Ban Kee moon y la frustración palestina

El Secretario General de Naciones Unidas se identifica con los palestinos y llama a las partes a apurarse, negándose - por el momento- a la posibilidad del reconocimiento al estado palestino. “El tiempo no juega a nuestro favor. Nuestra prioridad debe enfocarse en la renovación del diálogo para solucionar todos los temas sensibles”, dijo Ban kee Moon. “Es una respuesta que los miembros de Naciones Unidas deben dar”, dijo al ser interpelado sobre el tema de la incorporación posible de Palestina a Naciones Unidas. Ban aclaró que no recibió, por ahora, ningún pedido y si lo recibe lo trasladará al Consejo de Seguridad. Al mediodía, el Canciller palestino, Ryad Al Malachi, anunció que los palestinos se dirigirán al Consejo de Seguridad a pesar de las amenazas de veto por parte de Estados Unidos, con el pedido de reconocimiento del estado palestino (y no a la Asamblea General de la ONU). El Primer Ministro, Biniamin Netanyahu, quien anunció que viajará y disertará en la Asamblea, la semana próxima, exactamente después de Abu Mazen dijo, en respuesta, que “Está convencido que eso no ocurrirá”. Según Netanyahu, los palestinos no cuentan con el poder de lograr lo más importante que piden, la membrecía plena en la ONU. “Hubo contactos, pasos y acciones a fin de asegurar que eso no ocurra”, destacó.
En conferencia de prensa en la sede de Naciones Unidas, en vías al debate que tendrá lugar la semana próxima en el marco de la Asamblea General, el Secretario expresó su preocupación por la ausencia de avances en la negociación de paz y definición de dos estados. Ban reiteró y declaró: “Pido a las partes que ingresen, de inmediato, a la negociación. Israel debe interrumpir los asentamientos. Los palestinos deben sentarse con los israelíes. Comparto el fracaso de los palestinos en relación a la definición de dos estados”.
Estados Unidos anunció oficialmente que no sólo votará contra el pedido palestino en la Asamblea General de Naciones Unidas, si es llevada para su aprobación ante el Consejo de Seguridad, sino que hará uso de su derecho a veto a fin de impedir su aprobación. A pesar de eso, los palestinos aclararon que tienen la intención de dirigirse al Consejo de Seguridad, dado que en la Asamblea General quizás les espera una mayoría aplastante pero, para ser aceptados como miembros plenos en el organismo internacional, deben obtener también la aprobación del Consejo.
En la Asamblea General hay una voz equitativa para cada miembro del organismo, siendo 193 su número. En la Asamblea cuentan con una gran mayoría los países árabes e islámicos y los países del Tercer Mundo y por eso los palestinos no tendrán dificultad en obtener el reconocimiento. El sentido de las decisiones de la Asamblea General son, en principio, meramente declarativas. Si también el Consejo de Seguridad -órgano ejecutivo de Naciones Unidas.- aprueba el pedido palestino de reconocimiento del estado, eso tendrá algunas derivaciones militares y legales de largo alcance, dado que Israel será considerado un país ocupante de otro país y será posible ejecutar sanciones en su contra. De todos modos, Estados Unidos frustraría, como se dijo, ese reconocimiento.
Israel y Estados Unidos ven en el pedido palestino de reconocimiento en la ONU, que llega en el marco del congelamiento del proceso de paz, una extralimitación de los pasados acuerdos de Oslo, según los cuales un estado palestino se levantará y obtendrá el reconocimiento solo como consecuencia de la negociación y el acuerdo entre Israel y los palestinos. En los últimos meses, en Israel se llevan a cabo enormes esfuerzos en el intento por conseguir por lo menos una “mayoría moral” en la Asamblea del organismo. La intención consiste en sumar el apoyo de los países importantes de occidente como Gran Bretaña, Francia, España e Italia. En Jerusalén esperan llegar a los 30 oponentes, lo que afectará en opinión de fuentes políticas, la legitimidad y el prestigio del paso palestino.