NO ESPEREN PROGRESOS DE LAS CONVERSACIONES CON SIRIA‏

LA NOCION que el dictador sirio Bashar al-Assad puede de alguna manera ser cambiado de su alianza con Iran y patrocinio del terrorismo es una de las mas duras del Medio Oriente. Ninguna cantidad de fallidas iniciativas diplomaticas, o escandalos por parte del Sr. Assad, parecen disminuir su lustre. El ultimo intento para probarlo viene de la administracion Obama, la que esta semana nomino al primer embajador americano para Damasco desde 2005 y envio al alto funcionario del Departamento de Estado, William J. Burns, para reunierse con el Sr.Assad. "Yo no tengo ilusiones," dijo despues el Sr. Burns, "pero mi reunion . . . me esperanzo en que nosotros podemos hacer progresos juntos."

Nosotros no estamos en desacuerdo con la seleccion por parte de la administracion de un embajador o la visita del Sr. Burns; ambas representan modesto cumplimiento sobre la promesa de campaña del Presidente Obama de "compromiso directo" con regimenes tales como Siria. Pero vale la pena destacar que el Sr. Burns ha hecho esto antes: El se reunio con el Sr. Assad en 2004 en nombre de la administracion Bush. Anteriormente, el Secretario de Estado Colin L.Powell "se comprometio" con el Sr. Assad. Asi lo hizo la presidente del Senado Nancy Pelosi, el Presidente del Comite de Relaciones Exteriores del Senado, John F. Kerry, y numerosos notables europeos, incluyendo al presidente frances Nicolas Sarkozy. Cuando el fue primer ministro israeli, Ehud Olmert negocio extensamente con el Sr. Assad a traves de intermediarios turcos.
Ni un poco han llegado a mas que esperanzas, en principio. La Sra. Pelosi memorablemente declaro que "el camino a Damasco es un camino de paz." Pero ninguno tan lejos ha producido ni el mas minimo cambio en el comportamiento del Sr. Assad o en sus inaceptables ambiciones. Habiendo llevado a cabo una campaña de asesinato politico en Libano, incluyendo el asesinato del primer ministro por lo cual el debe aun ser responsabilizado, el Sr. Assad continua insistiendo en un veto sobre el gobierno libanes. El continua facilitando embarques ilegales masivos de armas iranies a Hezbollah, estableciendo peligrosamente el escenario para otra guerra con Israel, y continua albergando a los elementos mas linea dura del liderazgo de Hamas. El continua albergando a los lideres exiliados del regimen de Saddam Hussein y permitiendo que atacantes suicidas fluyan hacia adentro de Irak para ser utilizados por al-Qaeda.
El Sr. Assad quiere que los EEUU levanten las sanciones; el quiere que la Union Europea conceda a Siria privilegios comerciales; el quiere que Israel se retire de las Alturas del Golan y conceda a Siria la costa oriental del Mar de Galilea; y el quiere que el cotrol de la soberania libanesa por parte de Siria sea aceptado. A cambio de todo esto, el esta ofreciendo -- bueno, no mucho, como siempre resulta. El dijo a un grupo de visitantes occidentales que el no romperia mas con Iran que lo que los EEUU romperian con Israel. El dice que el patrocinio sirio de Hezbollah no esta sobre la mesa de negociacion. El ha prometido controlar a los atacantes suicidas destinados para Irak, pero nunca lo ha hecho.
El ejercicio de conversar con el Sr. Assad sirve a un proposito cierto, ya que permite a un diplomatico habilidoso tal como el Sr.Burns diseñar los incentivos de la administracion para cambios de comportamiento tanto como sus lineas rojas, y podria poner nerviosos a los paranoicos lideres de Iran. Pero cualquiera que piense que la administracion Obama ha llegado a una forma para cambiar el Medio Oriente a traves de la distension con Siria haria bien en estudiar la historia de la decada en el poder del Sr. Assad. Ese gambito ha sido intentado, por mas diplomaticos y politicos occidentales de los que pueden ser contados, y los resultados son claros: No funciona.
Fuente: The Washington Post