HAZLO LIVNI, `POR EL BIEN DE ISRAEL

Por Michael Bar-Zohar

23/12/10

En Febrero de 1955 una delegacion de líderes políticos encabezada por Golda Meir viajó al kibbutz Sde Boker en el Negev. Entraron a la cabaña de David Ben-Gurion, quien había renunciado a todos sus cargos oficiales un año antes. Se le informó que el ministro de defensa Pinhas Lavon se había visto obligado a renunciar y pidió que Ben-Gurion lo reemplazara en el gobierno del ex Primer Ministro Moshe Sharett.
Pero a Ben-Gurion no le gustaba Sharett y se oponía a su política. En condiciones normales nunca habría aceptado servir bajo Sharett. Pero estas no eran condiciones normales. Israel se estaba enfrentando a un peligro inminente de ser atacada por las naciones árabes que tenían sed de venganza tras su derrota en la Guerra de la Independencia. "Fui superado", registra Ben-Gurion en su diario, "defensa y ejército preceden todo." Y asi, por el bien de Israel, Ben-Gurion mordió la bala y se unió al gobierno de Sharett.
En mayo de 1967, el presidente Gamal Abdel Nasser de Egipto desplegó sus armas en el Sinaí, expulsó a las fuerzas de paz de las Naciones Unidas, cerró el Estrecho de Tirán, firmó alianzas militares con Siria y Jordania, y amenazó con aniquilar a Israel. El Teniente General (reserva) Moshe Dayan se propuso como voluntario para servir en el ejército como jefe del Comando Sur bajo el Jefe del Estado Mayor teniente general Yitzhak Rabin, a quien Dayan no admiba, por decir lo menos. Dayan se informa que dijo a su amigo más cercano, el ex jefe del Mossad, Meir Amit, que estaba dispuesto a enrolarse "incluso como soldado raso." El país estaba en una situación difícil y por eso, por el bien de Israel, Dayan estaba dispuesto a adoptar cualquier posición de combate. (Días más tarde, Dayan fue nombrado ministro de Defensa.)
En 1988, cuando el líder del Likud Itzjak Shamir pidió al Partido Avoda unirse a su gobierno, muchos activistas de Avoda se rebelaron en una tumultuosa reunión del comité central del partido. Ellos describieron el movimiento propuesto como un suicidio político y una traición de la visión y principios de Avoda. Sin embargo, los líderes del partido, Shimon Peres y Yitzhak Rabin, no fueron persuadidos. "La situación es seria", dijo Rabin. "No tengo un país a salvo. Hay que unirse al gobierno." Y ellos se unieron; en contra de sus intereses políticos, pero por el bien de Israel.
Hoy Israel se enfrenta a crisis mas graves. Irán se está convirtiendo en una potencia nuclear, mientras que un mundo impotente observa o aplica sanciones ineficaces. El espectro de un frente islámico que puede incluir a Irán, Siria, Turquía, Yemen, Hamas , Hezbolá e incluso Irak y Jordania, se cierne sobre el horizonte. El proceso de deslegitimación de Israel, iniciado por los palestinos y con el apoyo de un número creciente de estados europeos, está ganando fuerza. EEUU está volviendo un hombro frío hacia el estado judío. Y el proceso de paz está bloqueado.
En tal situación, cualquier líder israelí que se preocupa por su país apoyaría la creación de un gobierno de unidad nacional. Lamentablemente, esta no es la opinión de la líder de la oposición,Tzipi Livni. Parece que Livni está preocupada principalmente por derrocar al gabinete del primer ministro Benjamín Netanyahu. Hay frecuentes reuniones en las que Netanyahu, el presidente Peres, el ministro de Defensa, Ehud Barak, y muchos destacados líderes de Kadima tratan de convencer a Livni de formar parte del gabinete, pero ella sigue negándose. Inicialmente Livni afirmó que su negativa se debía a que Netanyahu no quiere aceptar una solución de dos estados. Y, en efecto, aun cuando el expresó su aceptación en el discurso de la universidad de Bar-Ilan en el 2009, Livni comentó cínicamente que Netanyahu podría haberlo dicho, pero que no lo decía en serio. Además, Livni también rechazó el congelamiento de los asentamientos planeado por Netanyahu como una "mano ligera de truco." Diez meses más tarde, ella criticó la expiración del "truco."
Livni reveló a sus amigos cercanos su temor que si ella se unía al gobierno se le daría un papel menor. Esto está muy lejos de gente de la talla de Moshe Dayan, quien estaba listo para ser un conductor de camión militar en mayo de 1967.
Israel necesita líderes que puedan elevarse por encima de mezquinas maniobras políticas y se identifiquen plenamente con la nación.
Necesitamos desesperadamente un gobierno más moderado, centrista. No podemos continuar con un gobierno que en repetidas ocasiones se rinda ante los colonos y la derecha religiosa. Un gobierno con el Likud, Kadima y Avoda como su columna vertebral será poderoso y sabio como para soportar las presiones de la extrema derecha, mientras que al mismo tiempo, rechazará algunas de las ideas más absurdas de la extrema izquierda.
Pero Livni no estará satisfecha con nada menos que la cabeza de Netanyahu en una bandeja. Su posición apesta a egolatría, a pesar que Kadima obtuvo más escaños en la Knesset, Livni no puede perdonar a Netanyahu por convertirse en primer ministro.
Pequeñas venganzas a un lado, que será de Israel? Livni asegura que no hay necesidad de preocuparse: Kadima ofrecerá una red de seguridad para el gobierno si este elige la dirección de la paz. Esto por supuesto es un sinsentido absoluto. Lo que Israel necesita hoy en día no es una red de seguridad. Necesita líderes audaces y morales en las más altas esferas del poder. No tengo ninguna duda que si Kadima fuese a unirse al gobierno, tendría una influencia decisiva en su política.
Livni se enfrenta con hacer algo que realmente no le gusta. Pero tal vez en su momento ella lo haga de todos modos. Si no por ella, entonces por el bien de Israel.

El escritor es un ex diputado del partido Avoda y biógrafo oficial de David Ben-Gurion y Shimon Peres.
Fuente: The Jerusalem Post- Este articulo fue traducido especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba.