OTRA PUNTADA: PREPARAR EL TERRENO PARA EL ASESINATO‏

Sara Honig

Albricias- la noticia aparentemente inspiradora es que nuestro procurador general ha hecho hace tiempo un movimiento formal contra un libelo de ramificaciones particularmente monstruosas. Hablemos de muy poco y muy tarde! Le llevo un largo tiempo, y Menahem Mazuz ha dirigido el reticente gesto literalmente solo dias antes que termine su mandato de seis años.
Fue por medio de un premio consuelo que el decidio apoyar una apelacion ante la Corte Suprema de soldados combatientes y familias dolientes contra el director arabe-israeli Muhammad Bakri por su difamatoria pelicula de 2002 Jenin, Jenin. La atencion anunciada de Mazuz de asistir a la audiencia tuvo por objetivo endulzar la pildora de su rechazo a enjuiciar a Bakri por difamacion, como sugirio que el debia hacer la Corte de Distrito de la Region Central en 2008.
Para aquellos que no recuerdan, aqui hay un breve resumen: Directamente despues de la masacre del Seder de Pesaj en 2002 en el Hotel Park de Netanya, Tzahal lanzo la Operacion Escudo Defensivo, que engendro terribles falsedades acerca de crimenes de guerra por parte de los soldados en Jenin. El pseudo-documental de Bakri fue instrumental en propagar estas falsedades. Despues que nuestra siempre solicita Corte Suprema permitio unanimemente las proyecciones locales de la creacion de Bakri en 2003, los soldados y familias de soldados caidos lo demandaron por difamacion. La corte de distrito acepto que Jenin, Jenin era difamatoria, pero argumento que el estado, no los individuos, deben tomar acciones legales. Mazuz rechaza procesarlo en nombre del estado, aunque el magnanimamente ofrecio ponerse de lado de los demandantes en su apelacion contra el fallo de la corte mas baja.
El resultado es que los soldados agraviados, que pusieron sus vidas en la linea por todos nosotros- junto con los familiares de aquellos soldados que de hecho dieron sus vidas en Jenin- son convertidos en verdaderas pelotas de futbol. El juez de distrito y Mazuz concuerdan en que Jenin, Jenin no es mas que una calumnia. Pero mientras el primero insiste en que no es un tema de agravios privados, el segundo sostiente que puede solo ser litigado como una demanda privada. Y asi la pelota es pateada de regreso a la misma Corte Suprema que ya ha sancionado el horror judicial, a pesar de destacar tambien que es un paquete de mentiras. Con toda probabilidad, entonces, Bakri no tiene nada que temer de nuestros abanderados de la justicia. Como H.L. Mencken destaco hace mucho: "El problema con luchar por la libertad humana es que uno pasa la mayoria del tiempo defendiendo sinvergüenzas." Para desentrañar la ridiculez de la situacion, imaginen un documental producido localmente que iguala a los judios con ratas inmundas escurriendose de sumideros para difundir la enfermedad, infectar sus alrededores y dominar al mundo. Uno podria posiblemente esperar que el publico israeli, salvo por excepcionales post-sionistas de avanzada, estaria escandalizado. Es seguro asumir que la Junta de Cine de Israel objetaria esta proyeccion. Es una apuesta segura que el productor buscaria ayuda de la Corte Suprema del estado judio. Lamentablemente, es tambien una profunda certeza que los mas altos escalones de la jurisprudencia israeli ayudarian obligatoriamente en el santo nombre de la libertad de expresion- como lo hicieron con Bakri y su calumnia cinematografica en el año 2003. NO, BAKRI no produjo El Judio Eterno- aludido mas arriba. Esa injuriosa contaminacion en celuloide fue el proyecto personal de Josef Goebbels en la Alemania de 1940. Pero si el ofrecimiento de Goebbels estuviese en la cartelera de hoy, nuestro sistema judicial sin lugar a dudas no se hubiese parado en su camino. Hubiese explicado que depede de nosotros espectadores hacer nuestras elecciones. En el mejor de los mundos, debe ser asi. Pero dadas las imperfecciones de nuestra existencia, Goebbels dedujo apropiadamente que "la esencia de la propaganda consiste en ganar a la gente para una idea y tan