reconocer lo que el dinero ha comprado. El exito de la pelicula ha llegado con un gran tema de atencion sobre el vecindario Ajami. Los publicos alrededor del mundo (incluyendo los votantes del Oscar y el jurado del Festival de Cines de Cannes, que galardono a Ajami con una Mencion Especial en la primavera pasada) se han vuelto concientes del vecindario y su compleja realidad con los años, pero debido a la pelicula, este se volvio noticias de primera plana. Es dificil no ver eso como una victoria de genero. Copti puede estar perdiendo una oportunidad para criticar a su propio gobierno desde la perspectiva de un ciudadano que representa a una minoria aqui. Le guste o no la forma en que se siente, el ha hecho su pelicula y a traves de ella, su voz es escuchada. Cuando se expresa, la gente escucha, como el recien se ha dado cuenta, si es que no se dio cuenta antes. Y ellos lo escuchan porque el es un israeli y ellos se preocupan por lo que quien representa a Israel tiene para decir.
Nosotros no hemos escuchado lo ultimo de Copti ni de Shani, quienes estan recien comenzando sus carreras. En terminos de los Oscars, esperemos tener mejor suerte el año proximo. Y, para el expediente, la pelicula argentina ganadora es excelente. La perdida de Ajami ciertamente no tiene nada que ver con antisemitismo o un sentimiento anti-israeli. Los votantes simplemente prefirieron una pelicula diferente. Es el negocio del espectaculo.
Fuente: The Jerusalem Post
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