martes, 6 de octubre de 2009

CUANDO LOS SIONISTAS HICIERON UN TRATO CON LOS NAZIS (Parte 1 de 2)‏


Edwin Black

En la tarde del 7 de agosto de 1933, en el Nº76 de Wilhelmstrasse en Berlin, en un dia en que los judios bien vestidos en Alemania no podian pararse en la calle sin miedo, cuando los obreros kibbutzniks en Palestina se secaban orgullosamente la transpiracion del mediodia de sus frentes, cuando los ansiosos empresarios alemanes se preocupaban porque el proximo telegrama cancelaria aun otra orden para cada vez mas invendibles bienes del Reich, cuando los organizadores nazis a traves de Europa alegremente revisaban estadisticas sobre poblaciones judias y bienes judios dentro de su medio, cuando los camisas negras polacos golpeaban ferozmente a judios en las plazas de las ciudades, cuando los desempleados comunes alemanes se preguntaban donde encontrarian suficiente dinero para la proxima comida, cuando los jovenes chicos judios en las escuelas alemanas eran forzados a pararse dolorosamente ante sus compañeros como ejemplos de detestables parasitos, cuando los desafiantes judios a traves de America e Inglaterra elevaban sus puños furiosos proliferando su castigador boicot anti-aleman, cuando los exportadores judios palestinos se preguntaban nerviosamente si su mayor cliente, Alemania, tomaria represalias, cuando miles de judios alemanes sin techo existian como refugiados y algunos en campos de concentracion, cuando los proyectos para la juderia en Europa parecian terminados, en este desgraciado dia en el primer verano del regimen de Hitler, una delegacion oficial de cuatro sionistas palestinos y alemanes y un empresario palestino independiente fueron llevados a una reunion en la habitacion de conferencias del Ministerio de Economia. Los judios habian sido autorizados por una combinacion de organismos judios y sionistas a negociar con el Tercer Reich.
Despues de horas de reñido debate, Hans Hartenstein, director de la Oficina del Reich de Control de Moneda, estaba por llevar la reunion a un cierre inconcluyente cuando un mensajero del Deutsche Reichpost entregaron un telegrama del consul aleman en Tel Aviv. El telegrama advertia a Hartenstein que una coalicion de intereses oficiales y comerciales sionista en Palestina era la mejor manera para romper el creciente boicot anti-nazi mundial liderado por los judios que estaba hiriendo al regimen de Hitler en sus primeros meses. Un trato con los sionistas seria necesario.
Y asi se hizo. El Acuerdo de Transferencia fue creado. No hubo copia impresa del contrato con los nombres escritos al final. El acuerdo fue realmente un decreto oficial del Reich, 54/33, publicado tres dias mas tarde, el 10 de agosto por el Ministerio de Economia del Reich. El decreto autorizaba a los sionistas a crear dos compensaciones de transferencia, una bajo la supervision de la Federacion Sionista Alemana en Berlin, una bajo la supervision de la compañia fiduciaria de la Palestina inglesa en Palestina. La oficina en Tel Aviv fue llamada Haavara Trust and Transfer Office Ltd. A menudo llamada Haavara Ltd., esta corporacion fue organizada bajo el codigo comercial palestino y operada por gerentes de negocios. Sus existencias eran completamente manejadas por el Banco Anglo-Palestino, que fue mas tarde renombrado Bank Leumi.
Haavara, the Hebrew word for transfer, quickly became a synonym for transfer.
El trato fue este: Los judios podian abandonar Alemania antes de ser pauperizados, y llevar algunos de sus bienes con ellos en la forma de nuevos bienes alemanes que el movimiento sionista entonces venderia en Palestina y finalmenta a traves de mucho del mercado mundial. Las ganancias serian dadas a los inmigrantes, con una porcion reservada para proyectos de construccion del estado tales como infraestructura industrial y adquisicion de tierras. Los judios no podian ingresar a Palestina sin un llamado "Certificado Capitalista" emitido por los britanicos probando que ellos poseian el equivalente a $5,000. La transferencia hizo esto posible. Dirigiendose a mas que solo inmigrantes activos, el Acuerdo de Transferencia permitio a los "inmigrantes potenciales" proteger sus bienes en estas especiales cuentas bancarias a las que nuevamente no podia accederse sin adquirir y revender bienes alemanes. Entre las cuentes de inmigracion activa y potencial, el aparato de Transferencia significaba millones de marcos del Reich- tanto para los alemanes como para los sionistas. Cuanto mas bienes los alemanes vendian, a mas judios se les permitia salir de Alemania hacia Palestina, y mas dinero ellos dispondrian para levantar el Estado Judio. El precio de este exodo vinculado al comercio seria el abandono de la guerra comercial contra la Alemania Nazi. El agotador, boicot anti-nazi mundial que los organizadores prometieron en voz alta que derrocaria al regimen de Hitler en su primer año, esta creciente coalicion no sectaria e interrelidiosa que cada dia estaba descaradamente rompiendo contratos alemanes, cancelando ordenes alemanas y desviando los negocios alemanes a cualquier competidor de la era de la Depresion que se parara delante. Los judios estaban respondiendo la pelea. Los nazis habian decidido que este contraataque moral- uno al que Alemania temia mas que a cualquier otra respuesta judia- debia ser frenada. No importaba si el boicot anti-nazi podia haber tenido exito en terminos reales. La efectividad del boicot no es medida en dolares ni peñiques sino en medidas de miedo. Los alemanes temian a la mitica manipulacion global economica de la conspiracion judia internacional mas que a ninguna otra.
Los sionistas lo entendieron. Y pronto las organizaciones de boicot judias y no sectarias se agarraron de eso. Uno no podia salvar a un judios de los nazis sin vender bienes alemanes. Eso mato al boicot antes que el boicot pudiese siquiera comenzar a matar al Tercer Reich.

Ramas completas de juderia se marchitarian, pero el troncho sobreviviria- las palabras de Herzl. Esta vez, esta vez crucial y sin paralelos, la emergencia judia seria utilizada para asegurar un futuro, no para rescatar un pasado. De esta crisis de humillacion, agonia y expulsion llegaria el santuario, el caracter de nacion y un nuevo judio, con un nuevo hogar propio. En sus distintas formas publicas y privadas, el Acuerdo de Transferencia traslado a unos 60000 judios y $100 million - casi $1.7 mil millones en dolares de hoy dia- a la palestina judia. Finalmente, el Acuerdo de Transferencia salvo vidas, rescato bienes y creo la infraestructura del estado judio venidero.
DURANTE LOS años de la preguerra, el Acuerdo de Transferencia separo al mundo judio, volviendo a lider contra lider, provocando rebelion y hasta asesinato dentro del Yishuv y la Diaspora por igual. El ministro del exterior de facto de la Agencia Judia (Sojnut), Haim Arlosoroff, quien habia negociado el acuerdo en nombre del partido Sionista Mapai, fue asesinado en una extension vacia de la playa de Tel Aviv (cerca de donde el Hilton Tel Aviv se levanta ahora), presumiblemente por Sionistas Revisionistas del campo de Ze'ev Jabotinsky. Los Sionistas Revisionistas, una minoria en esa epoca, se oponian violentamente al acuerdo con los nazis. Hoy las calles donde sea en Israel estan nombradas Arlosoroff.

Fuente: The Jerusalem Post

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