sinceramente, tan vitalmente, que al final ellos sucumban a ella finalmente y nunca puedan escapar." Bakri es un discipulo dedicado del maestro lavacabezas del Tercer Reich. En su documentacion intencionada de la masacre que nunca fue, Bakri emplea las tecnicas de su mentor Nazi, como yuxtaponer clips desconectados. El se entrelaza en disparos de tanques de Tzahal en movimiento. En el encuadre siguiente muchos ciudadanos yacen inmoviles en el mismo camino. Ellos parecen muertos, ferozmente atropellados. Es como un escenario engañoso preparado como los bichos sueltos de Goebbels. No menos repulsivo. No menos efectivo. Bakri transporto las proverbiales ratas del nazismo a Jenin. Publicos despistados probablemente no ponderaran si la ausencia de evidencia fisica pone en cuestion las afirmaciones de Bakri que un hospital fue bombardeado deliberadamente o chicos fueron ejecutados sin piedad. De hecho, estas son quimeras de la difamatoria imaginacion de Bakri, en la peor tradicion de Goebbels. TODO ESO fue irrelevante para nuestros estimados jueces de la Corte Suprema mas de seis años atras, y es improbable que conmueva al panel de la Corte Suprema hoy. Una cantidad de sinsentido legalista explicara por que calumniar debe ser tolerado, y por que depende de los espectadores deducir la verdad, aun si la verdad no es mas agradable en su medio relativista. Aunque los jueces primero fueron quisquillosos acerca de Jenin Jenin, otro "documental" castigando a Israel ampliamente aclamado, Ford Transit, dirigido por Hany Abu-Assad, nacido en Nazareth, gano el premio "Espiritu de Libertad" del Festival de Cine de Jerusalem y premios de los festivales American Sundance, Hotdocs de Canada y el holandes IDFA. Sin dudas su demonizante retrato de la villania israeli en los controles de caminos militares es probablemente lo que lo hizo tan de rigor. Ni los premios ni los elogios fueron retirados cuando surgio que el conductor aparentemente genuino, cuya sordida historia de maltrato a manos judias constituye el tema central, era un actor contratado para interpretar un guion escrito. La escena en la cual el es golpeado brutalmente por un soldado fue llevada a cabo bajo las meticulosas instrucciones del director. Esto fue no obstante comercializado como un documental y, como en el caso de Bakri, los espectadores no iban probablemente a investigar- no mas que lo que los cinefilos de Goebbels estaban dispuestos a probar la analogia roedor-judio. Eso es lo que hace a las maliciosas producciones de odio tan peligrosas y herramientas tan ideales tanto para los nazis de ayer como para sus fanaticos portadores de antorcha en Medio Oriente. Eso es lo que hace la complicidad de aquellos que condonan tal fraude de lo mas alarmante.
EL DIRECTOR YIGAL Burstein sugirio años atras que el tema contundente no es la veracidad sino "solo si la pelicula funciona y lleva publico." Goebbels concordaria de todo corazon. Tambien Bakri. La terrible vergüenza es que nuestra Corte Suprema- evidentemente incapaz de dejar pasar cualquier oportunidad para tirar a mansalva a la auto-preservacion, sentido comun y los restos andrajosos de la confianza publica en su juicio- sostiene el derecho a diseminar la vilificacion malevolente, amplificar la enemistad y justificar el terrorismo e invitar al derramamiento de sangre.
Quizas Mencken fue razonable para comentar que "un juez es un estudiante de derecho que puntua sus propias hojas de examen." Tales "estudiantes" merecen una muestra privada de El Judio Eterno, la que concluye con la prediccion escalofriante del Fuehrer para el Reichstag que "si los judios tuvieran exito una vez mas en comenzar una guerra mundial, sera el fin de la juderia mundial."
Ese fue el proposito inflamatorio del odioso film patrocinado por Goebbels - preparar el terreno para el asesinato masivo convenciendo a la opinion internacional y a los potenciales perpetradores que los judios atraen sobre si mismos los mas radicales de los castigos.
Ese era el punto de Goebbels, y de Abu-Asad, y de Bakri.
Fuente: The Jerusalem Post