EL ESPLENDOR DE LOS CAMONDO

Ascenso y Caida de una Familia Francesa Sefaradi


By Benjamin Ivry
Publicado el 11 de enero de 2010, revista del 22 de enero de 2010

El destino de la familia Camondo ilustra precisamente cuan peligroso puede ser el ser generoso con el pueblo de Francia. Una exhibicion ejemplar, El Esplendor de la Casa de Camondo: De Constantinopla a Paris, 1806–1845, la cual abrio el 6 de noviembre de 2009, el el Musée d’art et d’histoire du Judaïsme (Museo de arte e historia del Judaismo) de Paris y continua hasta el 7 de marzo, demuestra los limites de cuanto los judios extranjeros de Europa del siglo XX se podian convertir en nativos. Acompañada por un lujoso catalogo, “El Esplendor de la Casa de Camondo” presenta el destino de una familia, originalmente de España, que acumulo una fortuna bancaria luego de ser expulsados a Turquia y luego Italia y finalmente, en 1868, optando por establecerse en Francia. Sus descendientes, los ultimos de los Camondos, fueron deportados de Francia durante la IIª Guerra Mundial y asesinados en Auschwitz.
Este destino tragico esta expresado en las sombrias, altamente teatrales fotografias incluidas en la actual exhibicion, tomadas por la dotada fotografa israeli radicada en Tel Aviv, Tali Amitai-Tabib, una nativa de Kvutzat Kinneret. Las imagenes de Amitai-Tabib muestran uno de los mayores regalos de la familia Camondo a Francia, el Musée Nissim de Camondo un palacio sobre la calle de Monceau equipado con esplendidos muebles del siglo XVIII y otras decoraciones, del cual lo mas tocante on exquisitos broches de corbata regalados a Nissim de Camondo por su amante americana. (Confusamente, el Musée Nissim de Camondo es llamado asi no por este caballero, sino mas bien por su bisnieto, tambien llamado Nissim, quien murio heroicamente en la Primera Guerra Mundial. Marcel Proust, un amigo de la familia y, de acuerdo a algunos relatos, un ex amante del joven Nissim, envio una nota de simpatia.) Los broches de corbata mencionados, que incluyen uno divertido de un pequeño raton formando una horquilla hacia una perla, son prueba que la familia Camondo fue amada por algunos, un importante recordatorio en medio de la irritabilidad tipicamente gala que parece haber rodeado la mayoria de la filantropia de la familia.
En 1911, a su muerte, Isaac de Camondo, (nacido en Paris en 1851), un bon vivant, compositor amateur y avido coleccionista, lego una cantidad masiva de pinturas de grandes impresionistas y post-impresionistas al Musée du Louvre (docenas de las cuales estan ahora en exposicion en el Musée d’Orsay. Estas incluyen siete Manets, 14 Monets y cinco Cézannes — todas obras maestras y, aun en la epoca en que el las adquirio, tesoros altamente valorados. Para asegurarse que las puertas del archiconservador Louvre se abririan a estos artistas, algunos de los cuales, como Degas, Renoir y Monet, estaban vivos aun en esa epoca, Isaac agrego una donacion en efectivo para pagar por su "instalacion". Aun asi, luego de este asombroso regalo, el Louvre rechazo dar a Isaac un lugar en su Comite de Adquisiciones, con el fundamento que el era un "extranjero."
De igual manera, ciudadanos del mundo del arte parisino- incluso vendedores que se beneficiaron de el, como el conocido Ambroise Vollard- hablaban mal por detras de de Camondo, y en 1920 el ingenioso escritor de arte Félix Fénéon publico la supuesta respuesta inocua de Isaac a un potencial chantajista: “Señor, Yo he sido acusado de matar a mi padre, violar a mi hermana, robar bancos y firmar obras musicales realmente compuestas por mercenarios desesperados. Si usted puede acusarme de algo nuevo, yo abrire mi billetera. Sobre todo, no espere triunfar afirmando que yo no entiendo nada de pintura. Yo soy a menudo reprochado por eso."
