y Jackson Diehl
Monday, December 6, 2010
El Ministro del Exterior Turco Ahmet Davutoglu sonrio jovialmente mientras el reiteraba: Si, el choque entre comandos israelies y activistas islamicos turcos fuera de la costa de la Franja de Gaza en mayor puede ser justamente comparado con los ataques de al-Qaida sobre New York y Washington.
"Fue el 11/S turco - lo repito!" exclamo durante una visita a Washington la semana pasada. "Yo no me refiero a numeros", agrego cuando se le señalo que 2900 personas murieron el 11 de septiembre y nueve en la lucha de la flotilla. "Yo estoy intentando expresar la conmocion psicologica en Turquia. Nuestros ciudadanos fueron asesinados por un ejercito extranjero."
Realmente, no fue tan simple. Los turcos no eran civiles inocentes sino militantes* que buscaban una confrontacion; ellos fueron muertos no por terroristas suicidas sino por soldados profesionales cuyas primeras armas fueron bastones y pistolas de pintura.
Entonces es un poco asombroso escuchar a Davutoglu hacer su punto principal: que no hay razon real para la discordia entre su gobierno y la administracion Obama. "Por mas de 20 meses nosotros tuvimos excelentes relaciones", dijo. "Y como aliados estrategicos nosotros tenemos que proteger aquellas relaciones."
Turquia es un miembro de la OTAN, un anfitrion de las bases militares americanas vitales para operaciones en Afganistan e Irak, y un importante comprador de armas americanas. Pero es realmente aun un aliado? Como algunos de los mas interesantes documentos Wikifiltrados del Departamento de Estado muestran, esa es una pregunta con la que dos administraciones americanas consecutivas han luchado. Durante ocho años de gobierno por parte del Partido Justicia y Desarrollo suavemente islamista, Turquia se ha convertido en algo asi como un modelo de las engañosas relacioens del siglo XXI que EEUU tendra que manejar.
Turquia solia ser un estado autoritario que se alineaba confiablemente con el Occidente. Ahora es una democracia con una economia pujante- y grandes ambiciones geopoliticas. El poder del apoyo popular ha dado al primer ministro de Turquia, Recep Tayyip Erdogan, la confianza para menoscabar la politica americana sobre Iran, cultivar vinculos con dictadores anti-americanos musulmanes en Sudan y Siria, y hacer de Israel un casi enemigo- todo mientras despliega tropas en Kabul y cuenta con los EEUU para ayudarlo a su ejercito a combatir a los insurgentes kurdos.
El Medio Oriente aun tiene gobernantes tales como Hosni Mubarak de Egipto, un caudillo taciturno que calladamente apoya los intereses estrategicos americanos pero se rehusa a modernizar su autocracia en pudricion. Erdogan ve eso como una oportunidad para volverse el traficante de influencias de la region. "Turquia, construyendo sobre la supuesta admiracion entre poblaciones del Medio Oriente por su exito economico y poder y voluntad para defender los intereses de la gente, llega por sobre los regimenes [no democraticos] a la 'calle arabe', explica un cable enviado por la Embajada americana en Ankara este año. Asi la retorica sobrecalentada sobre Israel, es entregada con calculo tanto como con pasion.
Davutoglu es algo asi como un antiheroe de los cables de WikiLeaks, descripto como "excepcionalmente peligroso" y "perdido en fantasias islamistas neo-otomanas." Habiendo llegado a Washington unas pocas horas despues que aquellas descripciones fueron publicadas, el acepto una disculpa de la Secretaria de Estado Hillary Rodham Clinton, resto importancia al daño - y adopto al menos parte del analisis de la Embajada. "Gran Bretaña tiene una mancomunidad" con sus ex colonias, me recordo. Por que Turquia no debe reconstruir su liderazgo en las ex tierras otomanas en los Balcanes, Medio Oriente y Asia Central?
Es fascinante seguir los cambios emocionales en el analisis americano de este socio rapidamente cambiante. Erdogan es acidamente descripto por el ex embajador Eric Edelman como teniendo "una linea autoritaria aislada"; el sucesor de Edelman, James F. Jeffrey, concluye que Erdogan "simplemente odia a Israel" y que su manejo para la autoridad regional "no ha logrado ningun exito de notar." Pero los envios tambien incluyen admiracion por las habilidades politicas de Erdogan y por el rol de Turquia en Libano, Pakistan e incluso Siria.
De hecho, como un posible lider de la "calle arabe", Erdogan parece mucho mas atractivo que competidores como Hassan Nasrallah de Hezbollah. Al final Turquia depende del comercio e inversion europeos; quiere un Irak democratico, un Iran no nuclear y el exito de la OTAN en Afganistan. Aun reconoce a Israel. Es, en esencia, una genuina democracia musulmana- lo cual significa que es tanto mas dificil como, en una forma, mas aliado que lo que solia ser.
"Al final del dia nosotros tendremos que vivir con un Turquia cuya poblacion esta propulsando mucho de lo que nosotros vemos", escribio Jeffrey en un envio penetrante. "Esto llama por un enfoque tema por tema y reconocimiento que Turquia a menudo seguira su propio camino." "La casta actual de lideres politicos", destaco el, tiene un "ansia especial por el drama y retorica destructivos. Pero nosotros no vemos nada mejor en el horizonte, y Turquia continuara siendo una mezcla complicada de instituciones de clase mundial, competencias y orientacion 'occidentales', y cultura y religion medio-orientales."
No es sorprendente que Davutoglu estuviera apretando los labios. Al final, el informe del Departamento de Estado habia capturado al nuevo Turquia bastante bien.
Fuente: The Washington Post- Este articulo fue traducido especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.