A pesar de tan repetidos reproches, Isaac no solo entendia de pintura francesa, sino que tambien era un perspicaz coleccionista de arte asiatico, cientos de obras las cuales el tambien dono al Louvre. Ahora en exhibicion en el Musée Guimet de Paris, estas incluyen una deliciosa vasija de vino de bronce china en la forma de un elefante. A diferencia del coleccionista promedio de arte asiatico de fin de siglo, Isaac no solo codiciaba famosas impresiones japonesas como Hokusai, sino tambien la mas rara y misteriosa Sharaku. Precisamente como cuando el obligo al reacio Louvre a aceptar artistas vivos, Camondo tambien se dedico a hacer a convertir a creadores asiaticos menos conocidos en figuras establecidas, convirtiendo a extraños en nativos y reconociendo el valor en los presuntos extranjeros, tambien.
El primo apenas mas joven de Isaac, Moïse de Camondo no era un coleccionista menos apasionado, y construyo y amoblo lo que es ahora el Musée Nissim de Camondo en imitacion del Petit Trianon, un famoso lugar de reunion del siglo XVIII para Madame de Pompadour y Marie Antoinette. La casi sofocante grandeza burguesa que resulto tiene algo que ver con la voluptuosidad del cambio de siglo epitomizada por el ficticio esteta Des Esseintes en la novela de Joris-Karl Huysmans, “A Contrapelo (À Rebours)”. Pero, la familia Camondo aun parecia ir a contrapelo en Francia, a pesar de su insistente generosidad. Tan concientes estaban ellos de su status de extranjeros que no tomaron posicion publica durante el Caso Dreyfus, y coleccionaro trabajos de Degas, a pesar del notorio antisemitismo del artista. Isaac, un devoto wagneriano, incluso hizo un peregrinaje al primer Festival de Bayreuth en 1876.
Aunque eran donantes generosos de arte liturgico para la sinagoga sefaradi sobre la calle Buffault, los Camondo eran vistos solo ocasionalmente rezando alli. Claramente una familia laica, asimilada en sus propias metes, los Camondos eran no obstante llamados al Consistorio de Paris, el que administraba los temas religiosos judios, por respeto a su posicion en la comunidad judia.
En cuanto a su status entre los no judios, la hija de Moise, Béatrice de Camondo era una jineta obsesiva que implicitamente confiaba en sus amigas de la clase alta. Ella continuo compitiendo en eventos ecuestres aun despues de la Ocupacion Nazi de Francia, y fue finalmente deportada a su muerte, junto con su hijo e hija y su ex marido Léon Reinach. Bravo por los amigos ecuestres franceses.
“El Esplendor de la Casa de Camondo" concluye con una amplia seleccion de documentos de la epoca de la ocupacion alemana, incluyendo un archivo de ingreso de la Gestapo fechado 24 de marzo de 1943 que declara que Reinach “posee caracteristicas tipicas judias (nariz encorvada, labios finos y circuncidado, y aparentemente no religioso). Ademas, el se comporta en [el campo de detencion de Drancy] en una forma insolente y pretensiosa, y nosotros recomendamos que el y su familia sean pronto asignados a uno de los transportes de judios."
La apatia hacia el destino de estos archi-patriotas- si no el veneno verbal antisemita dirigido a ellos- por parte de la sociedad y el gobierno frances hizo que mas de un visitante frances a esta exhibicion reaccionara airadamente. El critico de arte Philippe Dagen escribio acidamente en el periodico Le Monde: “Asi es como el gobierno frances expreso su gratitud a los descendientes de aquellos que lo habian desbordado con donaciones inestimables."

Fuente: Forward
Foto 1: El estudio principal de la Casa Moise de Camondo, Paris
Foto 2: De Turquia a Francia: el Conde Abraham- Salomon de Camondo y su nieto, Nissim de Camondo, sentados juntos en Paris alrededor de 1868.

Observen una presentacion en idioma frances del Musée Nissim de Camondo de Paris hecha especialmente en ocasion de la muestra:
http://www.youtube.com/watch?v=VMW8slY1u34

: